Capítulo LXII: Tequilas y quizás.

5:57 1 Comments A+ a-

Para que luego digáis... las 3.16, me levanto a las 7.30... y aquí estoy para poneros el nuevo capi... Maca, me debes cuatro horas de sueño, ya lo sabes... jejeje
Pues nada, que espero que os guste y ya no pidáis más capis hasta al menos el viernes, que este finde a sido un maratón bastante monumental, así que no os quejéis...
Un besazo y gracias por el entusiasmo y el apoyo :)

Silvy (K) ^^



Cuando la canción terminó hubo una leve pausa, una leve pausa que se me hizo eterna hasta que escuché el aplauso de Claire, a la cual siguieron el resto.
Tara salió con mi guitarra y la cogí, sentándome alejada del centro y mirando de frente, evitando su mirada para no empezar a llorar allí mismo. Tara carraspeó y me miró, pero no pude devolverle la mirada, no podía…
-Esta canción… -Ella se volvió a mirarme pero no podía, ella suspiró y siguió hablando-. Es de esas que te gustan escuchar cuando estás enamorada… y que siguen gustándote cuando tu corazón está hecho trizas… espero que guste por la primera opción…




Canté la canción muy bajito, realmente estaban viniendo recuerdos a mi mente que había bloqueado y todos de golpe, no quería que eso siguiera así por lo que intenté visualizar sólo la canción…
Era realmente difícil, mucho más sabiendo que él estaba mirándome como algún otro… sentía sus ojos, los de Tara, podía ver los de Ashley desde la furgoneta, podía imaginar los de mis amigas… y podía sentir los de Nessie, que empezó a mandar imágenes extrañas para distraerme, formas y colores, cosas que hacían una especie de cuadro dibujado por un niño.

Sonreí para agradecérselo y seguí tocando la canción visionando esa película de colores y formas que haría las delicias de cualquier niño mientras la voz de Tara resonaba melódicamente con las notas de mi guitarra. Me abstuve de escuchar la siguiente presentación y me metí a la furgoneta, entonces vi el título y mi corazón dolió al escuchar esa canción.




Era como si esa canción hablara de mí… yo era la mala de la canción, sólo tenía necesidad por él cuando pensaba que yo no era la única en su vida… era yo la del estúpido corazón. La puerta de la furgoneta se abrió de un tirón y ahí estaban mis amigas con una sonrisa para mí.
Me hicieron bajar y Ashley rió siguiéndonos, nos pusimos a bailar las cuatro, por parejas, dando vueltas, haciendo cambios de pareja… entonces vi la oportunidad.

Fui llevándolas hacia el centro, hasta que pude alcanzar la mano de Kyle y solté a Maca al lado de Sean, ella se sonrojó y él sonrió amablemente sacándola a bailar. Kyle alzó una ceja y yo sonreí acercándome a Ashley y Ainhoa, le solté y me aferré a Ashley, que empezó a reír al ver lo coloradísima que se había puesto Ainhoa y la amable sonrisa que Kyle le mostraba…
-¡Qué tiernos! ¿Verdad? –Asentí-. Es... creo que tienen razón cuando dicen que están hechos para nosotras… Kyle es tan encantador, le pega un montón a ella… y Sean…
-Está loco… -Reí-. Pero tiene un gran corazón y creo que Maca sacará a relucir su lado tierno… que también lo tiene aunque menos evidente…
-¿Y tú qué vas a hacer? –La miré mal-. Es sólo una pregunta…
-Pues no sé… -Sonreí-. De momento, ir a beber algo, que me muero de sed…

Ella sonrió y cogí unas cuantas botellas de agua para llevarlas a la furgoneta, cuando me volví me topé con él y se me cayeron dos que él cogió al vuelo.
-Creo que sería mejor una cesta… -Sonrió-. Deja que te ayude, anda…
-Puedo sola… -Me miró alzando las cejas-. Si no te pones detrás para empujarme…
-¿Empujarte? Tú me has empujado a mí… y ni siquiera me has pedido perdón… -Alcé una ceja-. Me has hecho daño…
-Ya… -Reí-. No pienso disculparme… -Le señalé las botellas y suspiré-. Anda, lleva tú un par y ve delante…
-Vale… -Rió-. ¿Necesitáis tantas botellas? –Le miré mal-. Vale, las llevo y me callo…
-Mejor… -Las cogió con una enorme sonrisa y se giró-. ¡Espera! –Se giró confuso-. Las canciones… -Suspiré-. Las ha escogido Claire…
-Lo sé… -Sonrió-. No pasa nada…
-O sea… yo… -Suspiré-. Nos mandábamos correos… y yo a veces le mandaba alguna canción por cómo me sentía o… no sé. Ella hacía lo mismo. El caso es… que bueno, hubo algunas que le gustaron y por eso he pensado que…
-Tranquila… -Sonrió de nuevo y alzó la cabeza mirando al infinito-. Creo que te están reclamando… piden agua… -Rió levemente-. Deja de darle vueltas… sabes cómo funciona esto y creo que no hace falta que te explique lo mucho que me angustia que le des vueltas a algo…
-¿Seguro? –Suspiró y asintió-. Vale… pues… -Suspiré e hice una mueca, él me miró raro y le abracé, con botellas incluidas. Él apoyó su mejilla en mi cabeza y suspiró allí, haciéndome perder el hilo hasta que algo me devolvió a la realidad-. Ya… -Me alejé sin mirarle, pero pude ver de refilón una enorme sonrisa-. Venga… empieza a andar…
-Vale… -Suspiró-. Pero que conste que no has llegado al cupo… -Le miré raro y él sonrió-. Sólo han sido diecisiete segundos…

Se giró y se marchó, no pude hacer más que suspirar y seguirle… al menos le había explicado lo que pasaba con las canciones y eso me dejaba un respiro para lo que venía… Claire se acercó a mí corriendo y se colgó de mi cuello, vi su pregunta en mi mente a través de Nessie, por lo que negué. Ella me miró apenada y yo sonreí.
-¿Lo estás pasando bien? –Asintió con una mueca-. Ya verás… el final es lo mejor… vamos a volver a subir y te quiero arriba conmigo cuando Tara cante, ¿vale?
-Vale… -Sonrió y miró hacia Seth que se alejaba ya de la furgoneta y nos guiñó un ojo-. Pero luego a cambio tendrás que bailar toda la noche… ¿vale?
-Vale… -Suspiré-. Espero que te guste la última parte… ¿vale?
-Seguro…

Me reuní con mis compañeros y organizamos la última parte, la más larga. Me tocó subir a mí primero, me acerqué al centro y miré a Collin que me encendió las luces y se lo agradecí con un gesto.
-Bueno… -Miré mi reloj-. Creo que ya es la hora… Felicidades Claire… -Reí al ver a Quil dándole un beso en la mejilla mientras ella sonreía enormemente-. Bueno… espero que la siguiente te guste… te la dedico especialmente porque sé que es una canción que estás escuchando mucho últimamente… disfruta de tu día…








Ella rió cuando empezó a sonar la canción, la conocía a la perfección y sabía lo que representaba para ella… Todos los chicos hicieron un hueco para dejarla bailar, aunque tiró de Vera para no quedarse sola. Ambas empezaron a moverse del mismo modo y yo las imité riendo desde arriba, Nessie y Leah se unieron, me dejó bastante descolocada ver a Leah bailando así con ellas.

Me acerqué al borde y Claire corrió y empezó a gritar la canción conmigo, reí al ver la cara de Quil, alzó una ceja cuando le miré y negó, no pude evitar reír mientras cantaba. Ashley la llamó y Claire subió conmigo al escenario para terminar la canción.
-Bueno… ¿qué? ¿Cómo se siente una a los dieciséis?
-Pues… igual… -Rió-. Pero con tu canción mejor… -Se mordió el labio-. Pero es que tengo un gravísimo problema…
-¿Qué gravísimo problema es ese? Que seguro que entre todos lo solucionamos… ¿Cómo puede haber algo sin solución en tu cumpleaños?
-¿Harías algo por mí? –Asentí-. ¿Lo que sea? –Alcé una ceja-. ¡Jo! Es que yo… no me puedo saltar un turno… así no puedo…
-Eh… -Algunos rieron y yo no supe qué decir… ella se mordió el labio con una sonrisa maliciosa y yo suspiré-. Venga… por ser tú, te cedo el turno…
-Pero… -La giré y la empujé hacia la rampa-. Eso no es lo que yo quería… yo quería que… -Le tapé la boca y la miré mal-. Vale, captado…
-Bueno… pues… -Me rasqué la cabeza y suspiré-. Siguiente canción, que no sé cual va…









Al escuchar la batería y la guitarra supe cual venía… ni hecho a posta… no me quedó otra que reír y hacerlo con esa alegría que me daba esa canción…
Me acerqué hacia Collin que seguía riendo y él movió la cabeza de manera divertida. Después miré a Ainhoa y Maca que no paraban de reír cuando Claire les contaba… así que miré para otro lado… Brady, Kyle y Sean hacían el ganso… así que me fijé en ellos, al menos no me distraería demasiado de la canción. Empezaron a corretear por ahí empujando a todos y aquello me recordó a Cádiz, empezaban a empujarse a lo bruto entre ellos y dando pequeños culatazos a las amigas de Claire.
Me señalé la oreja cuando Nessie me miraba con su mirada perspicaz, esa que ponía cuando leía algo en mi mente que no quería que supiera. Subí mis cejas al cantar el estribillo, quería que captara el mensaje pero ella rió negando. Todos aplaudieron al final y yo dejé paso a Tara, que entró con muchísima energía y riendo.
-¡Felicidades Claire! –Salí con la guitarra y me senté-. Dale con ganas eh, Dar…







Pude verlo, iba a liarla… reí mientras calentábamos motores y ella iba calentando su voz. Todos se quedaron parados mirando, Claire miraba asombrada y yo me mordía el labio mirándola…
Ashley salió y se sentó a mi lado, cantando conmigo fuera de micro y chascando los dedos marcando el ritmo. Cuando Tara gritó todos rieron y aplaudieron, yo empecé a reír sujetando fuerte mi guitarra mientras Ashley aplaudía y reía.

Tara nos miró y se levantó, sentándose en mis pies y mirándome cuando íbamos a terminar la canción, podía oír las risas de Mark desde la furgoneta y las de Aaron desde el teclado.
-Gracias… -Dijo suspirando-. Bueno… ahora os dejo con algo más movidito… -Le di mi guitarra y cogí mi micro riendo-. ¡Dale duro, leona…!
-No podré superarte… -Reí colocando el micro-. Bueno… es una canción que creo que va a gustaros mucho… -Miré hacia los chicos-. Es de esas de saltar y empujar… es lo vuestro…








Vi como tomaban posiciones y empezaron a deambular, me miraban mal porque no parecía mucho de saltar… les hice una seña cuando empezó el estribillo y pude ver a Brady saltar de un lado a otro, escuchando a mis espaldas las risas de Gabriela.
Claire cantaba con una de sus amigas y con Vera, aplaudían y empujaban a los chicos cuando alguno estaba cerca, Vera saltó a las espaldas de Seth y empezó a sacudir su brazo mientras él la sujetaba para que no se cayera, su sonrisa no era de las buenas… era más bien postiza.

Me sentí realmente mal por esa sonrisa, hubiera preferido verle serio que fingiendo… debió de notar que me preocupaba porque me sacó la lengua con una divertida mueca… pero él también pareció notar que la sonrisa que me arrancó no era de las de verdad…
Cuando terminó la canción pude escuchar su voz en mi cabeza, esa voz que decía algo que me desquiciaba…
-Sabes que sí… sabes que no puedes intentar negarlo, que las canciones tienen su significado, no trates de engañarte… él lo siente igual que lo sientes tú…
-La siguiente canción… -La miré mal cuando me repitió que no me engañara-. Nessie… -Suspiré-. Es una de mis favoritas, la llevamos tocando desde mi regreso… espero que os guste.









Ella hizo una mueca y le miró, mi mirada se dirigió sólo a Claire que hizo otra mueca, así que me fijé en sus amigas, que parecían simplemente disfrutar de la canción sin darle vueltas a la letra…
No pude disfrutar de la canción, no pude sentirla como había hecho en otras ocasiones… y la misma voz en mi cabeza resonó cuando terminaba, haciendo que me confundiera… ¡genial!

Tara salió tarareando la siguiente canción con Ashley, las miré y me reí cuando Ashley me empujó fuera del escenario, se acercó a mi oído y susurró.
-Es la fiesta de Claire… y ella te quiere abajo, así que déjanos a nosotras ahora y ve a disfrutar de la fiesta, ¿quieres?
-¿Seguro? –Ella asintió-. ¿En serio?
-Venga… largo.
-Vale, vale… -Reí-. Darle duro…

Me bajé de un salto y me acerqué a Claire que me abrazó justo cuando empezaba a sonar la canción de Tara, esa que me daba tan buen rollo.





Reí al verlas desde abajo, Claire empezó a dar vueltas conmigo y pude ver como Vera nos miraba sentada al lado de Kira, parecían realmente aburridas. Me acerqué a ellas y saqué a bailar a Vera, lo intenté con Kira pero señaló su tripa y negó.
Claire empezó a dar saltos de izquierda a derecha y yo la imité pero avanzando, cogiéndolas a ambas y arrastrándolas conmigo. Tara rió al vernos y yo seguía con aquella especie de tren humano al que pronto se unió Nessie por la cola, cogiendo a Vera.
Cuando pasamos por el lado de los chicos nos miraron raro y empezaron a reír, Claire cogió a Quil y yo me giré hacia el otro lado para no verlo, pero pude notar un pequeño cambio de ritmo y lo imaginé tras Claire… al girarme allí estaba Quil algo preocupado por perder el ritmo.

Seguí con mi tren hasta mis amigas, cogiéndolas por la espalda y colocándolas en cabeza, Ainhoa se quedó en segundo lugar y Maca iba delante, reíamos y pronto pude ver a Sean y Kyle haciéndonos la competencia.
-¡Plagiadores! –Reí al gritarles y ellos me sacaron la lengua-. ¡La nuestra es más larga!
-¿Seguro? –Sean colocó a Seth en primer lugar y empezó a empujarle-. A por todas las chicas que quedan, ¡corre…!

Empezamos a encorrernos unos a otros, reclutando gente para nuestros trenes… Claire se reía muchísimo, Seth iba a destajo reclutando chicas… eso se le daba bien. Maca iba suplicando a las amiguitas de Claire… pero ellas querían ponerse en el tren de los chicos…
Nessie miró mal cuando Jake fue a unirse a la de Seth, así que cambió de opinión y se puso con nosotras. Leah empezó a reír y se colocó en primer lugar, la chupi panda entró al final de la cola, así que cuando la canción terminó nuestro tren estaba compuesto por catorce personas… pero ellos llevaban veintidós. Tara empezó a aplaudirnos riendo y Ashley le dijo algo que hizo que riera mucho más mientras desaparecía, Tara dijo algo a Allen y éste al resto del grupo.
-Venga, veo que habéis hecho un gran trabajo con el baile… pero ahora quiero que os pongáis en una fila todas las chicas y en otra todos los chicos… -La miré mal mientras todos revoloteaban, Nessie me empujó hacia la fila de las chicas-. Muy bien… ahora vamos a hacer una canción que no estaba prevista… pero que os gustará, creo. El juego es el siguiente… -Ashley empezó a poner hojas de papel de periódico extendidas por el suelo-. Tenéis que bailar con vuestra pareja sin pisar fuera de la hoja cada vez que haga sonar el triángulo… ¿A que parece fácil? –Todos rieron-. Bueno… luego complicaré la cosa, porque vais a tener que cambiar de parejas sin pisar el suelo, sólo las hojas de papel… las cuales iréis doblando cada vez que haga sonar el bombo… -Empezó a reír-. Adelante con la canción…





Me tocó frente a un amigo de Claire, apenas había empezado la canción cuando sonó el triángulo. Quil saltó a mi hoja de papel y el chico se salió de ella, Quil se encogió de hombros y empezó a girarme cuando sonó el bombo. Dobló la hoja de papel con sus pies y sonó el triángulo. Él saltó acercándose cada vez más a Claire cuando Kyle saltó a mi hoja, empezamos a bailar y sonó el bombo… se reducía el espacio y apenas podíamos mover nuestros pies cuando hizo sonar el triángulo de nuevo. Kyle se intercambió con Sean y Quil cambió con cara de pocos amigos.
Volvió a sonar y la pareja de Claire se salió, como la de Kyle. Pensé que haría sonar el bombo pero volvió a sonar el triángulo, Quil cambió con Sean y Kyle hizo como que se salía… muy sutil.
La canción terminó y Tara aplaudió, mirándonos a todos los que aún estábamos dentro de los papeles… apenas una docena.
-Sí que sois hábiles… -Rió-. Bueno… volveremos a tocar de nuevo la canción a ver si esta vez quedáis menos…
-¿Qué se gana? –Grité riendo-. ¿Hay premio?
-Sí… -Masculló-. Luego te daré yo premio… -Rió conmigo y negué-. Vale… déjame pensarlo… -Miró a Claire-. Que lo decida la cumpleañera, ¿no?
-¡Eso! –Claire se acercó corriendo al micro y rió-. El premio para los ganadores será… -Lo pensó-. ¡Un body tequila! –Rió muy alto-. Siempre he querido saber qué es eso…
-Eso me gusta… -Tara asintió mientras Claire volvía con Sean-. Empecemos de nuevo…

Empecé a bailar con Quil mientras él no ponía buena cara, entonces vi como Kyle se acercaba a Ainhoa y la invitaba a bailar de manera muy cortés por lo que reí con Quil justo cuando sonaba el triángulo. Sean se salió “sin querer” y se dirigió a bailar con Maca. Jake saltó a mi trozo de papel y empecé a ver como algunos se tambaleaban y se salían del papel. Examiné la situación, Vera bailaba ahora con Quil, Claire con Brady, Seth con Nessie… y yo con Jake. Ashley empezó a mover a las parejas para que estuviéramos más juntos y poder cambiar de pareja con más facilidad cuando sonó el triángulo. Jake saltó a su papel mientras Seth levantaba a Nessie, los tres hicieron equilibrios mientras Quil y Brady se cambiaban, Nessie pasó a brazos de Jake y Seth saltó a mi lado, tuve que agarrarme para no salirme… aunque en parte quería haber salido.
Tara tocó el bombo y Brady y Vera hicieron como que se salían, pensé en hacer lo mismo pero ya estaba más cerca de Seth mientras él reía y doblaba una vez más la hoja. Esperaba que Tara volviera a tocar el triángulo pero no, volvió a sonar el bombo… Claire subió a los pies de Quil riendo y Jake cogió en volandas a Nessie, justo cuando Seth hacía lo mismo conmigo. Claire dio un traspié y salió del papel, Jake y Seth se miraron retándose, cuando Nessie le estampó un enorme beso a Jake que hizo que se tambaleara y se saliera justo cuando acababa la canción…
-¡Tenemos ganadores! –Gritó Tara riendo-. ¡Un aplauso!
-¡Body tequila! –Gritó Claire emocionada mientras Seth me dejaba en el suelo, me odié a mí misma por haber abierto mi bocaza-. ¡Quiero ver qué es eso! ¡Venga! –Aplaudió y me miró raro-. ¿Tan malo es?
-¿No sirve un tequila normal? –Dijo Seth riendo sin ganas-. A mí me vale con eso…
-Pero quiero ver qué es eso… -Puso cara de pena cuando Nessie traía con Quil el tequila, la sal y el limón-. ¿Y todo eso?
-Será muy divertido… -Nessie me dio la sal y empezó a servir el chupito-. Elige sitio… -Suspiré al ver cómo Quil cortaba una rodaja de limón-. ¡Vamos! O lo haré yo… -Suspiré-. Yo digo cuello… ¿Claire, qué opinas…? Es tu cumpleaños…
-Pues… cuello.
-Genial… -Suspiré y Seth me miró con cautela, asentí y se arrodilló frente a mí mostrándome su cuello-. Atenta, Claire… luego quiero que hagas lo mismo con Quil…

Quil me miró fatal mientras Seth reía y Claire me miraba con atención. Puse un poco de sal en su cuello mientras Nessie le daba mi chupito, pude notar que se estremecía cuando lamí su cuello, me tendió el chupito y Quil le dio la rodaja de limón, la cual puso con cuidado entre sus labios mientras me tomaba el chupito, cuando levanté mi cabeza para tomarlo él se levantó para ponérmelo más fácil, cogí el limón con cuidado de no rozar sus labios… sabía que si lo hacía estaría perdida y él me ayudó en eso…
-Gracias… -Dije cuando pude hablar y él negó-. ¿Te toca?
-Sí… -Claire nos miraba con los ojos muy abiertos-. ¿Puedo escogerte a ti? –Dijo Seth mirando a Claire-. ¿No querías saber…?
-Ni se te ocurra… -Quil le fulminó con la mirada cuando él reía-. Te arrancaré la cabeza.
-Vale, vale… -Me miró riendo-. ¡Qué violento! –Alcé una ceja cuando Nessie apareció con la sal-. Yo digo… cuello también…
-Genial… -Dijo Nessie con una sonrisa-. Así en igualdad de condiciones…

Seth cogió la sal y me miró con cautela, estiré mi cuello y él puso la sal con cuidado, se acercó despacio y pude notar el calor de su lengua en mi cuello, pude notar que su mano estaba en mi cintura y que yo me había aferrado a él… Temí que pudiera ver mi nuca, pero se alejó aunque siguió sujetándome con una mano y mirándome mientras se bebía el chupito y Nessie me daba la rodaja de limón que coloqué en mi boca… yo no era tan hábil para sujetarlo tan suavemente como él. Tuve que morder un poco para que no se cayera, él se bebió el tequila y se acercó despacio a mis labios, no cerró los ojos ni desvió la mirada de la mía, simplemente lo mordió con cuidado de no rozar mis labios, se alejó y noté que mi corazón se había parado cuando volvió a latir.
Hubo un murmuro general y algunos gritos de emoción, noté su mano aún en mi cintura y él pronto la retiró, me entraron ganas de ser yo la que quitara ese trozo de limón de su boca pero él lo tiró dedicándome un escueta sonrisa.
-¡Menudo premio! –Dijo Tara riendo-. Yo quiero hacer uno así…
-Cuando quieras, encanto… -Aaron empezó a reír cuando ella le miró mal-. Tenía que intentarlo…
-Bueno… sigamos… la siguiente canción me encanta porque expresa lo que yo siento cuando empiezo con alguien… y es que cuando el amor te arrastra, a veces pasan estas cosas…
-La pareja ganadora debería abrir este baile, eh… -Ashley rió y yo la miré mal dejando de mirarle a él-. Aunque creo que mejor que lo abra la cumpleañera…





Quil sacó a bailar a Claire con una sonrisa y yo no supe muy bien qué hacer… él frunció sus labios y me tendió su mano, la cual no pude rechazar. Él empezó a seguir el ritmo algo serio, así que yo hice una mueca y lo seguí con él alejándome un poco. Nuestras manos unidas marcaban el ritmo, él empezó a sonreír y yo no pude evitar hacer lo mismo. Dejé que mis caderas llevaran el mismo ritmo que nuestras manos y él me giró despacio, aunque pude notar que lo hacía con cuidado de no hacerme sentir incómoda. Sonreí y él lo intentó, pero pude imaginar que la letra de la canción no le hacía tanta gracia como a Tara, así que me acerqué un poco más sacándolo de ese rincón oscuro al que parecía haber entrado.
Sonrió levemente, le saqué la lengua por alguna extraña razón y él rió levemente bailando conmigo, Claire seguía con Quil muy cerca nuestro, así que me acerqué a ella y empezamos a bailar las dos, dejándolos a ellos algo más parados. Pude ver que Vera estaba bailando con mis amigas y las llamé, se acercaron y empezamos a bailar unos con otros, pero cuando le miré pude ver que él parecía haber vuelto a su rincón oscuro.
Me subí al escenario bailando y me acerqué a Aaron, le pregunté si podíamos meter una canción más entre medio y él asintió, así que cogí mi guitarra mientras Ashley me miraba raro, escribí en la pizarrita el título de la canción entre la que sonaba y la suya y ella asintió.
Tara entró a la furgoneta y me preguntó, pero simplemente le señalé la pizarra y ella asintió. Pude escuchar cómo Aaron les indicaba cual venía ahora y salí con mi guitarra, una silla y el micro. Me senté en medio y empecé a tocar sin más aviso.




No pude mirarle, no era capaz. No entendía ni yo misma lo que estaba haciendo pero ahí estaba, cantando algo que una parte de mí quería chillar y otra quería acallar. Verle así me volvía loca, no podía verle sufrir tanto, era como si la parte egoísta de mí creciera cuando su mirada se perdía, como si cada vez que notaba que él se escondía tras una falsa sonrisa la parte que quería mantenerle alejado fuera perdiendo fuerza y espacio en mi cabeza.
Quizá no fuera el momento, quizá yo estaba completamente equivocada o quizá fuera que él era muy obstinado… o tal vez fuera yo la obstinada, la que estaba obcecada en estar alejada de él cuando cada camino que seguía parecía conducirme de nuevo a él.
Quizá me estaba volviendo terca, luchando contra lo que parecía ser algo que estaba grabado a fuego en mi vida y en la suya… pero algo en mí no se sentía bien haciendo lo que estaba haciendo, no era el momento, no era el lugar… y mucho menos era la manera. Me sentí fatal al acabar y ver su cara desencajada, como la de Nessie. Todos los que sabían lo que estaba pasando se quedaron algo noqueados, como si no supieran cómo reaccionar.
Me metí a la furgoneta y Ashley salió algo perdida, se acercó al micro y me miró mientras yo quería ponerme a llorar allí mismo, aunque lo evitaba por no arruinar la fiesta de mi amiga.
-Pues… la siguiente canción… habla de la vida, de qué ocurre cuando tienes que tomar decisiones que no sabes qué traerán… -Me miró-. Cuando sólo buscas ser feliz.



La canción me llegó al alma... había evitado tantos riesgos, riesgos con él. Incluso había hecho una estúpida lista de cosas que no debíamos hacer sólo para evitar lo que parecía que el mundo me había deparado. Intenté desaparecer y no sirvió de nada… intenté cambiar mi vida de pies a cabeza y seguía en el mismo punto, quizá había cambiado o simplemente me había vuelto loca de manera transitoria. Quizá no había cambiado tanto y seguía siendo la misma chica insegura que huía… sólo que ahora la escala de la huída había sido mayor que nunca…

Ashley me miró cuando estaba terminando la canción y me forcé a no llorar y a intentar una sonrisa que no salió. Se metió con nosotras y me abrazó fuerte, volvió a salir y le susurró algo al oído de Aaron para dirigirse al centro del escenario.
-Esta será nuestra última canción… y quiero dedicársela a alguien especialmente y a todos en general… -Suspiró-. No sé muy bien cómo explicar lo que siento ahora… sólo puedo daros un gran consejo que una amiga me dio… -Me miró con una sonrisa-. Carpe Diem…


Recordé aquel día que ella estaba tan indecisa, aquella despedida en el aeropuerto de Londres cuando ella se dirigía a Nueva York. Fue lo que le dije, que disfrutara de su momento… que nosotras siempre la apoyaríamos. Ahora me devolvía el consejo con una canción con un mensaje más claro del que yo le dí… Tara me miró preocupada y yo intenté sonreír.
Tara se adelantó y salió nada más que terminó la canción, se acercó a Aaron que empezó a reír como un loco y paró a los chicos que ya iban a recoger.
-¿Creíais que esto había acabado? –Gritó Tara-. De eso nada… ¡cómo vamos a terminar con una canción tan moñas… ¡no señor! Dale Aaron… ¡Vamos chicas!

Reímos y salimos las tres a cantar y bailar esa canción, Claire subió con nosotras y lo pasamos genial. La fiesta se alargó mientras recogíamos y mucho más, aunque mis compañeros ya empezaban a estar cansados como yo. Los primeros en marcharse fueron Jason, Kira y la chupi panda. Quil les dijo a mis compañeros dónde podían dormir, Nessie acogió a Ashley, Collin, Gabriela y Brady y se marcharon poco después. Varios coches llegaron para recoger a los amigos de Claire, quedando al final Ainhoa, Maca, Sean, Kyle, Claire, Quil, Seth, Vera, Leah y yo.
-Bueno… ¿Has tenido suficiente, jovencita? –Claire negó-. Venga… que mañana tienes que estar decente para la comida… ¿recuerdas?
-Vale… -Dijo suspirando-. ¿Es obligatorio irse ya, ya?
-Sí… no quiero que Sue nos vea entrar… se levanta muy temprano… -Miré raro a Leah que me explicó-. Le prometí a mi madre ayudarla y a la suya que estaría antes del amanecer en casa… -Miró al tímido sol que salía-. Y ya estoy incumpliendo mi promesa…
-Pero no quiero irme… -Masculló Claire y me cogió del brazo-. Me quedo con ella…
-Yo voy a irme a dormir ya… -Sonreí-. Estoy cansada y mañana tengo que hacer un montón de cosas antes de volver a Seattle… -Me encogí de hombros-. Mañana por la tarde habrá más, ¿vale?
-¿Prometido?
-Sí… -Reí-. Palabra de Osa Mayor… -Ella rió asintiendo-. Vamos… márchate, nosotros tenemos que ayudar a Quil a recoger…
-De eso nada… -Kyle negó-. Vosotras a dormir… ya nos encargaremos de recoger esto…
-Y lo haremos mañana… -Sean suspiró y Quil le miró mal-. Oye… no quiero despertar a los chicos… te prometo que mañana me tendrás aquí a las… -Miró su reloj-. ¿Once?
-En punto… -Dijo Quil-. Bueno… entonces… ¿La lleváis vosotras? –Leah asintió y él miró a Claire-. ¿Te veo mañana en la comida…?
-Pues… -Suspiró-. Eso parece… -Hizo una mueca y sonrió, sacó su hoja en blanco y su lápiz, escribió algo muy chiquitito que hizo sonrojar a Quil-. ¿Lo harás?
-No me queda otra… es lo que has escrito…
-Eso espero… -Sonrió y le dio un beso en la mejilla-. Hasta luego…

Ella echó a andar al trote y yo la miré raro… Quil empezó a ponerse nervioso y a temblar, por lo que le dije a Seth que le esperaba en la puerta de su casa. Empecé a conducir y a los dos minutos pude oír un sutil aullido, las chicas se miraron asustadas.
-Hay lobos por el bosque… -Reí-. Pero son inofensivos… tranquilas.
-No sé yo… esto parece… -Paré el coche frente a la casa-. ¡Menuda casa! –Ainhoa abrió sus ojos de par en par-. Madre mía…
-Ahora… -Maca negó-. Ahora si que no entiendo nada… -La miré raro-. Cuando hablabas de Seth yo pensaba en un chico… normalito, pero es un tío tremendo, con una casa tremenda… yo no me separaría por muy agobiada que estuviera… ¡Ay!
-Qué bruta… -Ainhoa negó mientras Maca se rascaba la nuca-. No le hagas caso… ya sabes cómo es… -Asentí extrañada-. ¿Algo va mal?
-No… no sé –Las miré y ellas me observaban atentas-. Creo que hoy ha sido una noche extraña… la falta de sueño…
-¡Ay, ay, ay! –Las tres dimos un respingo al oír a Sean mientras movía mi coche desde el maletero-. ¡Ay que susto os he dado!
-¡Idiota! ¡Bájate de mi maletero!
-Vale… -Suspiró-. Ni cuenta os habéis dado… -Estaba segura de que no había ido en mi maletero-. Seth me ha dado las llaves… para que no tengáis que esperar fuera.
-Gracias…

Las cogí con cara de pocos amigos y abrí la puerta, pudiendo escuchar unas patas ansiosas correteando por el parqué de la entrada. Cuando abrí Maila se tiró sobre mí, las chicas se asustaron un poco pero yo reí, Sean acarició a la perrita que se bajó y le siguió hasta la cocina donde le dio de comer.
-Seth ha dicho que le diera de comer… y que os alojarais…
-Donde queráis… -Me giré para verlos a ambos en la puerta, Kyle ponía una mueca y Seth reía, otra vez nos habían asustado-. Vera me ha dicho que vendrá en un rato… pero aún así creo que tendréis que compartir cama…
-No importa… -Maca sonrió-. Hubiera sido peor si hubiéramos tenido que dormir en el coche… así que… -Sean y ella se miraron fugazmente y ella agachó la cabeza-. Gracias…
-Bueno… serviros lo que queráis de comer mientras cambio las sábanas… no me ha dado tiempo antes de irme…

Kyle se metió a la cocina con Sean y empezaron a servirse mientras Seth subía las escaleras y Maila le seguía. Las chicas me miraron y las hice pasar a la cocina, pronto apareció Maila con un trozo de tela roja en su boca y se acercó a mí, dejándomelo en las piernas y empezando a ladrar. Me costó reconocer que ese trozo de tela fuera mi pañuelo…
Me levanté del tirón y los chicos me miraron raro, me quedé de pie mirando el pañuelo mientras Maila se dirigía ahora a su bol, como si hubiera cumplido con su misión… los cuatro seguían mirándome raro, Sean empezó a reír.
-¿Te ha dado un aire?
-No… es que… voy a ayudarle… -Me miraron raro pero salí y subí las escaleras, él estaba en su habitación cambiando las sábanas y sonrió al verme-. Vengo a ayudarte…
-Pensaba que alguien se había caído o algo… -Rió-. ¿Qué ha sido? –Me encogí de hombros y escondí el pañuelo en mi bolsillo trasero mientras él juntaba sus cejas-. ¿Estás bien?
-Sí… -Sonreí y le ayudé a quitar las sábanas-. ¿Le has dado tú algo a Maila? –Se quedó paralizado al negar-. No importa…
-¿Qué ha cogido? –Negué-. Darlene…
-El pañuelo rojo… -Rojo fue el color que tomó su cara-. No sabía ni dónde estaría… ¿Aún lo guardabas? –Asintió-. ¿Por qué?
-Pues… -Negó-. No sé… -Miró el corcho de su habitación y rió-. No puedo decirlo… -Le miré raro y volvió a reír-. Regla número 6… nada de temas comprometidos, ¿recuerdas?
-Vale… -Suspiré medio riendo y quité la funda de la almohada, hice una bola y se la tiré-. No te rías… no tiene gracia…
-Claro… -Dijo intentando ponerse serio-. Aunque esperaba que te pusieras a patalear y me dijeras que había excepciones a las reglas… -Se encogió de hombros-. Pero si no las hay…
-Ya ha habido unas cuantas esta noche, ¿no crees? –Alzó una ceja-. Creo que voy a poner unas cuántas más… -Cogí un lápiz y escribí en la lista riendo-. Así mejor…
-¿Qué…? –Se acercó y empezó a reír-. Nada de body tequilas… -Rió-. Me parece bien… -Me sonrojé mientras sacaba las sábanas del cajón-. ¿Te sonrojas?
-¿Lo saben ya?
-¿Qué? –Me miró raro y pareció pensarlo-. ¡Ah! Pues… creo que no… -Él hizo una mueca como si estuviera escuchando-.
-¿Qué pasa? ¿Se lo están diciendo?
-No… ellas hablan por un sitio y ellos por otro… -Le miré atenta por su mueca-. No preguntes… -Me lanzó la almohada-. No quieras saberlo todo, cotilla…
-Pero tú si puedes, ¿no? –Negué-. Es injusto…

Empezamos a hacer la cama y empecé a sentirme algo incómoda… él pareció darse cuenta y se metió a mi antigua habitación para deshacer la cama, dejándome a mí sola en su cuarto terminando con la suya… Se rió un poco cuando terminó antes que yo.
-¡Hola! –Vera sonrió apareciendo como un tornado-. ¿Con quién duermo? ¿Contigo? –Asentí-. Mejor… me sentiría muy rara durmiendo con ellas… tengo más confianza contigo, además es como si hubiera dormido muchas noches… -Cerró su boca-. Voy a ponerme el pijama…
-Mejor… -Seth revolvió su pelo y me miró-. ¿No quieres desayunar?
-No… estoy tan cansada que sólo quiero dormir…
-Bueno… si necesitas algo…
-Estaré yo… -Vera pasó a la habitación con su pijama ya puesto-. Buenas noches primito… -Le dio un beso en la mejilla-. Que descanses.

Le cerró la puerta en las narices y reí con Vera. Se tumbó en la cama y yo salí para ir al coche, saqué mi bolsa y las de las chicas, se las di al entrar y subieron conmigo. Cuando fui a ponerme el pijama gruñí… busqué en la bolsa la cajita azul que siempre llevaba en la maleta… ¡Genial!
Cuando salí Vera me miró algo preocupada, así que susurré levemente lo que me pasaba y ella asintió con una mueca. Me tumbé en el borde de la cama y le di la espalda, me aovillé ligeramente y me tapé con las sábanas…
-Buenas noches…
-Ven… -Ella pasó su brazo por mi tripa como siempre hacía él-. Es una de las cosas buenas de ser lo que soy… aunque ahora que me estaba acostumbrando a que me pasara a mí es raro ver como os pasa a vosotras sólo…
-¿Te preocupa? –La miré, parecía apenada-. ¿No te ayuda Leah en eso?
-No… o sea, sí… pero es más complicado ahora, ya no es la única y el patrón sigue siendo el mismo para las dos… -La miré raro-. Los chicos intentan no pensarlo, como nosotras, pero es preocupante que ninguna de las dos sea… fértil. No al menos ahora, no sabemos si eso cambiaría en caso de que no entrásemos en fase… pero también está la cuestión de que ambas nos hemos imprimado con bebés… o casi. Es como si fuera nuestra oportunidad para sentir el instinto maternal, sólo esa…
-Yo creo que es imposible que sólo… tendréis más oportunidades. Seguro.
-No sé… yo intento pensar eso, no quiero que Leah se ponga triste… -Hizo una mueca-. Yo nunca me había planteado casarme o tener hijos… no al menos hasta ahora… pero ella ya lo había pensado antes incluso de entrar en fase…
-Es una pena…

-No digas eso. Ella te arrancaría la cabeza si te oyera decirlo…
-Lo sé… -Sonreí-. Pero yo seré la primera que diré “qué alegría” cuando seáis madres. Si es que sigo viviendo para verlo… -Reí-. ¿Dormimos?
-Claro…

Me desperté por una extraña música y muchas risas… seis concretamente. Maila entró corriendo y me pisoteó, Seth asomó su cabeza con la ceja alzada.
-Buenos días… casi tardes. Nos íbamos a ir sin ti… -Le miré raro-. Son las dos… hemos intentado despertarte un par de veces… pero nos mandabas al infierno… -Rió-. ¿Ya estás viva?
-Sí… -Mascullé suspirando-. Ahora bajo…
-Maila… -La perrita dejó de pisotearme y salió-. Date prisa… ya llevamos mucho rato esperándote… ¿sabes?
-¡Voy!

Me miró alzando las cejas así que le lancé la almohada, pudiendo escuchar sus risas tras la puerta. Me arrastré hasta el baño y me asusté al verme la cara… tenía los ojos algo hinchados además de unas marcadas ojeras… y mi pelo era caso aparte. Me metí en su ducha y dejé que el agua me relajara, cerrando los ojos y respirando profundamente. Sus manos cálidas me tomaron de la cintura y podía sentir sus labios en mi cuello.
Di un respingo y miré a mi alrededor, la misma música, las mismas risas… Maila entró por la puerta y me pisoteó. Seth se asomó por la puerta con su ceja alzada.
-Buenos días…
-¡No! –Me miró raro-. Yo… -Suspiré-. Ahora bajo.
-Vale… -Amortiguó una risotada-. Iba a decirte que es muy pronto… que si quieres puedes dormir un poco más y que lamentaba haberte despertado… pero… vale. Vamos, Maila… -La acaricié y ella dio vueltas sobre sí misma para sentarse a mi pies-. Maila…
-Déjala ahí… -La perrita ladró-. Así me hará compañía…
-Vale… -Me miró raro-. ¿Te encuentras bien?
-Sí… Sólo necesito una ducha… -Muy fría… pensé-. En cuanto… -Aplané mi pelo un poco-. Cuando salga estaré bien…
-Vale… -Me miró raro-. ¿Seguro que no quieres descansar más? –Le miré mal-. Vale, tú mandas. Estamos haciendo tortitas… ¿te guardamos, no? –Asentí-. Vale… ¡ya me voy!
-No es…

Cerró la puerta y suspiré, me había lucido. Maila me miró alzando su ceja, como si supiera lo que estaba pensando y me diera la razón… completamente loca. Me duché y bajé las escaleras recogiéndome el pelo, me quedé boquiabierta al verlos en pijama y despeinados, cocinando y bailando a la vez… Ainhoa y Maca reían mientras hacían la masa de las tortitas y los chicos exprimían zumos. Seth y Vera ponían la mesa bailoteando…
-Buenos días… -Vera subió dos peldaños para darme un beso-. ¿Qué tal has amanecido? ¿Ya te has arreglado? Pensé que vaguearíamos un poco antes de la comida… ¡Qué prisas!
-Buenos días… -Entré a la cocina y pude ver cómo Sean y Maca peleaban, Kyle reía y Ainhoa se sonrojaba por la mirada de Kyle mientras movía la cuchara en el bol-. Qué energía…
-Deberías haberte quedado durmiendo… -Dijo Seth cogiéndome de la cintura, le miré mal y él levantó sus manos abriendo el cajón-. ¿Me dejas?
-Perdona… -Me aparté y él sonrió-. ¿Acaso hubiera podido dormir con este jaleo?
-Es culpa de tus amigas… -Sean soltó a Maca riendo-. Ya sabes que la manada es silenciosa cual pelusa rodando por la tela…
-La manada… -Maca rió-. ¡Qué pesado! –La miré raro-. Dicen que son como lobos… -Negó-. Han estado intentando asustarnos con eso desde que nos hemos levantado…
-Ya… -Reí-. Por cierto… ¿Qué le dijo Claire a Quil para que se sonrojara tanto?
-Pues… -Kyle suspiró-. Dijo que quería despertarse con él… así que ha tenido que colarse por la ventana de Claire para hacerla feliz… estaba muy nervioso porque los padres de Claire lo pillaran… -Rió-. Como si pudieran escucharlo…
-Y aunque pudieran llegar a escucharle… -Seth rió sacando los vasos-. Es imposible que le pillen… debería ser más rápido que todo eso… El padre de Claire no es sigiloso que digamos…
-Pero él no cabe en el pequeño armario de Claire… tendría que encogerse… y aún así lo reventaría… -Sean rió por un segundo pero se quedó callado en el momento-. Perdón… yo…
-Pobre Quil… -Suspiré-. No sé cómo os soporta a diario…
-Porque nos adora… -Sean me sonrió-. Ha sido Seth el que le ha dado la idea del armario… nos hemos reído bastante sólo imaginándolo… no cabe de ninguna manera.
-Y dale… -Ainhoa suspiró y la miré-. Dicen que se han convertido en lobos y que han leído la mente de Quil desde aquí… -Rodó los ojos-. Es algo muy enrevesado sólo para decir que han quedado con él… ¿no?
-No les hagas caso… -Seth me miró alzando las cejas y yo reí-. Es una novatada… a todas las nuevas les cuentan las mismas historias… luego os contarán historias sobre vampiros y hombres lobo… no creáis nada…
-¿Es mejor que se desmayen cuando entremos en fase? –Seth rió con sorna-. Deberías ayudarlas a ellas… no a ellos.
-Oye… -Cogí aire-. ¿Quieres sacar los trapos sucios o mejor lo dejamos como está? –Me miró riendo-. Yo también sé dar golpes bajos…
-No lo dudamos… -Seth miró realmente mal a Sean-. Quiero decir… yo… -Me miró preocupado-. Lo decía…
-Lo sé… -Rodé los ojos-. Tengo mil historias que podría contaros… como por ejemplo el día que fue rápido para esconderse… pero se dejó la camiseta en mi habitación… -Todos me miraron asombrados-. ¿No lo sabíais? Se escondió rápido en el armario… pero mi tía vio la camiseta. Fue realmente bochornoso… vaya concentración de hombre lobo.
-¿En serio le pasó eso? –Maca me miró asombrada-. ¿Cuándo?
-Tendría… -Le miré-. ¿Diecisiete? –Asintió algo paralizado-. Creo que no he pasado tanta vergüenza en mi vida…
-Hombre… eso fue un fallo gordo… -Kyle rió-. Pero es normal que perdiera un poco de concentración… ¿no crees?
-No… -Vera rió-. Un miembro de la manada jamás puede perder la concentración… tiene que tener todos los sentidos despiertos…
-Ya… -Vera rió y lanzó una uva a su boca pero Seth la cogió-. Ya me dirás qué te pasa a ti cuando William corretea por la playa y dejas que una niña te atropelle con la bici… -Le lanzó la uva a la cabeza, rebotó y él volvió a cogerla-. Primita.
-No es comparable… -Sean me miró y se quedó callado-. Da igual…
-Bueno… ¿Es que no vais a llevar a mis amigas a casa de Quil? Además… creía que teníais que ir a recoger a las once en punto…
-Son menos veinte… llegamos sobrados… -Seth lanzó la uva a la boca de Vera-. Iremos a cuatro patas y sólo es un kilómetro, así que… -Me miró raro y yo ayudé a las chicas-. Voy a pasear a Maila mientras termináis de cocinar… no quiero molestar…

Reímos y echamos a todos los chicos de la cocina, Vera examinaba cada uno de mis movimientos, entonces entrecerró sus ojos y sonrió ampliamente. La miré con la pregunta en los ojos, pero negó antes de que la verbalizara y me dio la espalda. Maila entró como un cohete y saltó a mi alrededor, ladrando y agitando su cola con impaciencia, las tres se giraron para verme y Vera empezó a reír negando.
-Creo que no se fía de Seth… -Rió-. Siempre que la saca a pasear vuelve demasiado alterada… desde que la paseé yo nunca quiere ir sólo con él… y al parecer quiere que vayas tú.
-Maila… -Seth bufó al entrar y la perrita se escondió entre mis piernas-. Venga… que hoy no vamos a correr mucho, lo prometo… sólo un par de kilómetros, no seas vaga… -Intentó cogerla y empezaron a dar vueltas a mi alrededor hasta que puse una mano en el pecho de Seth que me miró cauteloso-. ¿Te importa llevarla tú?
-Dame… -Le quité la correa-. Seguro que la llevas a velocidad de rayo y por eso no quiere ir contigo… -Le puse la correa y la perrita me obedeció en cada indicación hasta la puerta. Seth se asomó a la puerta y me miró extrañado-. ¿Vas a quedarte ahí o piensas venir?
-¡Sí! ¡Voy! –Cerró la puerta de golpe e hizo una mueca… yo me sonrojé y retiré la mirada para reír-. Vais a mal acostumbrarla… luego, cuando Vera se vaya y tú también… voy a tener que luchar con ella para sacarla… -La acarició-. Y menudo carácter tiene…
-¿Me estás diciendo que la perra puede con un lobo? –Reí y él hizo una mueca-. ¿Ahora entiendes porqué me dais menos miedo que un cachorro?
-Sí… no la has visto enfadada… -Alcé una ceja-. Tendrías que pasar con ella más de un fin de semana, ya verías como cuando se enfada realmente da miedo…
-¿Más que un vampiro?
-Bueno… -Se tensó y después sonrió-. Los vampiros me hacen cabrear… pero puedo acabar con ellos… -Alcé la ceja de nuevo-. Si atacan es algo instintivo e incontrolable… pero atacarla a ella… no lo concibo. Sería imposible…
-Imposible… -Sonreí-. Es un encanto de perrita… y como me entere que vuelves a llevarla a correr a tu velocidad… tendrás una gran charla que soportar… -Se paró en seco y me miró alzando una ceja, así que yo alcé otra-. Ni lo intentes.
-A ver… -Empezó a pensar y a contar con sus dedos, yo le miré raro y él se relamió los labios con una sonrisa que empezó a darme miedo-. Creo que esto no va contra ninguna regla de las tuyas… -Se quitó la camiseta y mi sonrisa se borró de golpe-. No estamos en mi casa, así que no protestes… -Sonrió y yo cerré los ojos, noté unas manos cálidas en mi cintura-. Esto no es un abrazo, ni te estoy cogiendo de las manos… tampoco incumplo el trato.
-Voy a empezar…
-No, ya no vale. Cuando volvamos a casa escribe lo que quieras… pero ahora ni se te ocurra decir una palabra… -Abrí los ojos y vi una enorme sonrisa-. No dudaré en usar mi camiseta como mordaza… ahora… -Se acercó a mí-. Yo que tú me agarraría fuerte…

No me dio tiempo ni a gritar, me colocó en un rápido movimiento en su espalda y empezó a correr, su camiseta iba enredada en su mano protegiéndose con ella de la fricción de la correa, Maila corría tras nosotros algo agobiada, me aferré fuerte a él y me fijé en la perrita… ambos parecían disfrutar. Empezaba a pensar que todo era un tramado plan de Seth, hasta que paró en seco y desató a la perrita, que salió disparada en la misma dirección. Seth dejó la correa y la camiseta en el suelo y me cogió fuerte de las piernas para que no me soltara, mirándome de una forma pícara.
-¿Llevas algo de valor? –Le miré raro-. ¿Móvil, reloj… algo que aprecies mucho y no quieras que se rompa…?
-Mi vida…
-Bueno… -Rió-. Tranquila, eso yo también lo aprecio demasiado… -Hice una mueca y él suspiró-. ¿Puedo preguntarte algo antes de que me juegue la vida en entretenerte?
-¿Perdona? Yo no quiero que me entretengas…
-¿Puedo peguntarte una cosa? –Asentí-. ¿Soy el único que tiene que cumplir reglas? -Sonreí, imaginé que eso iba por la conversación de la cocina… asentí de nuevo-. Pues… creo que voy a empezar a imponer las mías… -Alcé las cejas y Maila apareció ladrando entre unos matorrales-. ¿Quieres saber la primera?
-Sorpréndeme…
-Agárrate fuerte…

Empezó a correr de nuevo y Maila nos seguía, no entendía nada hasta que vi el mar, Seth saltó y Maila nos siguió, me aferré fuerte y él cogió mis piernas protegiéndolas del impacto contra el agua, yo escondí mi cara en su hombro.
Nos hundimos y yo no podía soltarme, estaba paralizada hasta que salimos a la superficie y escuché las risotadas de Seth y los ladridos de Maila. La perrita nadaba ya hacia la orilla de manera muy graciosa y Seth seguía aferrando mis piernas mientras nos impulsaba con sus piernas hacia la orilla. Seguí paralizada hasta que él hizo pie y empezó a andar, mirándome algo preocupado. Entonces me solté y bajé, anduve hasta la orilla y empecé a reír tirándome de espaldas en la arena. Miré a Seth que sonreía y me fijé en su pecho… me asusté y miré
mis uñas…
-Lo siento… -Él seguía riendo y negando, se sentó a mi lado-. En serio… -Acaricié las marcas sonrosadas que ya sanaban, mis uñas clavadas en su pecho, como si fuer
a una irónica marca-. No pensé que estaba agarrada tan fuerte…
-No pasa nada… -Quitó mi mano de su pecho con cuidado-. En serio.
-¿Lo habías planeado, verdad?
-Pues… muchas veces. Pero no así… -Le miré raro-. Es un tema vetado, así que digamos que me apetecía repetir una experiencia de
juventud…
-Dejemos los temas vetados a un lado… -Me miró extrañado-. Bueno… se supone que ahora somos amigos, ¿no? –Asintió-. Pues… los amigos se cuentan todo… ¿No? –Volvió a asentir con una leve sonrisa-. Es injusto que vete temas que te preocupen, que te apetezca contar… no sé… -Sonrió ampliamente y alzó sus cejas expectante-. Quiero saberlo todo, ¿vale?
-Vale… -Carraspeó y se acomodó a mi lado-. Así que sacamos de la lista eso… ¿no? –Asentí-. Vale… pues realmente no lo había planeado hoy… y tampoco lo había planeado así precisamente. Simplemente me he acordado de algún… -Lo pensó-. A veces, venía a esta playa y no sé… cuando me agobiaba demasiado saltaba y Maila siempre me seguía… así que no sé…
-Creo que te desvías del tema… -Reímos cuando asintió-. Quiero saberlo. En serio…
-Vale… tú lo has querido… -Se sentó ladeado, mirándome-. Pues la verdad es que siempre que saltaba me venía a la mente aquel día… no sé si lo recordarás… ¿Cuándo saltamos del acantilado la primera vez? –Asentí-. Bueno… pues siempre que saltaba me acordaba de ese momento y siempre pensaba en que cuando volviera a verte -Hizo una mueca de dolor-, si es que volvía a verte… me tiraría contigo y te abrazaría fuerte, no dejaría de besarte hasta que me arrancaras la piel a tiras para que te soltara… -Medio sonrió ante mi reacción y se encogió de hombros-. Pensaba que no te dejaría alejarte de mí… tendrías que… no sé, matarme o algo así, para que pudieras soltarte de mi abrazo… -Estuve a punto de reír pero no me salió del todo, su mirada escondía tal dolor que me sentía incapaz de reír aunque él lo hiciera amargamente-. Pero creo que ha sido mejor así…
-¿Qué ha sido… -Carraspeé y él sonrió más- mejor así?
-Sí… -Se tumbó despreocupado a mi lado-. Con algunas reservas, pero sí…
-¿Reservas? –Me tumbé algo nerviosa a su lado-. No te quedes ahora callado… te he dicho que quiero saberlo todo, hasta las reservas…
-Está bien… -Se recostó sobre su brazo y me miró fijamente, creo que mi corazón se aceleró aumentando su sonrisa-. Me ha gustado mucho más lo que ha pasado ahora que lo que podía haber hecho yo… o lo que podía haber imaginado…
-No te sigo… -Él sonrió más poniéndome más nerviosa-. ¿Te gusta más hacerme rabiar… o cómo va eso?
-Hombre… -Se humedeció sus labios mostrándome una enorme sonrisa después-. Es bastante divertido hacerte rabiar, no voy a engañarte… pero ha sido mucho mejor tu reacción, si hubiera hecho lo que siempre he pensado que haría, no me hubiera dado cuenta de nada… -Alcé las cejas-. ¿Realmente vas a hacer que te lo diga? –Hice una mueca y él rió-. Está bien… seré trasparente como el cristal… -Me miró de nuevo fijamente-. ¿Sabes que me has clavado las uñas mucho antes de que saltáramos? –Le miré raro-. Bueno, no sé… en un concepto general, esto me ha servido mucho más que todo lo que he podido ver hasta ahora, cuando hemos saltado me he dado cuenta que realmente sigues queriéndome… -Me quedé helada y él sonrió con orgullo-. Por eso creo que ha sido mucho mejor…
-Ya… -Me quedé algo paralizada hasta que reí-. Vayamos por puntos… -Me incorporé levemente y le miré con algo de indignación-. ¿Hemos saltado? Más bien di que me has tirado… o que has saltado y me has arrastrado. Yo jamás hubiera saltado. No hace muy buen día y con esta ligera brisa, seguro que acabo enfriada…
-¿Intentas cambiarme de tema?
-No… -Sonrió-. Siento herir tu enorme ego, pero tengo que decirte que sólo me he agarrado así porque sabía que el golpe contra el agua iba a doler… era miedo, no amor.
-¿Ni un poquito? –Alzó una ceja y suspiré sin querer… estaba sumamente sexy y me iba a resultar complicado negar lo evidente-. ¿Suspiras?
-Sí… porque es imposible discutir contigo…
-¿Pensabas discutirme eso? Lo he notado… -Señaló su pecho-. ¿Sabes?
-Eres… -Suspiré de nuevo-. Creído no, lo siguiente… -Reímos-. ¿Crees que puedo decirte que no te quiero? Sabes bien que jamás podría negarte lo que es obvio… -Su cara se desencajó, entendí en el momento que sus palabras buscaban más un pique que una declaración sincera-. Claro que te quiero, te he echado de menos cada día… y te sigo echando de menos en muchos momentos de mi vida cotidiana, como a todos mis amigos… -Hizo una mueca y yo suspiré-. ¿Sabes…? –Me miró curioso y yo metí mi puño en la arena-. Creo que no es justo que me hayas tirado…
-Venga… -Puso su mejilla-. Golpéame, pero no lo hagas muy fuerte o te harás daño…
-No sé… -Hice una mueca y sonreí, él me miró esperando mi puñetazo y se quedó helado cuando le di un beso en vez de una bofetada, se puso tan sonrojado que solté la arena que tenía preparada para tirarle-. Creo que esta vez lo dejaré correr… -Saqué mi puño de la arena y dejé que se escurriera por mis dedos-. Pero la próxima, pienso dejarte sin sentido y enterrarte a cuatro metros bajo la arena… -Sonrió y vi que era mi oportunidad-. Aunque creo que ya te he dejado completamente noqueado, casanova…
-Oye… -Empezamos a reír y él me señaló-. Eres cruel conmigo… -Hice una mueca, en parte tenía razón-. ¡Ey…! –Acarició mi mejilla-. Es broma. Me gusta que seas sincera… -Sonrió-. Sabes que me encanta que intentes dejarme noqueado, ya sabía que eras un poquito… -Lo pensó con una graciosa mueca-. No sé, ya sabía que eras un poco… -Alcé las cejas y él hizo una mueca sabiendo que en cuanto lo dijera yo me ofendería-. ¿Contestona?
-¿Me estás llamando borde?
-Eh… ¿no? –Reímos-. Sólo… contestona.
-Bueno… ¡qué vamos a hacerle! –Me desplomé en la arena-. Tú eres un creído con el ego más alto que el universo ha conocido… así que Dios tuvo que crearme a mí con mis contestaciones para bajarte de ése pedestal en el que te crees que estás…
-Jo, jo… -Se tumbó a mi lado y le miré mal-. ¿El pedestal del que hablas es el que está justo debajo del tuyo, no? –Asentí riendo-. Lo imaginaba… -La brisa hizo que yo temblara y él rió-. Y eso también me lo imaginaba… vamos…


Se levantó y me ayudó a levantarme, silbó y Maila dejó de escarbar para seguirnos, empezó a correr mientras yo le seguía abrazándome y me tendió su camiseta con una sonrisa enorme… reí con él, creo que ambos recordamos el mismo momento porque cerró sus ojos fuerte y me dio la espalda.
Me puse su camiseta y se giró cuando estaba escurriendo mi ropa, negó dramáticamente y me la quitó de las manos para escurrirla él, puso mis pantalones en un hombro y mi camiseta en otro, andamos unos metros y se paró mirándome.
-Vamos a llegar tarde como sigamos a tu paso, no te ofendas… -Le miré mal-. He dicho que no te ofendas…
-Vamos a llegar tarde porque a alguien le ha apetecido calarme hasta los huesos y que dentro de dos días esté con una pulmonía, no por mi paso.
-Vale… tocado. Pero, ¿te importa que cargue contigo hasta casa? –Alcé una ceja con pocos ánimos…-. En fase, claro.
-Qué morro tienes… -Él alzó una ceja curioso-. El caso es que te abrace, sea como sea… ¿no? –Empezó a reír-. No es gracioso… -Empecé a reír-. Ya sea tirándome por un acantilado, haciéndome pasar frío… o poniendo como excusa que llegamos tarde…
-Me has pillado… -Rió encogiéndose de hombros-. Pero es verdad, llegamos tarde.
-Anda… -Suspiré negando-. Esta vez ganas de nuevo, pero no te acostumbres… ¿eh? Revisaré las normas y te haré un nuevo reglamento para que no te aproveches de mi lentitud…
-Vale, vale… pero ahora no es sólo por llevarte… -Le miré raro y él se alejó-. Digamos que voy a disfrutar de la llegada…

Lo entendí cuando estábamos llegando. Corríamos esperando a Maila, sabía que no estaba usando todo su potencial, pero empecé a dudar cual era su motivo oculto hasta que vi el coche de Maca parado en el sendero que llevaba a su casa. Empezó a aullar y a rodear su casa, Ainhoa y Maca estaban en la puerta y se quedaron paralizadas cuando Seth derrapó a su lado y quedó tumbado para dejarme bajar.
Vera empezó a reír muchísimo… empezó a dar palmadas y saltos mientras Sean y Kyle ponían mala cara, las miraban preocupados mientras ellas miraban anonadadas la escena. Vera empezó a correr y saltó entrando en fase y derrapando al clavar sus cuatro patas sobre el suelo.
Ainhoa movió su brazo buscando algún punto de apoyo mientras Maca le daba la mano, aunque el otro brazo se quedaba sin punto de apoyo hasta que Kyle le ofreció su brazo. Ella lo miró con terror, dio un paso hacia atrás pisando a Maca que ni se quejó.
-Nosotros… -Kyle y Sean se miraron, Sean bajó la mirada y le cedió la palabra a Kyle-. No era la idea original, pero…
-A veces las cosas no salen como uno quiere… -Me bajé con cuidado y me acerqué a ellas que se asustaron-. No es nada malo… en serio. ¿No decías que no entendías cómo podía alejarme de él? –Maca me miró confusa-. Entonces, no te alejes tú ahora.

Seth se acercó a mi lado y bramó, le miré y acaricié su hocico. Se alejó de mí y se acercó con sigilo a Maca y Ainhoa, ellas se alejaron un poco por lo que él se agachó un poco más para que lo tocaran. Ambas se miraron con duda, acercaron sus manos casi a la par hasta tocarle, hubo un momento tenso de silencio mientras ellas acariciaban a Seth como si de un perrito se tratara, pero se asustaron cuando Vera aulló. Maila empezó a ladrar y Seth las miró mal, mis amigas se habían alejado ligeramente y él se alejó para no asustarlas más, poniéndose a mi lado. Vera salió de fase y empezó a reír mientras Seth le gruñía, yo le lancé mi camiseta y ella siguió riendo hasta que se cubrió.
-Vaya caras… -Hizo una mueca-. En serio, no es malo… los malos son los chupa sangre… y no todos, hay algunos relativamente aceptables…
-Sólo algunos dorados… -Sean bufó-. No hay vampiro de ojos rojos que sea bueno…
-Chicos… -Kyle los miró mal-. Ése no es el tema ahora… -Se giró hacia Ainhoa-. Es un honor para nosotros ser lo que somos… protegemos a los que no tienen este don, este privilegio.
-Quizá si vieran como mi primito sale de fase ahora mismo lo tomarían de otra manera… -Vera empezó a reír pero Seth gruñó-. ¿Quieres pelear delante de ellas?
-Haya paz… -Suspiré y miré a mis amigas-. No es tan malo… -Hice una mueca-. Me corrijo, no es nada malo, en serio. Es genial…

Maila empezó a mordisquear la pata delantera de Seth, él empezó a empujarla débilmente con su hocico pero ella no le soltaba, Maca y Ainhoa se miraron y parecieron extrañadas, la perrita no le soltó hasta que mis amigas estallaron en carcajadas.
Parecieron algo más relajadas, los chicos empezaron a explicarles cosas mientras Seth desaparecía por la parte trasera para salir por la puerta delantera con unos pantalones. Se acercó a mi coche y se montó de copiloto. Vera se metía en los asientos traseros así que me puse mis pantalones y me metí al coche. Seth empezó a señalar cosas, entonces cogí su muñeca y la examiné con cuidado.
-Vaya mordisco…
-Bah… ya sabes que se curará en unos minutos… -Sonrió-. ¿Sistema de navegación de última generación? –Rió-. ¿Por si te pierdes?
-¡Idiota…! –Negué-. ¡Por cierto! –Me giré emocionada-. Había algo que me ibas a contar… ¿Qué era? –Él sonrió y negó-. ¡Vamos!
-Yo ya lo sé… -Vera rió-. Pero tampoco pienso decirte nada…
-Familia teníais que ser… -Bufé y ambos rieron-. Si no me lo contáis… -Lo pensé-. Mejor no digo nada…
-Si quieres nos bajamos del coche, pero llegaríamos incluso antes… -Seth empezó a reír, sabía lo que iba a decir y yo me sonrojé-. Venga… arranca y sorpréndeme con tu conducción…
-¿Tan mal conduce? –Vera rió-. Es lo que piensa de verdad…
-¿En serio piensas que conduzco mal? –Le miré indignada y él hizo una mueca-. ¿En serio?
-Sólo… prefiero conducir yo… -Se encogió de hombros-. No porque lo hagas mal, es sólo cuestión de reflejos, los míos son mejores…
-Abajo… -Alzó las cejas-. He dicho que abajo, ve a cuatro patas… si tan mal vas a pasarlo viéndome conducir… -Me encogí de hombros-. Abajo…
-Creo que prefiero jugarme la vida…
-He dicho que abajo, ¡venga! -Le empujé levemente-. Largo.

Él rodó los ojos y resopló, bajando riendo de mi coche. Di la vuelta y lo encaré hacia el camino, él esperaba a un lado y aceleré hacia él, frené en seco y él saltó a dos metros. Alcé la ceja y empecé a reír, abrí la puerta y él rodó los ojos montándose sin hacer más comentarios.
Al llegar a casa de Quil las chicas me miraban con algo de pánico, sabía que iba a tener que darles muchas explicaciones. Se marcharon repartiéndose entre la furgoneta de Aaron y el coche de Maca, Gabriela y Ashley se quedaron a comer con el resto, aunque pude intuir que a Kyle y a Sean no le iba a gustar tanto ahora la comida…
Pero la sonrisa que Claire mostraba era tan espectacular que olvidé a los chicos… sólo quería quedarme a solas con ella para que me contara cada mínimo detalle. Me acerqué a ella cuando todos desmontaban el decorado de la fiesta y empezamos a pasear hasta mi coche, me la llevé hasta la playa mientras los chico
s seguían recogiendo todo y preparándolo para la comida.
Aparqué mientras ella seguía sonriente y se mordía el labio, la verdad es que verla así me llevó a mis años de adolescencia y eso me hacía sentir pletórica. Paseamos por la playa en silencio por un rato hasta que finalmente pregunté.
-¿Quieres contármelo ya? –Reí-.
Suéltalo…
-Te juro que hacía muchísimo tiempo que no dormía así… cuando me he metido a la cama estaba realmente nerviosa, pensaba que me había equivocado haciéndole eso… que no sé, que había sido una locura, una estupidez…
-¿Pero…?
-No podía dormir, lo juro… estaba en babia, o quizá él ha sido excesivamente sigiloso… el caso es que de repente he notado un leve calor en mi espalda… cuando me he girado allí estaba él… -Se encogió de hombros con una enorme sonrisa-. No sólo me he despertado con él, si no que me he dormido con él a mi lado… -Alcé una ceja curiosa-. Me ha dado por reír cuando le he visto en mi cama, él ha hecho una mueca como si estuviera preocupado… y yo no sé, simplemente le he abrazado. Creo que no voy a poder volver a dormirme sin él… -Rió nerviosa-. En serio. No es que quiera… bueno, tengo curiosidad por cómo será besarle… pero creo que tampoco quiero. Creo que me da miedo.
-¿Miedo?
-Sí… -Hizo una mueca-. Es mucho más mayor… aunque apenas lo parezca. Aunque yo sé que es muy infantil, que hace cosas de críos…
-Las hace por ti…
-Lo sé… -Sonrió-. Pero creo que si le besara todo se complicaría, no sé qué le diría a mis padres, ni a mis amigas… -Se encogió de hombros-. Sería demasiado complicado, ¿no?
-No lo sé… -Sonreí-. Quizá es que aún no estás preparada. Cuando realmente quieras besarle, no te importará lo que digan o piensen, no debes tener dudas cuando eso pase.
-Si las tuviera… -Me miró cautelosa-. ¿Se estropearía como lo tuyo con Seth?
-Tampoco lo sé… -Sonreí sinceramente-. No hay ninguna historia igual… sería aburrido si así fuera… ¿no crees?
-A mi no me importaría ir pronto a tu boda… -La miré mal y ella rió-. ¿Qué ha pasado? Creo que tú también tienes algo que contarme… ¿no?
-Digamos que yo sigo teniendo dudas… -Me encogí de hombros-. Sigo teniendo miedo, pero no es como lo tuyo… -Me miró preocupada al notar que se me apagaba la voz-. Yo no tengo miedo a lo que digan o piensen, tengo miedo a todo lo malo que podría pasar. Los cambios no eran lo mío cuando tenía tu edad… pero Londres me cambió en cierto modo, me atreví a hacer muchos cambios y ahora tengo una vida completamente distinta a la que creía que iba a tener…
-¿Y eso que tiene que ver con que no quieras a Seth?
-No es que no le quiera, más bien todo lo contrario…
-Ahora sí que me he perdido…
-No sé qué es lo que pasará, no sé nada… y si todo lo demás ha salido de una manera distinta a lo que me esperaba… no sé qué podría pasar con Seth, no sé si ahora funcionaría bien, no sé… -Suspiré y ella me abrazó, entonces entendí que estaba llorando-. No sé qué es lo que estoy haciendo, en serio… voy a volverme loca.
-Deberías hacer lo que quieres hacer… -Se encogió de hombros-. Tú misma lo has dicho, quizá no estás preparada… ¿no?
-Creo que tú sabes ya demasiado… -Reí abrazándola-. Deberíamos volver para que te arregles para tu comida… -Ella asintió-. Iremos a casa de Nessie, creo que ella también quiere saber…
-No… -Rió-. Creo que ella seguramente ya sabrá…

Reímos y llegamos a casa de Nessie, nos invitó a pasar, estaba preparando el desayuno y nos invitó a acompañarlos. Jake bajó con el pelo mojado, Nessie se mordió el labio y él le dio un beso dulce y calmado, Claire y yo intercambiamos una pícara mirada.
-¿Ya te vas?
-Sí… -Dijo con pocas ganas-. Voy a ayudar a los chicos… -Nos miró con una leve sonrisa-. Y seguro que os apetece hablar de cosas de chicas, así que mejor me marcho…
-Vale… -Nessie volvió a besarle-. ¿Te veo luego? –Él asintió y se regalaron otro tierno beso, después se miraron con una sonrisa e imaginé que Nessie le estaba mostrando algo-. No lo olvides.
-Ni tú tampoco… -Depositó un dulce beso en su frente-. Pasarlo bien… y felicidades de nuevo, Claire…
-Gracias… -Ella sonrió mientras se marchaba, cuando la puerta se cerró Claire se abalanzó sobre la mesa-. ¡Vaya besitos…! –Empezó a reír y yo la seguí mientras Nessie le lanzaba un trozo de tortita-. Bueno… ¿Qué tal si me regalas un par de años más?
-¿Quieres que le diga a Quil lo que me acabas de pedir? –Nessie rió alzando una ceja-. Aunque podías pedírselos a Darlene, ella estaría encantada en intercambiar años contigo… ¿no?
-¿Por qué me metéis en vuestros líos?

Reímos y empezamos a hablar, les conté un poco lo que había pasado con Ainhoa y Maca, cómo Sean y Kyle se habían resignado a pasar el día sin ellas… hasta que el móvil de Nessie sonó y tuvimos que ir a comer a casa de Quil.
Fue genial, toda la manada, la familia de Claire… los chicos sirviendo a todo el mundo… era realmente divertido estar en la mesa, todas las chicas cuchicheando sobre Kyle, Sean y mis amigas mientras ellos ponían cara de circunstancia al pasar y traspasar a nuestro lado.
Pasaban de las cuatro de la tarde cuando yo seguía allí, alargando la sobremesa con cotilleos jugosos que nos contaban las chicas, Vera era una gran aportación al grupo, su sentido del cotilleo estaba mucho más desarrollado que el de Leah y ninguno le prohibía nada… así que hablaba hasta límites insospechados… sólo dejaba de hacerlo cuando empezaba a corretear con Leah y los pequeños… me fijé muy bien en cómo intentaba tratar de igual modo a todos, pero su mirada era más persistente en el pequeño William.

Miré mi reloj, casi las cinco… me estiré y suspiré, era hora de marcharse y Seth me miró cauteloso al ver mi gesto, Nessie palmeó mi tripa levemente y reímos.
-La comida ha estado genial… y aunque me gustaría, no puedo quedarme a cenar…
-Seguro que tienes un ligue con el que has quedado a cenar… -Vera colocó sus brazos alrededor de mi cuello-. ¿Y cómo es él?
-Pues… -Reí-. Si quieres saberlo tendrás que entrar en fase y seguir mi coche… -La miré divertida-. Pero te aseguro que es legal… -Ella frunció el ceño mientras algunos reían-. Bueno… es hora de irse… -Me levanté mientras ella me soltaba y Claire hacía una mueca-. ¿Quedaremos el jueves para ir al cine? ¿O tendrás mejores planes?
-Hace muy bueno… preferiría playa… si no te importa venir aquí…
-No creo que pueda, el viernes trabajo… -Ella puso cara de pena-. Pero si quieres podemos cambiar el jueves al sábado, así le diré a las chicas de cerrar el sábado por la tarde para que conozcan mejor todo esto… ¿Sí?
-Eso sería…

-¡Genial! –Sean no dejó terminar a Claire-. ¡Una idea genial! No me extraña que los ancestros te quieran con nosotros… -Se lanzó a abrazarme pero todos se quedaron algo paralizados-. Eres una fuente inagotable de buenas noticias…
-Sí, ya… -Le alejé-. Que se lo diga a ellas no quiere decir que ellas acepten… al menos entendería claramente que Maca prefiriese no venir… -Algunos rieron y él hizo una mueca que me dolió incluso a mí-. Olvida lo que he dicho, seguro que viene… aunque sólo sea por pasar el día en la playa… no creo que sea capaz de soportarte…
-Eres cruel… -Hizo una mueca-. Más te vale que venga…
-¡Sí, mi capitán! –Hice un gesto militar y me despedí de todos, me acerqué al coche y Seth apareció a mi lado asustándome-. ¡Señor! –Me llevé mi mano al pecho-. No me acostumbro a esto…
-A mí me gusta… -Dijo riendo-. Es divertido asustarte… ¿Me llevas a Port Ángeles? –Se metió en mi coche y yo me quedé paralizada-. ¡Venga! ¡Me están esperando!
-Llegarías antes a cuatro patas… -Dije entrando en el coche-. Además yo conduzco fatal… ¿Recuerdas?
-Sí, lo sé… -Se encogió de hombros-. Pero espero que seas tan amable de parar ante mis quejas y me dejes conducir a mí… -Alcé una ceja y él rió-. Además quiero contarte algo…
-¿Eso que me dijiste…? –Asintió-. ¿Qué es?
-Arranca… -Señaló el contacto-. Cuando estemos llegando te lo diré…

Suspiré algo resignada y arranqué. Empecé a conducir, sus miradas y chasquidos de lengua empezaban a desquiciarme, así que paré en las afueras de Forks y le miré mal mientras él reía y tendía su mano para que le diera las llaves.
-¿Qué es lo que me tienes que contar? –Me miró confuso-. Suéltalo ya y baja de mi coche, sé que tardarás menos en llegar a Port Ángeles corriendo que conmigo, así que…
-¿Sabes que ya sé quien es el padre de Daphne? –Le miré raro-. Creo que debería haberme dado cuenta antes… pero…
-¿Jason? –Él me miró confuso y sorprendido-. Era mi segunda opción…
-¿Cuál era la primera? –Me miró y lo supo-. ¡Vaya! –Rió-. Pues yo pensaba que sería algún exnovio o algún lío de una noche… -Alzó sus cejas y me miró confuso-. ¿En serio pensabas que yo…?
-¿Eso era lo que me tenías que confirmar?
-¿Confirmar?
-Lo sospechaba… no es algo que me haya pillado desprevenida… -Hizo una mueca-. Será el instinto… tú tienes tus sentidos y yo tengo el instinto…
-Ya… -Rió-. ¿Y qué te dice el instinto respecto a Sean y Kyle?
-Que serían capaces de ayudarme a deshacerme de uno de los miembros de su manada si se lo pidiera… -Él alzó una ceja-. ¿No te lo crees?
-No…
-Si no bajas ahora mismo de mi coche, podrás comprobarlo…
-Vale, vale… -Rió abriendo la puerta y se paró, me miró fijamente y con una enorme sonrisa-. Aunque mis sentidos me dicen que yo mismo arrancaría la piel a tiras a quien osara molestarte…
-¿Incluido tú mismo?
-¿Quieres que empiece?
-Anda… -Reí y negué-. Dale un beso a Kira de mi parte… -Él asintió y salió-. ¡Espera! –Se metió de nuevo mirándome curioso, me acerqué a él y le di un leve beso en la mejilla haciendo que una enorme sonrisa se dibujara en su rostro-. Adiós…
-Yo prefiero un… hasta pronto –Hizo una mueca y me dio otro beso-. Hasta pronto, preciosa.
-Largo…


1 comentarios:

Write comentarios
tanna
AUTHOR
18 de julio de 2011, 14:15 delete

valla!!! por fin!!! le miro luz!!! a la cabezota de Darlene!!!

Reply
avatar