Capítulo LXXVb: Cerveza, patatas y limonada.

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Aquí está el nuevo capi!!! espero que os guste y espero poder subir pronto el siguiente... aunque desgraciadamente creo que tardaré unos 10 o 15 días, tengo mucho que estudiar... :(
Un besazo para todas y disfrutadlo!!! Y por favoooooor!!! comentadme :)
Silvy ^^



La luz me daba de lleno en la cara, me removí y me estiré, sonreí involuntariamente al recordar la gran tarde que había pasado… y la gran noche. Cogí mi móvil de la mesilla y reí al ver el mensaje de Susan, me preguntaba que cómo había acabado… sonreí de nuevo al recordar la mala cara que puso cuando se fueron a casa a la hora indicada y Seth me propuso quedarnos más tiempo.
Le contesté rápidamente, la fiesta se había alargado y habíamos acabado en un local de Port Ángeles… aunque no le conté el rato tan extraño que pasé. Cuando llegamos al local Seth reía bromeando conmigo y con Nessie, Claire se besaba apasionadamente con Quil mientras esperábamos a entrar y Jake sólo sostenía la cintura de Nessie algo angustiado. Fue entonces cuando unas chicas saludaron a Seth, al principio él sonrió, pero cuando me miraron pareció incomodarse y se acercó a ellas para saludarlas, quedándome yo algo retrasada con Nessie y Jake, que saludaron a las chicas algo incómodos.
Nessie me miró, miró a las chicas y puso una cara de profunda concentración, después me miró y sonrió, Seth se giró y me las presentó. Fue algo extraño, las chicas me miraban como si intentaran recordarme, pero yo no recordaba haberlas visto.
-Les he hecho creer que te habían visto hablando conmigo alguna vez por las fiestas de Seth… -Sonrió levemente-. Es más fácil así, si ellas creen que te recuerdan de lugares que compartían con Seth no harán tantas preguntas… -Asentí y sonrió, mostrándome lo que a ellas-. Quizá así puedas entablar conversación con alguna de ellas…
-Gracias…
-De cualquier forma, mantente alejada de ellas…
-¿Las conocía antes? –Lo pensó y negó-. No pareces ser muy sincera…
-No te caían demasiado bien… -Sonrió-. Ella es Jeannette, Ruth, Leslie y la rubia más bajita es Cloe, creo que no llegaste a conocerla… de hecho es la segunda vez que yo la veo, es prima de Ruth y viene desde Indiana. Parece buena chica, creo que ella te caería bien.
-Crees… -Suspiré-. Antes no me caían bien, ¿pero y si ahora no es así?
-Es mejor que guardes las distancias… -Jake me miró y asentí-. No creo que te hablen mucho, intenta ser cortés pero sin pasarse…
-Está bien…

La noche pasó a partir de entonces muy extraña, Seth apenas se acercó a nosotros, estaba con ellas y recibía decenas de abrazos de tres de ellas. Yo intenté pasarlo bien con Nessie y Claire, pero una parte de mí quería acercarse a hablar con ellas… preguntar si me conocían… pero estando Jake delante no era adecuado. No después de la conversación que tuvimos, si me acercaba a ellas podía dar por perdido cualquier cambio en su decisión.
-¿Me acompañas al baño? –Claire hizo un gesto de urgencia, sonreí y asentí acompañándola-. Gracias, no creo que a Nessie le entusiasmara venir conmigo…
-Ya… Jake parece preocupado.
-Sabe controlarse… -Sonrió y entró corriendo a uno de los servicios-. ¡Ahora salgo!
-Vale… -Reí apoyándome en los lavabos, Cloe y Ruth entraron-. Hola…
-Hola… -Cloe sonrió-.
-Ey… -Ruth pareció realmente contenta de verme-. Creo que te he visto alguna vez… ¿has ido a alguna fiesta de Seth, verdad?
-Sí… creo… ¿en la de fin de año?
-¡Sí! Es posible… pero te vas siempre muy pronto, ¿no?
-Sí… -Me quedé callada y ella asintió mirándome raro, Cloe entró al servicio que quedó libre-. ¿Venís mucho por este bar?
-Alguna vez… -Sonrió y me miró raro-. Así que eres algo así como familia de Nessie… -Me quedé algo parada y ella siguió-. Pero estás de acogida en casa de Seth…
-Yo… -Pensé rápido-. Nessie me ofreció que me quedase, pero… -Me encogí de hombros-. No quería molestarles, a veces parece que sobro.
-Es curioso, Nessie nunca me dijo que tuviera una prima pequeña…
-No son primas directas… -Claire salió algo acelerada y sonrió-. Son familia lejana… -Se encogió de hombros-. ¿Lo estáis pasando bien?
-Sí… -Sonrió-. Me alegra ver que Seth no está muy afectado después de que esa estúpida le dejara así… -Negó y luego sonrió de nuevo-. ¿Sabes qué pasó? Sólo nos ha dicho que ella se fue y le dejó, pero… ¿ha habido terceros?
-No, simplemente tuvo que marcharse… -Claire volvió a encogerse de hombros-. Pero él sigue enamorado de ella… o eso creo. Si es que lo preguntas por eso, claro… -Sonrió de un modo raro y me cogió de la mano-. ¡Vamos! Esta canción me encanta… -Se despidió de Ruth-. ¡Nos vemos!

El resto de la noche en aquel lugar siguió igual de tenso, Nessie nos propuso cambiar de bar, pero a las chicas les dijeron que nos íbamos de vuelta a Forks… no entendí eso hasta que ella me dijo que no quería que vinieran con nosotros, que todos estábamos incómodos allí…
En el siguiente bar lo pasamos mucho mejor, todos parecían más relajados, aunque a mí se me había escapado la oportunidad de saber algo más sobre mi yo pasado…

Suspiré de nuevo mirando por la ventana, me estiré de nuevo y recogí mi pelo en un moño. Me levanté y bajé a la cocina a por algo de beber, estaba sedienta. Abrí la nevera del tirón, examiné con detenimiento las opciones y me decanté por un zumo de piña que solía llevarme para el almuerzo.
-No deberías beber eso tan frío nada más despertarte…
-¡Señor…! –Puse la mano en mi pecho-. Tampoco deberíais darme esos sustos…
-Es divertido… -Dijo sonriendo y cogiendo una caja de leche-. ¿Lo pasaste bien anoche? –Asentí enérgicamente mientras bebía por la pajita, rió-. Nessie me dijo que se te acercó un chico bastante guapo… ¿cómo se llamaba?
-Pues… -Lo pensé-. John… Josh… no sé. Algo así… -Me encogí de hombros y él volvió a reír-. Era simpático, me dijo que lo acababa de dejar con su novia o algo así…
-Vamos, que intentó ligar contigo… -Entrecerré mis ojos y negué-. Ya… -Rió de nuevo-. Ni te enteraste de que ese chico ligaba contigo, eres un verdadero desastre.
-¡Que no! Sólo quería bailar y hablar, el chico parecía que lo había pasado bastante mal y me dio pena… no quería ser descortés.
-¿Descortés? Suenas como Ed… -Negó-. Pobre chico, se debió sentir realmente mal al ver que sólo querías bailar… yo en su lugar me hubiera deprimido mucho por no recibir ni una ligera muestra de cariño ni nada…
-Pero tú ayer tuviste mucho cariño… -Alcé una ceja y su risotada resonó por toda la cocina mientras buscaba un vaso, me senté en la encimera y le miré de cerca-. Ruth me preguntó muchas cosas, creo que le gustas, ¿sabes?
-¿Te preguntó? –Pareció preocupado-. ¿Qué…?
-Nada grave… cuando no supe muy bien qué decir Claire me salvó… o algo así.
-Le daré las gracias… -Sonrió de forma que pareció aliviado, me miró-. ¿Qué?
-Que si hay algo entre vosotros… -Negó rodando los ojos-. Parece una chica… extraña, pero parecía muy interesada en tu persona. ¿No has pensado en tener novia?
-No tengo ganas…
-Eso… -Hice una mueca-. ¿Es por esa chica? –Me miró confuso-. Hablaron de una chica y… -Pareció molesto-. Lo siento… no quiero incomodarte. Sólo quería… no sé. Saber algo más de ti, parece que no quieras compartir con nadie lo que pasó y cuando el chico de ayer me contó todo lo que le había pasado pareció aliviado… -Me encogí de hombros-. Puedes contarme lo que sea, yo siempre te cuento todo… no sé. Quizá te haga bien contarle a alguien lo que pasó.
-Simplemente se fue…
-Pero… -Me miró de un modo que me callé-. Lo siento… sé que te sentías culpable al respecto, pero no creo que debas…
-Oye, déjalo, ¿vale? –Su tono me pilló por sorpresa, suspiró y cerró los ojos, me miró apenado e hizo una mueca-. No me apetece hablar del tema.
-Lo siento…
-Ya… -Negó-. ¿Qué quieres hacer hoy?
-Nada en especial… creo que tirarme en el sofá a hacer nada… -Reí y él miró el reloj-. ¿Qué vas a hacer tú?
-Iré a comer a casa de Sue… -Me miró alzando una ceja-. Creo que era una invitación doble, pero si prefieres quedarte en casa…
-No, me apetece más ir a casa de tu madre. Cocina muy bien…

Asintió sonriendo y poco después fuimos a comer con Sue, Charlie, Leah y Vera… la tarde la pasamos en casa de Emily, reímos mucho contándonos novedades, pero apenas hacían referencia a pasado lejano, apenas un par de comentarios que Seth o Nessie cortaban con habilidad. Pero hubo un comentario que no pasó desapercibido a mis oídos, una conversación entre Gabriela y Ashley que empezó entre ellas pero terminé escuchando.
-Me ha llamado Mark, dice que Allan se marcha a Londres… -Gabriela rió-. Que deberíamos quedar para hacer una de las nuestras…
-Apenas recuerdo cuando fue la última vez que estuvimos todos juntos… -Ashley suspiró-. Creo que fue aquella en la que… -Se quedó callada e hizo una mueca-. Cuando Collin se cargó el sonido…
-¡Sí! –Gabriela empezó a reír-. Creo que… -Me miró de reojo y negó-. Creo que Kevin grabó eso, pero… -Se encogió de hombros-. La cinta no nos llegó.
-Hubiera estado bien verlo de nuevo… -Collin rió-. La cara de… -Se mordió los labios y sonrió, me miró y besó en la mejilla a Ashley-. Siempre nos dejabais de piedra cuando estabais en el escenario…

Las miradas que intercambiaron y que acabaron posadas en mí hicieron que me planteara que yo estaba involucrada en ese recuerdo… la cara de preocupación de Seth y la de Nessie me lo confirmaron. Cuando fui a preguntarlo Nessie sacó un tema completamente distinto… me guardaría la pregunta para un momento mejor, pero no iba a olvidarlo.
Y no lo olvidé. Aquella misma noche, pude ver ese recuerdo en un sueño, yo subida en un escenario de un local enorme, de repente luces y sonido se apagaban, miraba a varios chicos, a Gabriela en la batería… hasta que las luces se encendieron y Ashley aparecía recolocándose la falda. Una chica se reía alto, como el resto…

El miércoles Nessie vino a recogerme al instituto y lo visualicé de nuevo, pero cambió de tema como empezaba a ser costumbre… me apeteció patear a Jake. No quise olvidarlo, no podía… así que en el momento en el que Seth traspasó la puerta lo solté.
-¿Yo estaba aquel día en el escenario?
-Hola… -Dijo algo extrañado-. ¿Qué tal el día?
-No cambies de tema…
-Al menos podías saludar…
-Seth… -Alcé una ceja-. He soñado con eso, yo estaba en el escenario con más gente, quiero saber si eso fue así…
-¿Has hablado con Nessie? –Alcé una ceja molesta, él suspiró-. Sí, estabas ahí… Collin se emocionó demasiado por una canción y se distrajo un poco cuando estabas a punto de actuar, te cabreaste con él de lo lindo pero luego no paraste de reír y de mofarte de él en semanas… -Sonrió-. Fue divertido.
-Ya… -Hice una mueca y sonreí-. Parecía divertido en mi sueño… -Reí y lo pensé-. Entonces, yo… ¿Tocaba la guitarra?
-Y muy bien, he de decir… -Sonrió-. Como dijo Collin, veros en el escenario era emocionante, siempre… -Suspiró e hizo una mueca-. Dabais lo mejor de vosotras… y se notaba.
-Me gustaría poder recordarlo… -Hizo una mueca de disgusto-. Gracias por contármelo… -Sonreí-. No te preguntaré nada más, lo prometo…
-Respecto a eso… -Medio sonrió y se sentó a mi lado-. Jake… -Suspiró-. Lo está pensando. Nessie le ha contado lo que pasó en el baño, sé que querías preguntarle muchas cosas a ella y después a Claire… y te agradezco que no lo hicieras porque hubiera complicado todo mucho más y Jake no se lo estaría replanteando…
-¿Crees que dejará de obligaros a censurar mis recuerdos?
-No los censuramos… -Le miré mal-. Bueno, no sé. Ya veremos, pero no va a ser una decisión rápida… tenlo claro.

Asentí… la semana pasó realmente rápida, las tareas del instituto y las tareas extras que Nessie me imponía, de modo demasiado autoritario para mi gusto, no me daban tiempo a pensar ni a hacer mucho más que dormir y comer… y tareas. Cientos de tareas.
No llegué al nivel de mis compañeros hasta mediados de octubre, cuando Nessie me dio tregua dándome un día libre a la semana, el miércoles. Mi corazón dio un vuelco aquel martes quince de octubre.
-Bueno… creo que te lo has ganado… -La miré raro-. Mañana voy a darte la tarde libre… -Me sorprendí-. Los miércoles será tu día… podrás hacer lo que quieras… prometo no molestar.
-¿En serio?
-En serio… -Sonrió-. Vas bien, si sigues este ritmo, quizá para noviembre te de otro día más a la semana… creo que es un poco cruel encerrarte los viernes por la tarde… -Hizo una mueca-. Pero sólo si sigues así, no bajes el ritmo o no tendrás fiesta los viernes…
-Claro, profe… -Reí-. Creo que quedaré con mis compañeros, últimamente me pierdo demasiadas cosas…
-Suena divertido…
-Sí…
-Pero ahora… dale a la aritmética, anda…

Reímos y seguimos, aunque estaba realmente distraída. Al llegar Seth se fue algo molesta diciendo que tendría que haber esperado al final de la tarde para decírmelo, rió al ver la confusión de Seth, que me miró curioso.
-Voy a librar los miércoles… -Alzó sus cejas-. Soy buena alumna, así que ahora tengo un día menos de clases a la semana…
-Me alegro, eso suena bien… -Sonrió-. ¿Te apetece celebrarlo de alguna manera especial? Podemos ir al cine, han estrenado una de la que hablan maravillas…
-Pues… -Hice una mueca-. Había pensado en quedar con mis compañeros, hace muchos días que no salgo con ellos… ¿No te importa que vayamos la semana que viene?
-No, claro… -Sonrió-. ¿Quieres que vayamos a cenar fuera?
-Pues… -Sonreí, pero lo pensé-. ¿Y si nos ven? Quedaría un poco raro, ¿no?
-Cierto… -Hizo una mueca-. Bueno, puedo llamar y pedir que nos pongan cena para llevar… lo celebramos en casa… ¿te parece?
-Suena genial…

El miércoles fue una pequeña decepción. Hanna y Susan habían hecho planes de chicas, habían pedido hora en un salón de belleza de Port Ángeles, al parecer habían llamado hacía dos semanas y tenía una enorme lista de espera…

-No sabíamos que ibas a estar libre, podemos llamar, quizá te hagan un hueco…
-No, no pasa nada… -Me encogí de hombros-. Posiblemente vaya al cine, no sé…
-Podemos ir tú y yo… -Bryan sonrió-. Quiero ir a ver una nueva… y ellas jamás querrían acompañarme… ¿te apetece?
-¡Claro! Tengo muchísimas ganas de salir… luego podíamos quedar todos, cuando salgamos del cine y vosotras de vuestra sesión de belleza…
-Estaría bien… -Hanna sonrió-. ¿Estás segura de querer ir sola con Bryan? Yo esperaría a ver si puedes unirte a nosotras, mi prima me ha hablado genial de ese sitio…
-No te preocupes… prefiero cine.
-Pues quedamos después… -Susan sonrió y amenazó a Bryan con el dedo-. No la asustes, que te conocemos…
-Ni caso… -Dijo sonriendo-. No haré nada que tú no quieras… pero si quieres… sólo tienes que decirlo… -Rodé los ojos y reí-. Vaya cara… no seas así, mujer. Que era broma…
-Ya, seguro Bryan… -Hanna suspiró-. ¿A las ocho y media os va bien?
-Creo que la película acaba a las nueve… podéis esperarnos en el bar de siempre y vamos directos cuando salgamos…
-Vale… pero no intentes retrasarla…

Reímos y bromeamos. Cuando salimos de clase repasamos el plan, yo iba a quedar a las siete con Bryan en la puerta del cine… las chicas se despidieron montándose en el coche de la prima de Hanna y yo me despedí de Bryan montándome con Seth, me miró contento.
-¿Vais a quedar?
-Sí, iremos al cine… -Lo pensé-. ¿Hay algún autobús hasta Port Ángeles?
-Pues… -Sonrió-. Por ser tú, tienes taxi gratuito… -Reí y él sonrió-. ¿Dónde la llevo ahora?
-A casa, tengo que dejar los libros…

Asintió y arrancó. Dejé los libros y decidí darme una ducha rápida y cambiarme de ropa. Me puse una camiseta blanca y miré el reloj, aún eran las seis. Bajé al primer piso y me sentí un poco mal al recordar que hoy también era el día libre de Seth…
-¿Tienes planes?
-No sé, creo que me iré a dar un largo paseo con Maila, hace mucho que no la llevo a correr en condiciones… -Rió-. ¿A qué hora querrás que vaya a recogerte?
-No lo sé… cuando salgamos del cine iremos a tomar algo con las chicas… -Me encogí de hombros-. ¿A las diez o diez y media?
-Vale… si quieres puedes avisarlas, puedo llevar a tus amigas a casa si quieren… así no tienen que ir a recogerlas hasta allí de propio…
-¿Y tú si?
-Me gusta conducir… -Se encogió de hombros-. ¿Cómo van a ir?
-Pues… Hanna y Susan ya estarán allí creo… Bryan… no tengo ni idea. Hemos quedado en la puerta del cine a las siete… ¿En media hora llegaremos?
-Más o menos…
-Vale… -Me senté-. Entonces aún puedo descansar un poco…
-¿Tan cansada estás?
-Un poco… -Reí-. Sólo aguantarte cinco minutos es agotador… -Me hizo la burla y reí cuando mi móvil sonó-. ¿Sí?
-Ann… creo que no puedo ir a nuestra cita.
-¿Qué? –Reí-. ¿Qué te ha pasado?
-Carl no puede llevarme… y el último autobús ha salido hace cinco minutos… -Miré a Seth que parecía atento a la tele-. Espero que no hayas salido aún… ¿Vas en el autobús?
-No, va a llevarme Seth… -Lo pensé-. Espera… -Tapé en móvil y Seth me miró-. ¿Te importa que recojamos a Bryan y lo llevemos? Es que no pueden llevarle…
-Claro, que te diga la dirección y le pasamos a buscar… no creo que nos desviemos demasiado…
-¿Bryan?
-Sí…
-Oye, a Seth no le importa, podemos ir a recogerte… y luego ha dicho que puede ir a buscarnos… ¿te parece bien?
-¡Estupendo! Tengo muchas ganas de ir, de verdad…
-Vale… veo que realmente quieres ir a ver la película… -Reí-. Pasamos a recogerte… -Miré a Seth-. ¿En veinte minutos? –Seth negó y me mostró los dedos-. En diez, diez minutos…
-Espero que lleguemos… -Murmuró-. Os espero en el instituto, ¿de acuerdo?
-Perfecto… -Colgué y le abracé-. Gracias, me has salvado de una tarde en casa… -Me miró raro-. Que no es que no lo fuera a pasar bien contigo… pero me apetece salir con ellos por la ciudad…
-¿Si no iba él no ibas a salir?
-Pues… no hasta las ocho y media… -Me miró raro-. Las chicas han ido a un salón de belleza o algo por el estilo, salen más tarde… así que nosotros vamos a ir al cine antes.
-¿Tienes una cita o algo así?
-No, sólo voy al cine…
-Ya… -Me miró raro-. ¿Te gusta ese chico? –Negué horrorizada-. No sé… puedes contármelo si quieres, eh…
-No, no me gusta… -Me levanté-. Voy a terminar de arreglarme… no quiero llegar tarde y tenerle esperando, hace frío.

Subí corriendo y cogí una bufanda, el bolso y el abrigo. Antes de salir me miré al espejo y dejé mi abrigo para darme un poco de brillo, Seth se asomó con la ceja alzada. -No te gusta… ¿eh? –Rodé los ojos-. Si no te gustara, no te pintarías los labios…
-Me los pinto muchas veces… -So
nreí y lo pensé-. Está bueno, es de frambuesa… -Puse morritos y me los pinté-. ¿No quieres pintártelos tú?
-No, no me va mucho eso…
-¿No te gusta la frambuesa?
-Sí, me gusta ese sabor… pero no quiero que me pintes con eso… -Me acerqué con él en la mano y se alejó, le pinté un poco la mejilla y forcejeó conmigo reteniéndome-. No me pintes…
-¿No quieres probarlo? –Alcé una ceja y reí-. Seguro que te gustaría…
-No lo dudo, pero preferiría probarlo de otra manera… -Alzó una ceja y por alguna extraña razón mi corazón se paralizó, mi sonrisa se congeló y la suya pareció querer crecer… sentí un nudo en el estómago y él soltó un poco la presa cuando mi sonrisa se borró-. Déjame, anda… -Me quitó el brillo y tomó mi barbilla con cuidado, sentí mi estómago retorcerse cuando me miró atento. Pasó el brillo con cuidado por mis labios y sonrió-. Ahora está mucho mejor… te habías quedado a medias, ¿lo sabías?
-Sé pintarme sola…
-Pero es más divertido así… -Sonrió y se alejó tendiéndome el pintalabios-. Además, seguro que no puedes volver a pintarlos tan bien, me daré cuenta si te besas con ese tal Bryan si no los llevas igual cuando te recoja…
-Qué pesado con el tema… -Dije guardando el brillo-. Vamos, no quiero llegar tarde…

No supe que decir en el resto del camino, le miraba y él me miraba con una extraña sonrisa, parecía complacido. Cuando recogimos a Bryan fue algo incómodo al principio, Seth empezó a hacerle preguntas sobre su familia de acogida, sobre sus padres, su hermana… realmente me sentí como si fuera el padre pesado típico de las películas. Paramos frente al cine y di gracias al cielo de que se acabara ese suplicio, bajé corriendo y plegué el asiento con rapidez para que Bryan pudiera salir.
-¡Dar!
-¿Qué? –Dije algo molesta asomándome por la ventana-. ¿Tienes alguna pregunta más, o qué?
-No… -Pareció confuso-. Sólo… pásalo bien.
-Gracias…
-Deberías… -Pasó la mano tras su cabeza-. Suéltatelo un momento… -Rodé los ojos y me solté el pelo, sonrió y asintió-. Así está mucho mejor… -Me guiñó un ojo-. Pásalo bien.
-Eh… gracias.

Suspiré y Bryan sonrió y bromeó sobre las muchas preguntas que había tenido que contestar, me sentí realmente aliviada cuando la película empezó. La verdad es que era un tanto extraña, iba de un híbrido medio robot y medio humano, una especie de héroe que acudía al rescate de las pocas vidas que quedaban al paso de los robots malos. Salvaba a una niña de catorce años, por la cual sentía un apego mayor que por el resto de humanos a los que había ido salvando, protegiéndola hasta la batalla final, donde él acaba destrozado y medio muerto… la niña llora y él la consuela, cuando la niña le declara amor al híbrido y él responde que ojala hubieran tenido más tiempo para estar junto a ella. Me acongojé cuando realmente muere, había estado esperando que no fuera así…
-¡Ha estado genial! ¡La batalla final ha sido estupenda!
-El protagonista ha muerto…
-¡Da igual! ¡Eso es lo de menos! Pero ha sido realmente emocionante, yo ya no sabía de dónde más podían salir los malos… ¡ha sido brutal!
-Sí… claro… -Rodé los ojos-. ¿Dónde hemos quedado con ellas?
-Allí… -Señaló la cafetería de la esquina-. ¿Tan mal lo has pasado conmigo que ya quieres huir?
-No es eso… -Rodé los ojos-. Anda, vamos… no intentes hacerme sentir culpable por eso… -Sonrió y nos metimos a la cafetería, ya estaban esperándonos con la prima de Hanna. Me mostraron sus preciosas uñas, alabé sus nuevos cortes de pelo… pero notaron que algo me pasaba-. No, no es nada… la película no acababa muy bien… nada más…
-El principal muere y no hay historia bonita de amor… -Bryan rodó los ojos-. Es como la vida misma, no todo sale como esperamos.
-Ya, bueno… -Suspiré y cambiamos de tema, miré mi móvil en repetidas ocasiones esperando la llamada de Seth, por alguna razón estaba ansiosa por verle… siempre que había un final como ese él me reconfortaba de algún modo… Hanna chasqueó sus dedos en mi cara-. ¿Qué? Perdón…
-Estás… rara. ¿Te pasa algo? –Negué-. No parece que sea sólo por la película, pareces preocupada por algo más…
-Pareces una enamorada mirando su móvil… -Susan rió y de repente se quedó parada-. ¿Estás enamorada?
-No… -Intercambiaron una mirada que no me gustó-. No es eso, es la película…
-¿Por eso miras el móvil?
-No, es porque Seth tiene que llamar para llevarnos de vuelta a casa…
-No te preocupes por eso –La prima de Hanna sonrió-. Hay dos sitios más en mi coche, puedo llevaros hasta casa… pero deberías avisar ya para que no salga…
-Claro…

Le mandé un mensaje, pero el me dijo que seguía por Port Ángeles y que le llamase cuando fueran a marcharse todos. Al salir del bar Bryan y la prima de Hanna se montaron en el coche, Hanna y Susan se quedaron esperando conmigo, me miraban raro.
-¿Seguro que estás bien? Puedes contarnos lo que sea…
-Tranquilas, en serio… -Me mordí el labio y pensé en lo que me había dicho… sonreí-. ¿Llevo bien el pintalabios?
-Sí… -Susan entrecerró sus ojos y después los abrió junto a su boca-. ¿Te gusta Seth?
-¿Qué? ¡No! –Negué-. Es una broma entre nosotros… ha dicho que… bueno, es largo de contar… sólo quería tomarle el pelo…
-Hay tiempo… -Susan casi lo deletreó-. Cuenta…

Les conté la historia y al final ellas opinaron que estábamos locos el uno por el otro. Hanna dijo que no pintaba bien, que era algo realmente extraño… y Susan que era realmente tierno y romántico. Intenté negar lo que parecía que algo en mí decía a gritos.
-No sé… no me gusta. No es… no sé.
-Te gusta… -Susan sonrió-. Y mucho.
-No, en serio…
-Siento decirlo, pero vas a sufrir mucho… -Hanna suspiró-. Puede que él tontee, pero tienes que darte cuenta que eres una niña para él… y que además, por muy excitante que parezca… está prohibido…
-Lo sé… pero, ¿por qué voy a sufrir?
-Porque estás enamorada hasta la médula… -Me sonrojé y ellas sonrieron-. Ojala creyera realmente que me equivoco, sería bonito. Pero imposible. Olvídate y búscate otro para quitarte esa idea peregrina de la cabeza.
-Siempre tan positiva, Hanna… -Susan bufó-. ¿En serio ha sido así? ¿Te ha dicho eso de probarlo de otra manera? –Asentí-. Yo creo que le hubiera dado un rico beso, habría llamado a Bryan y lo hubiera cancelado todo… imagino después una sesión de caricias y besos…
-Susan… -Hanna arrugó la nariz-. No seas tan descriptiva. Deja de pensar en las guarradas que haces con Dylan, eso no va a pasar para ella.
-¡Seguro que él tiene más experiencia! ¡Es un punto a favor!
-Vale, por favor… -Arrugué mi gesto-. Dejarlo, no quiero oír nada más.
-Al menos reconócelo…
-Susan… -Suspiré-. ¿Qué quieres que te diga? ¿Qué me gusta? No lo sé… -Me encogí de hombros-. Nunca he sentido eso, no sé lo que es estar enamorada… bueno, lo sé. Pero no sé si estoy enamorada… me gusta estar con él, sí… y me río, le cuento muchas cosas… pero también con el resto de mis amigos me pasa…
-¿Has sentido la cosa? –La miré raro-. Eso… -Tocó su estómago-. Esa cosa que se te pone aquí, que no sabes si vas a poder seguir respirando…
-Déjalo… -Suspiré y vi el coche parar al otro lado de la calle-. Está ahí… ¿Quieres venir con nosotros, Susan?
-No… -Negó riendo-. Pero mañana… quiero que me cuentes cada detalle… por mínimo que haya sido… -Rodé los ojos mientras iba a cruzar y se metían al coche-. ¡Hasta mañana, ligona!
-Estúpida… -Mascullé muy bajito y saludé-. ¡Hasta mañana, chicas!
-¿Y yo qué? –Bryan reía asomado a la ventanilla-. ¡Hasta mañana, Leyre mía!
-¡Hasta mañana! –Dije riendo-. Hay que ver…

Suspiré y me metí al coche, Seth apoyaba el brazo en la puerta y sostenía su cabeza con una sonrisa extraña. Alzó una ceja.
-¿Leyre mía?
-Ha sido por la película… -Rodé los ojos y reí-. Es muy tonto…
-Ya… -Hizo una mueca y borró su sonrisa, pareció forzar otra-. ¿Lo has pasado bien? –Asentí-. ¿Te apetece ir a cenar?
-Claro… creo que tengo hambre…
-Ya… ¿no será que estás enamorada y sientes mariposas? –Me quedé helada y él pareció bromear-. Así que mañana tienes que dar muchos detalles, ¿eh? –Alzó una ceja-. ¿Vas a contarme que ha pasado o tengo que quedarme con la intriga?
-¿No íbamos a cenar?
-Vaya adolescente… -Rió-. ¿No vas a contarme cómo ha ido tu segunda primera cita?
-¡No era…! –Lo pensé-. ¿Mi segunda primera cita? ¿Sabes como fue la primera de todas?
-Claro… -Alzó una ceja-. Pero no pienso contar nada si no me cuentas esta… llámalo chantaje si quieres, pero… sé cada detalle de la primera…
-Arranca, creo que tengo hambre… -Alzó una ceja-. No son mariposas ni nada, es hambre, te lo aseguro… Bryan apenas me ha dejado palomitas…
-Uh… eso no suena nada bien para una primera cita…
-¿Quieres arrancar?

Reímos y aparcó el coche un par de manzanas más abajo. Caminamos durante diez minutos y me reí con ganas cuando me llevó a una bolera a cenar… pero tuve que reconocerle que la pizza era de las mejores que había comido… que yo recordara. Después me propuso una partida a los bolos, me ganó… de hecho, triplicó los puntos que hice. Paseamos hacia el coche mientras él se mofaba.
-Eres pésima… tu puntería… ¡Es que ni con la bola pequeña!
-Vale… deja de regocijarte y cuéntame como fue mi primera cita…
-Cuéntame que ha pasado con Bryan primero…
-Nada, hemos llegado al cine, hemos sacado las entradas, hemos comprado refrescos y palomitas… nos hemos sentado… -Me encogí de hombros-. El detalle más relevante es que apenas he comido palomitas… y que la película ha acabado fatal…
-¿No te ha intentado abrazar ni coger de la mano? –Negué-. ¿En serio? No me lo creo, creo que no captas bien las indirectas… recuerdo el chico de la discoteca…
-Oye, no cambies de tema… ¿Cómo fue mi primera cita?
-Realmente… no sé si pudo considerarse una cita. Fue más bien una especie de secuestro… -Le miré raro-. El chico fue a tu instituto, con artimañas te engañó y te propuso picarte las clases… -Se encogió de hombros y empezó a andar de espaldas-. Después te llevó a un mirador… y desayunasteis allí mientras unos niños os molestaron… -Alcé una ceja y él rió-. Creo que eso tampoco fue una cita, te quedaste sin beso por una llamada de Nessie…
-¿En serio?
-¡Sí! Ella es así, siempre llama en el peor momento… creo que la odiaste durante un par de días por aquello… o eso dijo ella.
-¿En serio? –Reí al preguntarlo de nuevo y él asintió-. Vas a caerte como sigas andando de espaldas… -Negó parando con una enorme sonrisa, me paré a un paso de él-. Tendría que haberte dejado seguir… -Señalé la farola que había a sus espaldas y reí con ganas-. Me hubiera reído mucho, dos pasos más y golpe asegurado…

-¿Te hubieras reído? –Asentí riendo-. Hombre, tras asegurarte que estaba bien, ¿no?
-Creo… creo que no hubiera podido esperar a saber que no te habías dañado, además… eres de goma, no te haces daño.
-Hombre, hubiera dolido… -Reí negando y él sonrió raro, se acercó a mí y tomó mi barbilla de nuevo, mi corazón volvió a pararse y tragué en seco-. ¿Te estás poniendo nerviosa? –Pareció divertirse, negué-. Ya, por eso tu corazón ha pasado de setenta a cien pulsaciones… ¿no? –Giró un poco mi cara y frunció el ceño-. ¿Cuánto rato ha estado besándote?
-¡Que no me ha besado! –Le empujé riendo-. He bebido… -Alcé una ceja-. Y he comido alguna palomita… pocas… pero he comido. Además acabamos de cenar… y creo que me los he mordido, por eso seguramente no lleve los labios pintados…
-No sé… tu corazón bombea como si estuvieras intentando mentirme… -Suspiré pesadamente y él sonrió-. Una pena…
-¿Una pena?
-Sí… -Soltó mi barbilla y agrandó su sonrisa-. Ese chico ha desaprovechado una gran oportunidad… -Alcé una ceja y él se encogió de hombros-. Yo en su lugar no lo hubiera hecho…
-¿Me hubieras besado?
-No… -Pareció pensarlo-. Probablemente no –Alcé una ceja y sonrió pagado de sí mismo-. Lo hubiera hecho al dejarte en casa… -Hizo una mueca-. Aunque quien sabe, quizá soy más débil de lo que creo y hubiera aprovechado en el cine… depende de lo lleno que estuviera.
-¿Me besarías si el cine estuviera vacío? –Frunció sus labios evitando una sonrisa. Alzó sus cejas y ando evitando la farola, girando mientras abría sus brazos-. ¿Eso qué quiere decir?
-Pues… -Se giró de nuevo y se encogió de hombros-. Nunca lo sabremos… -Siguió andando y rió-. ¿Vas a ir andando a casa o vas a pasar la noche ahí parada?
-¿No vas a llevarme?
-Si no te mueves... ¿o es que tengo que llevarte en brazos?
-Pues… -Reí-. Sería un punto a favor…

Me miró de un modo que reí y empecé a andar, la calle estaba prácticamente vacía y hubiera sido capaz de llevarme en brazos. Apenas hablamos en todo el viaje, pero cada vez que le miraba estaba sonriendo… y yo no podía evitar hacer lo mismo.
El jueves por la mañana… fue raro. Me desperté con una enorme sonrisa al sonar mi despertador, sonó la puerta cuando me estiraba y él se asomó.
-¿Desayunamos en casa o fuera? –Me encogí de hombros y él sonrió-. ¿Te apetece picarte la primera hora? –Me quedé algo parada y él sonrió más-. Anda, ve a vestirte…
-¡Espera! –Dije cuando cerraba, se asomó de nuevo-. ¿Cuáles son mis opciones?
-No sé… -Abrió la puerta un poco más mirando al techo pensativo, me mordí el labio al ver su torso, sonrió al darse cuenta y me sonrojé-. Será mejor que desayunemos fuera…
-¿Fuera?
-Sí… creo que ayer te quedaste con ganas de que tu Bryan te besara… y estás pensando en intentar engañarme a mí para que lo haga… -Cerré mis ojos y reí, cuando los abrí él parecía divertido-. Lo has pensado, ¿a que sí?
-Anda… -Señalé la puerta-. Desaparece, si no quieres cocinar ya haré yo el desayuno… pero no te inventes cuentos chinos…
-¿No lo habías pensado? –Pareció sorprendido-. Yo que venía dispuesto a ceder… -Frunció sus labios y yo me quedé estática, sonrió y alzó una ceja-. ¿Te lo estás replanteando?
-Piérdete…

Rió y cerró la puerta. Me miré al espejo, estaba realmente sonrojada y mordía mi labio… ¿Y qué era esa sensación en mi estómago? Resoplé y me tumbé de nuevo, lo medité… ¿Eso era que me estaba enamorando de Seth? No tenía nada claro si debía preguntar sobre aquello… mucho menos a Seth, pero era con él con quien solía hablar de esas cosas…
Me levanté y me di una ducha rápida, me vestí corriendo y bajé lo más rápido que pude para verle exprimiendo naranjas, hice una mueca.
-¿Ya has preparado el desayuno?
-Sólo el zumo… ¿por?
-Estaba pensando… -Hice una mueca y negué-. Da igual, te ayudo… ¿Qué ibas a preparar hoy?
-Pues… -Rió-. Estoy un poco vago, por eso te decía lo de desayunar fuera… -Señaló la caja de cereales-. Si quieres algo más elaborado…
-No, si vamos fuera tardaría demasiado y tendría que picarme la primera hora… -Me miró alzando una ceja-. ¿Me dejarías…?
-Hombre… -Lo pensó y cabeceó-. No todos los días, pero… no me gustaría pensar que empiezas el día sin energía porque no te he dado un desayuno decente…
-Ya… -Sonreímos y estuve por decir que sí, pero hice una mueca-. Es que tengo Historia, es lo que peor llevo y Nessie me echaría una enorme bronca…
-Cierto, sería muy irresponsable por mi parte, olvida que lo he dicho…
-No… -Sonreí-. No lo olvidaré, cuando quiera picarme algún día la primera hora te lo recordaré para que te sientas culpable y me dejes hacerlo…
-Chantajista… -Rió y yo sonreí, sonó la puerta y olisqueó-. Vale, vamos a desayunar decentemente…

Me alegró ver a Vera y a Leah, me sonrieron pero pareció que a Seth no le agradó tanto la visita, Leah le ponía alguna mala cara y Vera parecía intentar no meterse
, imaginé que eran cosas de hermanos.
-¿Las clases bien, entonces?
-Sí… -Sonreí saboreando el rico bizcocho-. Me encanta, está buenísimo Leah… Parece que supierais que íbamos a desayunar mal… -Seth pareció ofendido-. Esos cereales son asquerosos, lo siento… pero prefiero el bizcocho…
-Me imaginé que mi hermano no tendría ganas de nada hoy… -Le miró de reojo-. Ya lo llevaba pensando desde ayer en la ronda… ¿verdad Vera?
-Yo… -Se mordió el labio-. No quiero meterme, Leah.
-Ya… -Seth alzó una ceja y miró a Leah-. No deberías meterte tú tampoco…
-Seguro que Jake estará muy contento de conocer tus pensamientos… -Leah usó un tono raro, pareció una amenaza y pensé que me perdía algo-. ¿No?
-Bueno… -Vera se bebió el vaso de zumo en un trago y me miró alzando las cejas-. Nosotras nos vamos, ¿te acerco a clase, vale?
-Sí… claro…

Salimos rápido, era evidente que Leah y Seth tenían demasiadas cosas que hablar, pensé en preguntar a Vera, ella parecía preocupada.
-¿Sabes por qué están enfadados?
-Es culpa mía… -Hizo una mueca-. Ayer necesité ayuda y vino Seth, estuvo pensando… cosas. No sabía como sentirme, le di muchas vueltas y cuando Leah me ha hecho el relevo estaba pensando sobre ello. Se ha enfadado mucho y por eso hemos ido… quería ir sola pero imaginé que sería menos desagradable mientras estuviera yo, no quería que tú tuvieras que ver a Leah enfadada…
-Son cosas de la manada, ¿no?
-Sí… -Hizo una mueca-. Ya sabes…

Asentí y al llegar no esperé la avalancha de preguntas de Susan, me sentí un poco extraña y contesté a todo muy escuetamente, no podía dejar de pensar en Seth y Leah.
-No pareces muy emocionada…
-No, estoy… -Negué sonriendo-. No es lo que piensas, es sólo que… lo pasamos bien, pero es una tontería pensar que él está… -Fruncí el ceño-. ¿No?
-Claro que sí… -Hanna lo pensó-. Quizá el chico es así de serie, sexy en todos los sentidos… hasta al bromear…
-O quizá lo estáis idealizando… -Bryan suspiró-. Yo tampoco noté nada raro, bueno… -Lo pensó-. Si parecía un poco agobiante con las preguntas…
-¡Ves! Eso es que estaba celoso, seguro… deberías probar a decirle que te gusta Bryan, a ver cómo reacciona… -Susan sonrió-. Podemos hasta preparar falsas citas, sería genial…
-¿Gracias? –Dijo Bryan-. Chicas, estáis locas… rematadamente locas. Seguro que si le dices que yo te gusto, no habrá reacción alguna… bueno, se alegrará porque pudo comprobar que soy un chico estupendo… -Sonrió pagado de sí mismo-. ¿Quieres apostar?
-Yo apuesto diez pavos a que se pone un poco celoso… -Susan sonrió-. Ya veremos mañana… -Me miró-. Esta noche, se lo dices… a ver que pasa.

Suspiré, no me quedaba muy claro que fuera lo correcto. Estuve toda la hora de matemáticas distraída, también en química. El profesor me sacó a la pizarra, tuve que pedir algo avergonzada que me repitiera la pregunta para poder resolver el problema. Él pareció divertirse de verme así, cuando sonó el timbre sonrió ampliamente y yo resoplé, haciendo que riera.
Nessie me estaba esperando a la salida, sonreía ampliamente mientras me montaba con ella en el coche, parecía relajada.
-¿Qué tal el día?
-Bien… -Alzó una ceja y rió, me avergoncé al pensar que había visto lo que estaba planeando sobre Seth-. No digas nada, por favor…
-No lo haré, tranquila… -Rió-. Pero… ¿Cómo no me habías dicho nada antes? Realmente esperaba ser la primera a quien se lo dijeras, llevo viendo tus pensamientos encaminados a esa conclusión desde hace unos días…
-¿Qué conclusión?
-¡Que te gusta! –Dijo como si nada, me sonrojé y ella rió-. Vamos, al menos te has dado cuenta… aunque te hayan tenido que ayudar otros…
-¿Se nota tanto? ¿Por eso me bromea?
-No creo que se note demasiado, en serio. Pero recuerda que puedo ver lo que piensas, si no quizá no me hubiera dado cuenta… -La miré mal-. Él no cree que tú estés enamorada de él… ¿más tranquila así?
-Sí… gracias. Sería… raro. ¿No? –Hizo una mueca y se encogió de hombros-. Vamos, no quiero hablar del tema… me incomoda un poco…
-Tranquila… es normal. Pero, si quieres un consejo… intenta hablar cuanto menos del tema con tus compañeros, ¿quieres? Podrías meter en problemas a Seth, si el resto de padres se enteran… no sería nada bueno, ¿vale? –Asentí-. Haz que Bryan gane la apuesta… -Sonrió-. Intenta hacer que olviden el tema, no necesitamos más complicaciones…
-Está bien, lo siento… -Me sentí fatal-. ¿Podría meter en líos a Seth por eso? –Hizo una mueca que me hizo sentir peor-. Vale, mantendré todo eso en un rincón…
-Si quieres, puedes hablarlo con nosotras… -Se encogió de hombros-. Pero intenta que esas cosas queden dentro de… nuestro círculo.
-Vale… ¿Me avisarás si se nota mucho que me gusta? –Ella rió y me sonrojé-. Por favor, no me gustaría meter en líos a Seth…
-Tranquila, te avisaré…
-Gracias…

Estuve toda la tarde intentando hacer ejercicios, pero Nessie se mofaba de mí al verme tan distraída, realmente me sentía mal por haber puesto en problemas a Seth contando más cosas de las que debería a mis nuevos amigos. Lo peor vino cuando Seth llegó a casa, apenas le saludé y él bromeó con Nessie sobre irse rápido a casa para ver a Jake… me daba miedo hacer algo que delatara mis pensamientos. Cenamos en silencio y le ayudé a recoger, cuando terminé de secar el último plato y se lo pasé me miró raro, mi corazón se aceleró.
-¿Qué va mal? –Negué y él entrecerró sus ojos-. Tu corazón te delata… -Me sonrojé por sus palabras y pareció angustiarse-. Oye, que no pasa nada… -Me puse más nerviosa y él se asustó-. Oye, si no quieres contármelo, no pasa nada. Sólo que te he notado rara y pensé que querías hablar o algo…
-Estoy bien, en serio.
-Vale, vamos a ver la tele, ¿quieres? –Asentí-. ¿Una de risa para distraernos?
-Suena bien… -Pasó su brazo por mis hombros para intentar consolarme y nos sentamos, me miraba cada poco preocupado… decidí usar la táctica de Susan-. Puedo… -Suspiré, negué y volví a suspirar-. ¿Cómo sabes si te has enamorado de verdad? –Pareció sorprendido-. Déjalo, no importa…
-Pues… -Sonrió-. Está bien la pregunta, pero es difícil… -Se acomodó en el sofá y sonrió-. ¿De quien crees estar enamorada?
-No… -Suspiré-. ¿Qué más te da? –Sonrió de un modo extraño y negué-. Olvídalo, en serio…
-Cuando le ves… -Pareció emocionarse-. ¿Se te pone como un nudo en el estómago? –Creo que me sonrojé, él rió-. Por tu cara, eso es que sí… -Retorcí un poco la almohada que tenía en el regazo y desvié la mirada, aunque él seguía mirándome-. ¿Vas a contarme de quien te has enamorado?
-Pues… -Le miré de reojo-. Creo que de Bryan…
-¿Bryan? –Pareció sorprendido, borró su sonrisa por un momento pero volvió a dibujarla rápido-. Y no era una cita, ¿eh?
-No lo fue…
-¿Le gustas a él? –Lo preguntó con un tono raro, como si le preocupara de verdad… ¿eso eran celos? A mí me parecía más curiosidad por mi estado. Me encogí de hombros-. ¿No lo sabes?
-Pues… -Lo pensé-. A veces lo creo así, pero no lo tengo claro. No sé que se supone que pasa cuando alguien se enamora de ti… no es para nada parecido a lo que veo en las películas…
-¿Es mejor o peor?
-Creo… -Sonreí-. Creo que es mejor.
-Ya… -Alzó una ceja, parecía… ¿decepcionado?-. Bueno, no te preocupes por eso, ¿vale? Si realmente le gustas… acabarás sabiéndolo.
-¿Y si no le gusto?
-Sois amigos, ¿no? –Asentí-. No tiene que pasar nada… quiero decir… que si no le gustas podréis seguir siendo amigos…
-¿No será raro?
-Quizá al principio, pero no tiene porqué ser así. Sería un tonto si te trata distinto por eso, debería sentirse halagado porque una chica como tú se enamore de él… -Sonreímos y yo me sonrojé-. ¿Te gusta mucho? –Alcé una ceja-. Del uno al diez…
-No sé… -Suspiré y sonreí-. Creo que un diez…

Asintió con los labios fruncidos, se puso a ver de nuevo la película como si no estuviera sentada a su lado… ¿estaba ignorándome? No entendía mucho la reacción, era como si estuviera decepcionado, pero a la vez alegre y aliviado… me quedé más confusa de lo que había estado antes. Nos dieron las doce viendo la tele, dijo que era muy tarde y que debíamos ir a dormir… me costó horrores poder hacerlo.

El viernes les dije a las chicas que había estado completamente indiferente, que me preguntó cosas por curiosida
d, pero nada más… me miraron con preocupación pero les dije que no importaba, que seguramente fuera una tonta confusión y que esa mañana no me había sentido para nada atraída por él… aunque fuera la mayor mentira que había dicho en semanas.
Por la tarde Nessie me miraba preocupada, decidió darme algo de tregua y estuvo escuchando atenta mis alocados pensamientos.
-Seguramente se preocupó por si lo pasas mal… -Suspiró-. No deberías haberle dicho nada, Jake me ha dicho que les ha hablado del tema esta mañana, tiene miedo de que no le gustes a ese chico y que sufras, ahora cree que será culpa suya si lo pasas mal, que él te ha hecho sentir confusa respecto al chico.
-¿Por qué piensa eso?
-Porque te dijo lo de la cita, lo de los besos… -Se encogió de hombros-. Es complicado.
-Oye, ¿no le habrás dicho nada a Jake?
-No… -Suspiró negando-. Eso complicaría las cosas… Seth se enteraría inevitablemente y tú no quieres que él lo sepa… -Me miró de un modo extraño-. ¿Me prometes algo? –Asentí-. Intenta distraerle esta noche, Jake me ha dicho que ha estado discutiendo también con Leah… no sé. Me da que hoy no ha sido un gran día para él…
-No te preocupes… -Sonreí-. Intentaré que se distraiga, aunque no sé muy bien como… -Miré el ejercicio y suspiré-. Creo que ya he encontrado algo más complicado que las mates…
-No tienes muchas ganas de estudiar hoy, ¿eh? –Negué y ella suspiró-. No lo tomes como costumbre… pero estaba pensando en hacerle un regalo a Jake… ¿Te apetece ir de compras?
-¡Sí, por favor!
-Pues… -Miró su reloj-. Bueno, mejor lo dejamos para mañana por la mañana… ¿quieres que llamemos a Claire y nos vayamos a tomar algo?
-Gracias…

Reímos y avisamos a Claire, nos dijo que estaba en casa de Kim y nos presentamos las dos allí. Poco después vinieron las hermanas de Jake con Vera y los niños, pensé que Vera se sentiría un poco sola jugando con los niños y salí con ella al jardín.
Me hizo gracia ver a William pelear con Wendy por ir a hombros de Vera, Jonás y Hilda parecían ajenos a eso mientras jugaban conmigo. Se hizo tarde y me invitaron a cenar, pero tanto Nessie como Claire y yo decidimos marcharnos. Me dejaron en la puerta de casa y quedé con ellas para ir de compras a la mañana siguiente.
-¿Lo has pasado bien? –Dijo cuando entré, asentí con ganas-. Pareces contenta…
-Sí… -Sonreí y me senté a su lado, pareció sonreír débilmente-. ¿Qué tal tu día?
-Sin grandes cambios… -Sonrió y me miró-. ¿Has hablado con Bryan? ¿Por eso pareces tan contenta hoy?
-No… -Negué-. ¿Has cenado?
-¿Intentas cambiar de tema? –Dijo riendo-. ¿Qué ha pasado? ¿Te ha dicho algo? –Negué de nuevo-. Vamos… ¿no vas a contármelo?
-¡En serio! No ha pasado nada… sólo que tengo un poco de hambre y quiero cenar… -Sonreí-. No quiero que hablemos de eso, creo que sólo estaba confundida… no creo que me guste tanto.
-¿Y eso? Ayer parecías muy convencida… -Suspiré y negué-. Bueno, como quieras… no he cenado, así que si no quieres hablar del tema… podemos decidir qué te apetece cenar…

Acabamos preparando un poco de pescado, me dijo que era la receta secreta de su padre… se puso algo nostálgico al decirlo y no supe como actuar. Sólo le abracé y él pareció agradecido por eso.
El sábado por la mañana fuimos a Port Ángeles, me quedé sorprendida cuando nos llevó a una enorme tienda de bricolaje, fue directa a la sección de jardines. Me sorprendió muchísimo, compró un enorme jacuzzi que tenían en exposición y pidieron que se lo llevaran ese mismo día, el dependiente se quedó noqueado y le dijo que eso subiría el precio, pareció satisfecho cuando Nessie dijo que no era problema… seguimos mirando más cosas para el jardín, encargó una enorme pérgola, unos sillones, sillas y una mesa enorme.
Comimos allí mientras preparaban todo para llevarlo, el camión estaba cargado con todo lo que Nessie había comprado y nos siguió hasta su casa. Toda la familia de Ne
ssie estaba allí, reí al ver todo montado en menos de una hora… Fuimos al taller las tres para darle la sorpresa a Jake, se adelantaron y Nessie nos dijo que fuéramos a cenar allí…
-¿Pero qué es eso? –Dijo Seth riendo al ver la enorme pérgola-. ¿Eso es un jacuzzi? –Nessie se rió asintiendo al ver como casi se le salen los ojos-. Baba… -La miró-. ¿Me dejas probarlo?
-Luego… -Rió con ganas-. Ahora he preparado una fantástica cena para estrenar mis nuevos muebles de jardín…

Cenamos muy bien, Esme le había estado ayudando junto a Bella a preparar todo… los chicos parecían ansiosos por seguir comiendo, aunque a Seth no le costó mucho dejar de comer al ver cómo Nessie ponía en funcionamiento el jacuzzi. Desapareció y volvió minutos después con el bañador puesto y corriendo dispuesto a saltar dentro, pero Nessie lo agarró.
-No es una piscina, así que no te tires como si lo fuera… -Seth puso cara de bueno y ella rió-. Que sepas que la vas a notar fría… no quería que el resto se cocieran dentro.
-No resulta un problema…

Reímos, parecía hacerle más ilusión que a Jake, el cual siguió ayudando a Nessie a recoger mientras jugaba con Jonás y sus sobrinos. Me dio algo de pena Ephraim, no se acercaba a los niños… y tampoco hablaba mucho con el resto. Sólo parecía querer hablar con Vera y Leah.
-Le da miedo descontrolarse cerca de ellos… -Nessie suspiró a mi lado-. Jake está manteniéndole fuera, como al resto de los pequeños… de momento, no son necesarios… pero tampoco deben dejar de lado ese camino…
-Debe ser complicado…
-Lo es… -Suspiró-. ¿Has traído bikini? –Negué-. Sube arriba, creo que Claire tampoco ha traído… si queréis Alice me ha regalado un montón… están en el tercer cajón de la cómoda.

Asentí y subí con Claire, cogimos un par y nos cambiamos, al salir pensé que realmente hacía demasiado frío para meterse, me enrosqué la toalla fuerte para no pasar frío mientras esperábamos al resto, reí al ver a Seth acaparar todo el espacio. Los niños no tardaron mucho en empezar a bostezar, todos se fueron a excepción de Quil y Claire. Me dio algo de miedo al pensar en lo fría que estaría, pero el agua tenía una temperatura realmente agradable.
Estuvimos riéndonos un montón de rato, Seth parecía molesto al principio por tener que moverse, acabó en una esquina junto a Claire y Quil, Yo me puse en la otra punta junto a Nessie y Jake.
-¡Eh tío! Guárdate los piececitos para cuando nos vayamos, ¿quieres? –Nessie empezó a reír-. Es que os estoy notando…
-¿Tienes envidia, bombón? –Jake le lanzó un par de besos abrazando a Nessie y rió como todos-. Que si quieres, te dejo uno de mis pies para ti…
-De eso nada… -Nessie aferró las rodillas de Jake-. No comparto con él nada, que es un avaricioso y luego te querrá todo para él…
-Menos mal que a mi chico no puedes acercarte… -Claire rió y Seth le hizo cosquillas, ella se removió y se abrazó a Quil que la rodeó de un modo muy protector-. Envidioso…
-Yo creo que deberías buscarte novia… deja de acaparar las parejas de los demás, ¿no? –Los cinco me miraron a la vez, Nessie y Claire empezaron a reír, Jake y Quil un poco más tarde, pero Seth siguió algo paralizado-. Es broma, jo… no te enfades.
-Si quieres puedo ir a buscar a Bryan, para que me cambie el sitio…
-¡Idiota! –Le salpiqué riendo con él, me sonrojé pensando que quizá me gustaría más cambiarle el sitio a Jake…-. Deja de moverte, sacas el agua fuera y voy a coger frío…
-Por tu sonrojo, es un sí como una casa…
-Bah… -Nessie se carcajeó por lo bajo y la miré mal-. ¿Qué?
-Nada, déjalo… -Suspiró-. ¿Os apetece beber algo? –Todos negaron y ella chascó la lengua-. Tendré que ir yo por un refresco…
-Anda deja… ya voy yo… -Jake salió rodando los ojos y ella rió-. ¿Limonada?
-Sí, por favor… -Puso una mirada dulce y se echó a un lado-. Aprovecha, ahora hay más espacio… -Me acerqué algo más a ella, que se hizo a un lado y me miró alzando una ceja-. ¿Ahora te apetece a ti también?
-No, estoy bien…
-Ya, mentirosa… -Rió-. Ya voy yo… no te preocupes…
-Pero que no quiero… -Salió riendo e hice una mueca… seguro que lo había hecho a conciencia-. Genial… -Dije sumergiéndome un poco más, empezaba a tener frío en los hombros-. Resulta que ahora no sé ni cuando tengo sed…
-No me extrañaría nada… -Miré mal a Seth y rió-. Tampoco sabes cuando estás enamorada, no sería tan extraño…
-Qué pesadito estás con el tema, eh…
-Hazme un hueco, que voy… -Nessie saltó a mi izquierda, haciendo que tuviera que ponerme en la esquina donde antes estaba Jake-. Toma, ya tienes lo que querías… -Dijo tendiéndome la limonada con una divertida mueca-. No te quejarás…
-No…

Cogí la limonada y noté que Seth me miraba raro, Jake se metió con un vaso para Nessie y otro para Claire, la cual lo agradeció con una sonrisa. Estuvimos allí un buen rato más, me resultó divertido ver que todos iban cerrando los ojos y se acomodaban, hice lo mismo hasta que se Claire bostezó enormemente… nos reímos con ganas.
-Es que no he dormido mucho hoy… -Nessie empezó a reír y Quil se sonrojó-. Bueno… -Miró a Quil con dulzura-. ¿Nos vamos ya?
-Como quieras… -Frotó su nariz con la de ella y Seth miró para otro lado rascándose la cabeza-. Será mejor, que Seth se nos va a poner meloso si seguimos aquí…
-Seguro… -Rodó los ojos-. ¿Dejamos pues a la parejita estrenar su jacuzzi? –Me miró y asentí algo sonrojada, no había pensado en ese detalle. Él rió-. Vamos, te ayudo…

Me ayudó a salir, el frío fue horroroso por el contraste. Rió y me acercó la toalla rápido, me envolví y tirité por unos minutos, me cambié rápido en el baño de abajo… pero seguía temblando al llegar a casa. Seth me miró raro.
-No puedes tener tanto frío… -Parecía reír-. Anda, sécate el pelo, seguro que es por eso…
-No lo he mojado…
-Sí, llevas las puntas mojadas… -Lo tocó y yo rodé los ojos-. Bueno, haz lo que quieras… voy a ver que echan por la tele…
-¿Vas a ponerte ahora a ver la tele? –Asintió como si nada mientras se sentaba-. ¿Pero echan algo decente ahora?
-Algo encontraré… -Sonrió débilmente, algo dentro de mí se revolvió, como si no debiera irme… me miró raro-. ¿Qué?
-¿Te importa que me quede un rato? No tengo mucho sueño yo tampoco…


Palmeó el sofá y me senté a su lado, como si nada, pasó sus brazos por mis hombros e hizo que me apoyase en él. Mi corazón se aceleró por momentos, bromeó diciendo que él no era Bryan para que me pusiera tan nerviosa, le di un pequeño puñetazo y escondí mi rostro de sus ojos, no quería que viera mi sonrojo. Estuvimos viendo una película que parecía de risa, “In good company”… pero al final me quedé un poco mal… me miró alzando una ceja y sonrió.
-¿Quieres ver otra mejor?
-No… -Bostecé y él rió-. Creo que me voy a ir a dormir… estoy cansada… -Hizo una mueca y asintió, me quedé un poco mal por su cara y sonreí-. ¿Crees que podremos encontrar alguna cosa antes de irme? No me gustaría irme a dormir así de chafada…
-Podemos… -Resopló y pareció pensarlo-. ¿Te apetece que juguemos a algo? –Le miré sorprendida y me encogí de hombros-. ¿Póker?
-¿Cómo se juega?
-Ven… te enseñaré…

Le costó un poco enseñarme las reglas, pero después de unas cuantas partidas de prueba le había cogido el tranquillo. Me resultaba algo complicado saber cuando iba de farol y cuando no, pero la verdad es que me distraje mucho y me reí con ganas cuando conseguía hacer que se tragara algún que otro farol.
Nos fuimos a dormir tarde, casi eran las tres y media de la mañana. Nos despertamos casi a la hora de comer… abrimos la nevera y nos miramos de un modo que nos echamos a reír.
-Creo que hay un par de bolsas de patatas fritas en el armario…
-Sí, las cogeré… -Abrí el armario y lo pensé-. ¿Hay algo más sustancioso en el congelador? –Abrió y me mostró una lasaña congelada-. Pasable… -Reí-. ¿Pongo la mesa? –Alzó una ceja-. Vale, voy a llevar esto al sofá…
-La lasaña estará en diez minutos… -Asentí y me tumbé, él se sentó a mi lado comiendo patatas hasta que el microondas sonó, se levantó y trajo dos platos pequeños con dos cervezas, al dejarlas dudó y volvió a coger una-. ¿Limonada o cola?
-¿Me habías traído una cerveza? –Reí y él suspiró asintiendo-. Déjala, no quiero que te canses volviendo a la cocina… nadie va a saberlo…
-Ya… -Negó dejándola-. Luego si dices tonterías… no es culpa mía… -La abrió y me la tendió, reí con ganas-. Te quitaré el móvil, según me cuentan Vera y Claire las chicas adolescentes tenéis tendencia a declararos por mensajes cuando bebéis… -Alcé una ceja-. No quiero que el lunes estés incómoda con Bryan…
-¡Que no me gusta Bryan! –Rió bebiendo y yo suspiré-. Dame las patatas, anda…

Comimos y estuvimos como una hora tirados en el sofá, a veces su mano se metía en mi bolsa de patatas y yo la retiraba riendo, siempre me miraba de un modo raro que me hacía sentirme realmente extraña. Apoyó su cabeza en mi cintura y se acomodó, me sentí algo rara…
-¿Era algo que hacíamos habitualmente? –Me miró curioso-. Comer mal, tirarnos en el sofá a hacer nada… -Me encogí de hombros-. Cuando has traído la cerveza… parecía que para ti fuera algo rutinario, a pesar de que hace meses que estoy… así.
-Era nuestra rutina los domingos de resaca… -Rió-. Y no es un domingo así, pero es lo más parecido que recuerdo… siento si te ha molestado algo –Negué-. ¿Tienes todas las tareas hechas para mañana? No te he visto tocar un libro en todo el fin de semana… -Se metió una patata a la boca y yo asentí-. ¿Seguro? No quiero que manden notas a casa…
-Que no… -Dije con voz cansada-. Soy una chica ejemplar… así que deja de portarte como si fueras mi padre… no te pega, ¿sabes? –Alzó sus cejas y rió-. Es demasiado raro cuando te pones en ese plan, no me gusta nada…
-Pero es mi obligación hacerlo alguna vez… -Reí con él-. ¿Sabes qué me apetece? –Negué-. Ir a molestar a los vecinos… podríamos coger la bolsa de patatas que queda y una caja de cervezas…
-Tú quieres ir al jacuzzi, ¿no?

Asintió como un niño feliz… reí rodando los ojos y levantándome, le mandé un mensaje a Nessie para avisarle de que Seth quería acaparar su nuevo jardín. Apenas me dio tiempo a coger las patatas y las cervezas, él ya me estaba esperando con un bañador hawaiano puesto. Me reí con ganas y subí corriendo a por un bikini, miré por la ventana y vi los nubarrones grises que tapaban el sol… estaba loca por hacerle caso.
Nos pegamos más de una hora allí metidos comiendo patatas y bebiendo cerveza, nos reíamos cuando Jake y Seth hablaban de cuando eran niños… más bien cuando tenían mi supuesta edad. Nessie salió corriendo para traer otra caja más de cerveza y dos bolsas más de patatas, se metió riendo.
-Yo recuerdo la boda de Rachel… -Negó riendo-. Eso sí que estuvo bien, cuando tú desapareciste loco por Embry… ¿Quién te iba a decir que seríais cuñados?
-El mismo loco que me diría que compartiría el resto de mi vida con la hija de mi mejor amiga y mi antiguo peor enemigo… -Sonreí cuando Nessie le besó dulcemente, Seth carraspeó-. Mi pequeña…
-Sí, tu pequeña… que no acabó con un ataque de nervios porque yo le expliqué todo… -Tampoco te pongas tantos méritos… -Ness
ie alzó la ceja-. Que el favor te fue compensado con creces… ¿no?
-Y sabes que siempre te estaré agradecido por eso… -Brindaron-. Pero eso no me quita méritos, ¿no crees? –Nessie rió-. Deberíais haberme hecho al menos padrino de la boda…
-Oye, que yo no te pido que me hagas madrina de la tuya… -Rió pero pronto dejó de hacerlo, miré a Seth que estaba serio-. Oye, tito Seth… -Le abrazó-. Perdona, en serio, lo he dicho sin pensar y no quería… lo siento.
-Tranquila… -La apartó sonriendo-. No pasa nada, sé que no lo has dicho con mala intención…
-En serio, lo siento…
-Oye, déjalo, que no pasa nada… -Sonrió levemente-. Voy a por más patatas, ¿vale? –Me guiñó un ojo y sonrió-. No me quites el sitio, eh…

Miré a Nessie, ella miró a Jake que salió siguiendo a Seth… me sentí algo mal, una de esas situaciones en las que me perdía algo, pero tampoco me atrevía a preguntar abiertamente por no hurgar en la herida. Intenté sonreír pero ella se sintió peor y salió tras ellos… me quedé algo parada allí, no sabía que hacer… salí y caminé despacio hasta la puerta, me sorprendió mucho ver a Seth sentado en una silla y llorando. Jake ponía una mano en su hombro y Nessie estaba acuclillada aferrando las muñecas de Seth.
-Vamos… -Jake frotó su espalda-. Iré a por más cervezas, como sigas llorando así vas a deshidratarte, ¿sabes? –Seth pareció reír mientras lloraba, Jake sonrió-. Vamos, hermano…
-Lo siento Seth… -Nessie le abrazó y él limpió sus lágrimas negando-. ¿Me odias?
-Sólo un poco… -Rió limpiándose la cara con sus manazas-. Pero te odiaré más si no tienes cervezas suficientes para el resto de la tarde…
-Iré a por más… -Nessie me miró, me mostró que me necesitaba-. Ahora vengo…
-¿Es mucho pedir una limonada? –Ambos sonrieron y ella negó entrando a la cocina, me rozó al pasar a mi lado diciendo que tardaría a volver, Seth frotaba su frente como si no quisiera verme. A pesar de todo di los pasos necesarios para poner mi mano en su pelo, me miró y sonreí-. Yo… -No sabía que decir, las bromas habían funcionado, así que lo intenté-. ¿Tan poco te gusta imaginar a Nessie como tu madrina? –Él empezó a reír mucho y finalmente negó-. Seguro que lo haría bien…
-Lo sé… -Asintió sonriendo y sus ojos volvieron a rasgarse, suspiró-. Hubo un momento en que pensé que no tardaría mucho a tener la fortuna de mi hermano.
-Ya entiendo… -Hice un mohín y le abracé-. No te preocupes, seguro que todo se arregla… -Le miré y él suspiró-. No sé porqué, pero… tengo esa certeza –Pareció sonreír y yo sonreí-. Vas a hacer que quiera patear a esa chica sin conocerla de nada…
-Y tú vas a hacer que me enfade conmigo mismo… -Le miré raro y sonrió, se levantó y me cubrió con una toalla-. Estás empapada… deberías seguir calentita en el agua.
-Bueno… necesitaba un descanso… -Me encogí de hombros y él sonrió-. ¿Estás mejor?
-Sí… -No me gustó su tono y volví a abrazarle, noté que me aferraba con fuerza, como si quisiera volver a llorar, besé su mejilla con fuerza y él sonrió-. Mucho mejor…

Capítulo LXXIVb: Incomprensible.

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Aquí está el capítulo 74!!! Bueno, espero que lo disfrutéis, ya sabéis que últimamente me cuesta más subir capis, sobre los 10 o 15 días... pero es que he andado muy liada... iré subiendo, lo prometo... pero dudo que pueda aumentar "el ritmo de producción" jajajaja
Espero que a pesar de todo sigáis pasándoos por aquí y me comentéis absolutamente todo lo que queráis!!! Me encanta saber de vosotras :)
Un besazo enorme!!!
Silvy ^^



-¿Seguro que estás bien? –Dijo sacándome de mis pensamientos-. Estás como… apagada.
-Estoy bien… -Intenté sonreír-. Sólo que… no sé, ellos ya se conocían de antes y yo me siento un poco… extraña. Han hablado mucho, me he enterado de muchas cosas de sus vidas, pero aún así siento que si no estuviera, para ellos sería igual –Él alzó una ceja-. Sí, suena un poco…
-Tranquila, no te juzgo.
-Lo sé, nunca lo haces… -Medio sonreí con él y suspiré-. Sólo quiero llegar a casa y dormir, me siento realmente cansada… -Mordí mis labios, por alguna extraña razón quería llorar, Seth me miró apenado y negué-. Sólo estoy cansada…
-Ya llegamos…

Noté que me miraba, no dejaba de hacerlo y eso me hacía querer llorar más aún todavía, era una sensación realmente extraña, no entendía la razón de mi estado de ánimo. Al llegar a casa subí las escaleras y cerré la puerta de mi cuarto, me pareció un poco mal por Seth, pero realmente no quería que me viera llorar. Me tumbé en la cama y quise hacerlo, pero sabía que él me oiría. Decidí darme una ducha y acabé mezclando mis llantos con el agua, me miré al espejo al salir y mis ojos estaban rojos, como casi toda mi cara. Salí del baño y me tumbé de nuevo sobre la cama.

Nessie reía, sacó la lengua y volvió a mirarme con una sonrisa. El semáforo se puso en verde y arrancó, giramos a la derecha y bajamos por la gran avenida, me quedé mirando el precioso lago que había a la derecha, sonreí de nuevo cuando noté que frenábamos. Miré delante, un trailer se chocaba con el vehículo que teníamos delante. Una lluvia de trozos de metal me distrajo del coche, cuando volví a mirarlo giraba y se chafaba como si fuera de plastilina, cayendo al lago. Gritamos y bajamos del coche, empecé a sentir la angustia, a llorar. Nessie se metió al agua, yo me caí de rodillas, el césped estaba humedecido por la ola que el coche había provocado.
-¡Nessie! –Grité, pero no me escuchó-. ¡Nessie! –Susurré-. Dios mío…
-Darlene… -Una mano cálida se posó en mi hombro. Otra imagen fugaz, parecía un funeral. Nessie caía redonda al suelo-. Darlene, despierta, por favor.
-¡Nessie! –Grité de nuevo y me incorporé, Seth me miraba pasmado-. ¡Seth! –Me abracé a él, sollozaba y no entendía porqué-. Seth…
-Tranquila, sólo ha sido un mal sueño… -Asentí llorando en su hombro, noté que mis uñas se habían clavado en su piel, dejé de presionar tanto pero él no soltó su presa-. Tranquila, estoy aquí… -Se arrodilló en la cama y me sentó sobre él-. Ya ha pasado… -Sonrió levemente acariciando mi pelo, asentí y le miré-. ¿Quieres hablar de ello?
-No… -Negué y vi que estaba oscuro, volví a abrazarle y le di un beso en la mejilla-. Gracias por despertarme, siento haberte molestado…
-No pasa nada… estaba viendo la tele –Sonrió levemente-. No echaban gran cosa…
-Idiota… -Sonreí limpiando mis lágrimas-. ¿Qué están poniendo?
-No sé, estaba empezando una película de las que le gusta ver a Claire… -Se encogió de hombros-. Estaba buscando algo mejor, pero…
-Ya… -Reí-. Reconoce que te gustan…

Bajé con él para ver la película, eran casi las dos de la madrugada. A media película él no paraba de bostezar, así que le propuse que fuéramos a dormir. Me tumbé e intenté dormir, pero cada vez que cerraba los ojos la misma imagen venía a mi cabeza, aquel coche girando y cayendo al lago mientras trozos de metal caían sobre nuestro coche rojo.
Decidí que las seis de la mañana era buena hora para despertarse, bajé con sigilo a la cocina y busqué algo que me despejara, cogí un paquete de café y preparé como medio litro. Quizá me había pasado… puse una par de rebanadas de pan en la tostadora y me puse un vaso de café para mí, deje el resto por si Seth quería. Bebí y casi escupí.
-Deberías echarle azúcar… -Me sobresalté ligeramente y él rió, rodé los ojos y negué mientras buscaba el tarro, pero él me empezó a poner el azúcar antes de que pudiera moverme-. No he oído tu despertador… ¿Tan rápido te has despertado?
-Es que… -Soplé al café negando-. No he podido volver a dormir –Me miró preocupado y sonreí-. Creo que dormí demasiado por la tarde…
-Ya… -Sirvió otro vaso de café para él-. Hoy entro un poco más tarde a trabajar, si quieres puedo llevarte a clase… -Asentí mientras él bebía-. Nessie llamó ayer mientras dormías, dijo que volvería la semana que viene…
-Genial… -Él sonrió de un modo extraño-. ¿Qué?
-Nada… -Rió bebiendo y suspiró-. Es genial… -Alzó una ceja y sonrió-. Deberías llamarla… -Le miré mientras bebía-. Es su cumpleaños, ¿sabes?
-¿Es su cumpleaños? –Asintió y dejé el café de golpe para salir a por el teléfono, él me lo quitó riendo y marcó rápidamente-. ¡Déjame! Iba a llamarla yo…
-Se siente… ¿Nessie? ¡Felicidades! ¿Cómo has pasado la noche? ¿Divertida? –Empezó a reír y ni me miró mientras forcejeaba conmigo… ¿cómo podía hacer eso? Gruñí y me senté con los brazos cruzados en el sofá-. Ya, te capto… veo que no estás de humor, te paso con Dar…
-Hola… -Mascullé-. Feliz cumpleaños.
-¿Qué te pasa?
-Quería felicitarte yo primero, pero Seth no me ha dejado… -Él rió alto volviendo a la cocina-. ¿Qué tal todo? ¿Vuelves la semana que viene?
-Sí, quizá el lunes o el martes, aún no lo sé seguro…
-Te echo de menos…
-Y yo a ti, ¿todo bien en clase? –Afirmé-. Bueno, ya me contarás cuando vuelva… tengo que dejarte, nos vamos de caza, creo que me he ganado una pelea con osos por ser mi cumpleaños…
-Claro… -Mascullé un tanto horrorizada-. Pásalo bien…
-¡Seguro!

El día fue mucho mejor de lo que esperaba. Las clases pasaron relativamente rápido, incluso pude mantener conversaciones relativamente normales con la gente de mi clase. A la hora de comer decidimos sentarnos todos juntos, aunque Susan y Hanna llamaron mi atención para que me sentara con ellas, así que me puse a su lado. Escuché que las chicas de mi izquierda comentaban algo sobre la mesa de los de último curso. Uno de los chicos que estaba allí se levantó y se dirigió hacia nuestra mesa, Susan cuchicheó algo que no entendí.
El chico, rubio, fuerte y de unos ojos azul cielo se apoyó con un gesto extraño en la mesa, mostró sus blancos dientes y alzó una ceja.
-¿Todo bien, hermanita?
-Sí… -Susan rió levemente, sus mejillas se tornaron rosadas y el chico revolvió su pelo-. ¿Qué tal tu día, Dylan?
-Como siempre… -Se retiró con una sonrisa extraña-. Te esperaré a la salida, ¿vale? No te retrases o soy capaz de irme sin ti…

Hanna me miró alzando una ceja y reímos levemente al ver a Susan tan cortada, Bryan llegó riéndose y diciendo que había visto su sonrojo desde la fila.
Realmente ese día estaba contenta, las bromas con mis nuevos compañeros me distrajeron mucho y me hicieron sentirme un poco más integrada, Bryan me resultaba familiar de alguna extraña manera, era realmente divertido. Susan se envalentonaba mucho hablando sobre lo sexy que era su hermano postizo, pero nos que
dó muy claro que sólo era una fachada, ya que cuando él merodeaba cerca se sonrojaba y se quedaba muda, algo que nos divertía. Hanna… era más discreta y comedida, hablaba poco pero tenía un humor diferente, algo más irónico que a veces me costaba captar, además era una chica realmente inteligente, fue la nota más alta de los test iniciales. La mía… había aprobado todo, pero sin despuntar en nada. Sólo en química, que saqué un modesto siete con cuatro. Nada comparado con el ocho setenta y cinco de Susan, el ocho veinticinco de Bryan y el alucinante nueve setenta y cinco de Hanna. Parecía ser la más tonta de la clase, eso me deprimió para la última clase del día.
Salí ligeramente molesta, no es que esperase grandes notas, pero era un poco molesto estar rodeada de cerebritos mientras yo parecía seguir en párvulos. Susan rió cuando salíamos, un coche pitó y ella lo señaló, era un Honda Civic. Nos miró y yo reí ligeramente, vi el BMW azul aparcando en la puerta, Seth llevaba la capota bajada y saludó sonriente. Levanté mi mano discretamente y me despedí de mis amigos, aunque Susan me cogió del hombro.
-¿Quién es ese macizo?
-Pues… -Me encogí y reí levemente-. Mi familia de acogida…
-¿Él? –Asentí-. ¿Es cómo el hermano mayor?
-No… él es toda mi familia de acogida, él y sus amigos… -Me encogí de hombros-. Es muy majo y su familia me trata bien, como sus amigos…
-Me estás diciendo… -Entrecerró sus ojos-. ¿Sólo vives con él? –Asentí naturalmente, ella abrió su boca hasta el máximo-. Madre mía… -Susan rió-. ¿Por qué no has contado eso antes? ¿Podemos cambiar de casa?
-No te quejes… -Hanna suspiró-. Y yo tengo que dormir con mi primo pequeño…
-Yo… no duermo con él. Tengo mi cuarto y eso…
-¿Estás…? –Me miraron raro y Susan rió-. Si yo fuera tú, no dormiría en mi propio cuarto… -Le miré, él parecía sonreír distraído, como si no le importase estar esperando-. ¿No has pensado…? Vale, quizá yo sea algo pervertida y quiera montármelo con Dylan… ¡Pero tía! No me pensaría ni un solo momento meterme en su cama si estuviéramos solos todo el día… ¿Qué hacéis normalmente?
-Pues… -Me encogí de hombros-. No gran cosa. Ver la tele y comer…
-Vamos, no fantaseéis tanto… -Bryan bufó-. Sólo lleváis cuatro días aquí y ya estáis pensando en procrear… ¡Mujeres!
-Normalmente es al revés… -Hanna le apuntó con el dedo-. No quiero recordarte el verano que nos diste con tu amiguita Natasha…
-Esto es peor… -Dylan volvió a pitar-. Ve con tu hermano, quizá os lo montéis en el camino…
-Eso sería bestial… -Susan rió alejándose-. Nos vemos mañana, chicos…
-Bueno… -Vimos el coche de los tíos de Hanna y suspiró-. Podemos acercarte, si quieres… -Bryan se encogió de hombros-. No es que vivas lejos, eh… si quieres ves andando.
-No, vamos. Estoy muy vago… Hasta mañana, Ann.
-Hasta mañana chicos…
-Adiós Mary Ann…

Me despedí con la mano y me acerqué al coche, Seth bajó sonriendo y cogió mi mochila antes de que llegara, dejándola en los asientos traseros.
-Pareces más contenta hoy… ¿mejor?
-Sí… ya no me he sentido tan mal, aunque… -Suspiré-. Debo parecerles una cateta, mis notas han sido mediocres… -Alzó una ceja-. Mi nota máxima ha sido un siete con cuatro… es la nota mínima del resto…
-Bueno, no te tortures… -Acarició mi pelo-. Ya verás como pronto coges el mismo nivel, te ayudaré en lo que pueda y Nessie lo hará en cuanto vuelva, no te preocupes…
-Ya… -Bufé metiéndome en el coche, él saltó y le miré mal-. ¿No me echas la bronca por tardar tanto a venir al coche ni nada?
-No… te han entretenido, no ha sido culpa tuya… -Sonrió extrañamente y alzó una ceja-. Era urgente que te dijeran lo atractivo que soy, ¿no crees?
-Pero… -Rodé los ojos y negué suspirando, debí haber imaginado que nos estaba escuchando-. Anda, arranca de una vez. No necesito escuchar esas burradas sobre ti… y menos saliendo de tu boca.
-¿Acaso miento? –Le miré incrédula, él parecía divertirse-. ¿Me estás diciendo que no soy atractivo, o qué?
-Te estoy diciendo… -Suspiré y negué-. Que arranques.
-Bueno, no lo olvides… -Me apuntó con el dedo-. No me has contestado, luego no me pidas que yo conteste a tus preguntas…
-No te haré más preguntas, se las haré a Nessie… -Bufé como una niña pequeña-. A ella no le hace falta que le diga si es guapa o no…
-Bah… -Arrancó y seguimos en el coche, poco después temblé y puso el techo, le miré como agradecimiento-. No es si soy guapo o no… no es lo mismo –Le miré raro-. Hay muchos guapos que no son atractivos y muchos atractivos que no son guapos…
-Seth… -Se encogió de hombros y suspiré-. ¿Crees que Leah es atractiva?
-Bhuj… es mi hermana, no es…
-¿Y Vera?
-Mi prima… -Alcé una ceja y él suspiró-. Vale, he cogido el punto…
-¿Y yo? –Me miró riendo y negó-. ¿No te parezco atractiva?
-No pienso contestar a eso, no me parece justo que te diga lo que pienso si tú no compartes información del mismo calibre…

Sonreímos, decidí mirar por la ventanilla y no darle importancia al ligero quemazón que notaba en mis mejillas, él parecía seguir riendo, aunque no quise cerciorarme para que descubriera mi sonrojo. Cuando llegamos a casa Maila salió disparada hacia mí, la abracé y me sentí realmente calmada. Decidí empezar a estudiar algo, así que me senté en la mesa del comedor y extendí todos mis libros, tenía que ponerme más al día, tenía que llegar a su nivel.
Un olor a huevos, patatas y beicon llegó a mi nariz, me asomé a la cocina y reí al ver a Seth sirviendo los platos, me indicó que podía sentarme en la mesa.
-¿Quieres algo?
-¿Acaso no habías contado conmigo? –Reí al ver todo el beicon-. Creo que debo comer algo de eso, o realmente te dará una enorme subida de colesterol…
-Una vez al año… -Se encogió de hombros riendo-. Toma, compartiré contigo un poco de lo que quieras, pero las patatas son mías, ¡eh!
-¿No vas a darme ni una? –Él negó comiendo una y puse cara de pena-. Es lo más rico que has hecho, no me e
ntusiasman mucho ni el beicon ni los huevos…
-Claro, pero mis patatas sí, ¿no? –Reímos cuando asentí y él negó dándome todo el plato-. Anda, cómetelas todas, con la cara de pena que pones no puedo resistirme… -Reí y él me amenazó con el dedo-. Como no te comas todas…
-¿Te las comerás tú? –Reí y él asintió riendo y sentándose-. Toma… -Le eché la mitad-. Yo no necesito tantas como tú, no quemo mil calorías a la hora, como otros…
-No quemamos mil… -Alcé una ceja-. Bah, sólo quemamos unas… cuatrocientas o quinientas a la hora… -Casi me atraganté y él rió-. Sólo son alrededor de diez mil calorías al día, no es tanto…
-¿Cinco veces más que una persona normal?
-Depende a lo que llames normal… -Se encogió de hombros-. Pero bueno, ¿qué más da? Cómete eso que se va a enfriar…

Reímos mientras cenábamos y después me puse a estudiar, apenas media hora ya que Seth no paraba de reír viendo la tele y me senté con él a ver la serie. Bostecé y me quedé algo grogui, rió y me mandó a la cama, apagó la tele y nos fuimos a dormir. Una vez en mi cama, empecé a pensar sin querer en el sueño de la otra noche. Fue un sueño realmente extraño…
Estaba tan cansada que caí de nuevo en un profundo sueño, de nuevo volví a verme en el coche rojo con Nessie, pero no era mi yo actual, era mi antiguo yo. Me desperté cuando el camión chocaba con el otro coche. Suspiré y noté que estaba sudando, limpié mi frente y suspiré. Abrí la ventana y una fría brisa hizo que se calmara mi acelerado corazón.
Cerré la ventana y abrí la puerta con miedo, llamé despacio dos veces en la puerta de Seth, escuché que gimoteaba que pasara.
-¿Puedo?
-Sí… -Murmuró medio dormido-. ¿Un hueco?
-Por favor… -Él rió haciéndose a un lado, me tumbé y suspiré mirando su enorme espalda-. He vuelto a tener el mismo sueño… -Me miró y mordí mi labio-. Iba con Nessie en un coche, el coche al que seguíamos chocaba con un camión y caía a un lago… -Su cara se desencajó, pareció espabilar y se incorporó-. ¿Tiene algún sentido?
-Pues… -Cogió aire y suspiró-. No lo sé, deberías hablarlo con Nessie…
-Porque… -Entrecerré mis ojos-. ¿Me estás ocultando algo?
-Es… -Suspiró y se sentó sobre sus pies-. No le des vueltas, sólo… puede ser algo o no puede ser nada. Quizá sea algo que ella te mostró sin querer, o algo que has visto en alguna película y has trasladado a tus sueños…
-Estás… -Suspiré y me sentí molesta-. ¿Es algo de mi pasado? ¿Por eso no me dices nada? –Él hizo una mueca que me dio la respuesta-. Está bien, hablaré del tema con Nessie cuando vuelva… -Me levanté y salí-. Buenas noches, Seth.
-Oye, espera…

Di un portazo al salir. Otro al entrar en mi cuarto. Empecé a darle vueltas al tema, realmente algo había desencadenado ese sueño y si mi memoria volvía a su ser… ¿Cómo podía querer ocultarme algo así? ¿Por qué me guardaba algo así? ¿Por qué no me decía las cosas claras, como siempre? No entendía su estúpida reacción, me recordaba a cómo se puso el día que vino la señora con la niña… Llamó a la puerta y bufé molesta.
-Oye… -Suspiró acuclillándose a mi lado-. Visteis un accidente así, tal y como lo describes. Pero yo no estaba allí, no te puedo contar nada más… porque no sería justo contarte algo a medias, no sabría como hacerlo. No sé qué significa que hayas tenido ese sueño, sólo… espera a que ella vuelva.
-Siempre me has contado todo, ¿por qué me ocultas esto?
-Porque… -Suspiró-. No sé cómo contártelo. ¿Puedes esperar a que vuelva, por favor? Será mejor, ella podrá mostrarte todo, yo no sabría ni por dónde empezar, acabarías echa un lío y… -Suspiró de nuevo-. No te enfades conmigo, por favor.
-Me da miedo volver a soñar con eso… -Hice una mueca-. Me angustio mucho, no quiero soñar con eso otra vez… -Acarició mi pelo y mordí mi labio-. Me da miedo estar sola si vuelvo a soñar eso.
-Mira… -Sonrió y señaló su cuarto-. Dejaré las puertas abiertas… si puedo oírte murmurar con las puertas cerradas… -Sonreí levemente-. Creo que seré capaz de escuchar hasta tu corazón si dejamos todo abierto, no estarás sola. En un segundo puedo cruzar el pasillo y despertarte si tu respiración se acelera, lo prometo.
-Está bien…
-Un segundo… -Se fue a su cama y volvió-. ¿Ves? Soy rápido.

Asentí riendo y besó mi pelo, me miró mientras cruzaba la puerta y me sentí algo más tranquila. No volví a soñar nada en toda la noche.
El despertador sonó lejano,
me removí y sonreí al verle murmurar con la mano en la mesilla, reí un poco y me miró sonriente, saludé con la mano y él hizo lo mismo.
-¿Has dormido bien?
-Como un bebé… -Reí-. Apenas no me han molestado tus ronquidos…
-¿Mis ronquidos? Yo no ronco… -Negué riendo y él bufó-. Seguro que era Maila… -Rió y se levantó estirándose-. Aún es pronto, si quieres puedes dormir un poco más… -Negué-. Vale, como quieras. Yo tengo que ir al taller un poco antes, vendré para acercarte a clase luego, ¿vale?
-Genial…
-Sí… -Pareció reír mientras negaba-. Genial… voy a ducharme.

Suspiré viéndole estirarse de nuevo antes de levantarse, me asomé ligeramente para verle, ¿iba en calzoncillos? Me quedé algo paralizada y ruborizada al pensarlo. Me levanté de un salto y abrí el armario para quedarme algo parada.
-¿Va a hacer frío?
-¡No hasta media tarde! –Escuché junto al ruido del agua que cesó a los dos segundos-. ¡Pero tampoco estamos en verano!
-Ya… -Murmuré-. Gracias por la ayuda… -Suspiré buscando qué ponerme-. No estamos en verano… -Negué-. ¿Qué demonios quiere decir eso?
-Que no te pongas tirantes… -Me giré y él reía abrochándose los pantalones, sonrió acercándose y sacando una camisa blanca, hizo una mueca y me tendió una camiseta de tirantes negra-. O no sólo tirantes… -Sonrió-. Creo que tienes fácil combinación con eso, ¿no?
-¿Ahora vas a ser mi estilista? –Sonrió y yo miré por un instante su torso, alcé una ceja-. Deberías vestirte tú primero, ¿sabes?
-Claro… ha sido un placer ayudarte, no hace falta que me des las gracias… -Dijo irónico y riendo-. Tengo que irme ya, desayunaré luego, cuando vuelva a buscarte… -Revolvió mi pelo-. Volveré en una hora, ¿vale?
-Claro… -Reí mientras se alejaba y le llamé-. ¡Seth! –Se giró alzando la ceja y sonreí sacudiendo la camisa-. Gracias.

Sonrió mordiendo su labio y me guiñó un ojo negando, sonreí levemente y me giré para buscar unos vaqueros, dejé todo en mi cama y busqué la ropa interior para meterme al baño, momento en el cual Seth se despedía bajando las escaleras a velocidad de rayo.

Cuando vino a buscarme le había preparado el desayuno y me dejó en clase con la típica sonrisa de siempre, esa que me daba confianza para bajar haciéndome sentir que todo iría bien. El día estuvo bastante bien, como el resto de la semana. Poco a poco iba descubriendo facetas nuevas en cada uno de ellos, aunque seguía extrañando a Nessie de manera extrema. Mis amigos dijeron estar ansiosos por conocerla, no había parado de hablarles de ella.
El jueves por la noche fue el peor momento de la semana, volví a tener pesadillas y el único consuelo que tuve fue despertarme y abrazar a Maila, ya que Seth estaba de ronda. Volví a dormirme en el sofá con ella, aunque otra pesadilla diferente me despertó. Decidí ducharme, eran ya las cinco de la mañana y preparé el desayuno, al menos estaría distraída. Desayuné mientras estudiaba cuando escuché la puerta, mi corazón dio un vuelco y me levanté corriendo hacia la puerta, me choqué con él en la entrada de la cocina y le abracé.
-¿Estás bien? –Asentí en su pecho-. Oye… -Cogió mi barbilla y frunció sus labios-. ¿Has tenido pesadillas otra vez? –Asentí y él me llevó hasta la silla, me sentó y se acuclilló frente a mí-. Lo siento, siento no haber estado… -Negué-. ¿Ha sido el mismo de siempre?
-No… -Negué y miré mis manos, él las tomó haciendo que le mirase-. Han sido dos diferentes. En el primero estaba en una especie de castillo… Estaba con Nessie, la abrazaba y todo se volvía un caos, empezábamos a ir por túneles extraños, sentía frío constantemente… -Temblé al recordarlo-. Me caía al vacío… me desperté entonces… -Pareció preocupado-. ¿Es otro recuerdo?
-Es… -Hizo una mueca y me miró con cautela-. Es posible. ¿El otro?
-El otro… -Suspiré y le miré preocupada-. Estaba en el bosque, en medio de… la nada. Aparecían vampiros y lobos, todos se movían a mi alrededor… -Tragué en seco-. Me atacabais todos, lobos y vampiros, los Cullen, otros que no reconocía… y la manada. ¿Eso pasó? ¿Por eso me pasa esto?
-No… -Negó apenado y acarició mi pelo-. Jamás pasaría eso. La manada jamás te atacaría, ni tampoco los Cullen… -Asentí apenada-. Jamás dejaría que eso pasara, ¿lo sabes, verdad?
-Sí… -Asentí de nuevo y le miré con la disculpa en los ojos-. Lo siento, ya no sé qué es verdad y que no lo es en mis sueños. Todo es demasiado confuso, no podía creer que eso fuera verdad, pero como sólo sueño con cosas que se supone que han pasado… -Suspiré-. No dudo de vosotros, en serio.
-No te disculpes, cariño… -Me abrazó-. Pero por muchos sueños que tengas… -Se alejó y me miró-. Jamás pienses que un lobo te haría daño…
-Pero sí los vampiros…
-No si yo estoy cerca… -Sus ojos brillaron, parecía realmente triste-. Ojala… -Suspiró y negó tomando mis manos con más fuerza, las besó y me miró-. No te angusties más, son sueños… no tienen porqué tener sentido, así que no pienses en ellos –Suspiré algo molesta y asentí-. Voy a darme una ducha, después desayuno y te llevo a clase, ¿vale?
-Vale… -Sonrió y le abracé, besó mi pelo y le abracé más fuerte-. Gracias…

La sonrisa que me había valido los días anteriores apenas me sirvió ese viernes. Estaba realmente cansada, no había dormido prácticamente nada y no paraba de bostezar. Fue un verdadero alivio escuchar el timbre que indicaba el comienzo del fin de semana, deambulé por el pasillo mientras mis amigos h
ablaban de hacer algo el fin de semana.
-Mi prima dice que hay un cine antiguo en Port Ángeles, además creo que hay boleras y billares, podíamos ir allí a pasar el sábado…
-No sé, Hanna… Dylan me ha dicho que van a hacer una fiesta en la playa de… La Push, o algo así… al parecer van a ir por la tarde a hacer surf y por la noche harán una hoguera y pondrán música…
-Carl me ha dicho algo del tema… -Bryan bufó-. Dice que siempre pasa la policía para llevarse a algún escandaloso…
-No tiene porqué pasar nada… -Bryan y Hanna no pusieron buena cara, Susan me miró y yo me encogí de hombros-. ¡Vamos! El cine y los billares estarán allí la semana que viene…
-No sé… -Hanna suspiró-. Deja que lo hable con mi prima, esta tarde te llamo y te digo algo…
-Ann, ¿me acompañarás tú al cine?
-¡Bryan! –Susan lo abordó y él suspiró-. No pasará nada, no beberemos ni haremos nada ilegal, sólo disfrutar de la playa… -Sonrió ampliamente-. Es como una fiesta de bienvenida, piénsalo…
-Está bien… pero como haya policía, te aseguro que saldré tan rápido como pueda sin pensar en ninguna de las tres…
-¡Así se habla!
-Vaya amigo… -Bufó Hanna riendo-. Seguro que eres capaz de batir el record en los quinientos metros arena…

Reímos y salimos, bajé las escaleras algo desganada cuando le vi apoyado en el coche, le miré raro, nunca bajaba del coche hasta que me acercaba. Sonrió ampliamente y se apartó un poco. Mi grito no se hizo esperar.
-¡¡¡Nessie!!! –Corrí hacia ella y salté, me clavé el borde de la puerta en el estómago y creo que le di un codazo a Seth, pero cuando la sentí abrazándome nada importó-. Te echaba de menos, ¡¡muchísimo!!
-Lo sé… -Dijo riendo-. Yo también te he echado de menos… -Me forzó a alejarme-. He vuelto un poco antes de lo debido… -Me disculpé con una mueca y ella sonrió-. Tranquila, no pasa nada… -Bajó del coche y me abrazó de nuevo-. ¿Te apetece una tarde de chicas?
-Sólo si me prometes que no me vas a dar más clases… -Reímos y negó abrazándome de nuevo-. Espera, quiero presentarte a unos amigos…
-Claro… -Sonrió y alzó una ceja-. Veo que no has dejado de hablarles de mí…

Sonreí y nos acercamos, les presenté a Nessie y parecieron agradados, especialmente Bryan. Nos despedimos de ellos y les pedí que me llamaran cuando supieran seguro qué iban a hacer el sábado, volví abrazando a Nessie y ella se sentó atrás, así que fui todo el viaje a casa vuelta hacia ella.
Ella le pidió a Seth que nos dejara en su casa, prometiendo que luego me acercaría. Estaba realmente emocionada, me enseñó fotos de la casa y me miraba atenta, me había traído una pequeña botella con agua y arena de allí, era curioso cómo brillaba la arena posada.
-Es precioso, gracias… -La abracé de nuevo-. Siento abrazarte tanto… si te incomoda…
-Tranquila, lo imaginé… -Sonrió suspirando-. Me han dicho que has estado pasando malas noches… -Asentí y ella entrecerró los ojos-. Ya veo… -Pareció entristecer-. Realmente sí que vimos un accidente parecido al que soñaste… -Se mordió el labio-. ¿Recuerdas… cuando le preguntaste a Seth por las letras que tienes tatuadas? –Asentí y ella pareció dolida, imité su gesto sin querer-. Pues…
-No lo digas –Tomé sus manos-. Creo que… lo entiendo –Me miró de nuevo fijamente y cerró los ojos asintiendo, una lágrima rodó por su mejilla-. Oye… lo siento… -Quise llorar, la abracé de nuevo y lloré-. No quería hacerte daño, no quería recordarte algo así… lo siento.
-Lo sé… -Me apartó y sonrió levemente-. Lo recuerdo casi siempre… es difícil no… -Suspiró-. Lo del castillo… tiene su sentido. Viniste a buscarme cuando me escapé y tomé un mal camino… -Empezó a mostrarme pequeños destellos, parecía censurarlos-. Me salvaste, no tienes que saber nada más.
-Siento haberte puesto triste…
-Entonces… -Sonrió-. Cuéntame algo bonito que te haya pasado esta semana, déjame ver tus recuerdos… -Sonreí y asentí mirándola-. ¡Vaya! Así que apenas prestas atención cuando te invitan a una fiesta… -Negó riendo-. ¿Sabéis que hay que llevar pareja a esas fiestas, verdad? –Me asombré-. Creo que por eso Dylan se lo ha pedido a Susan… así que Hanna, Bryan y tú deberíais llevar una pareja con vosotros… es la tradición.
-Pero si no tengo novio…
-No ese tipo de pareja, sólo alguien que te acompañe… -Se encogió de hombros-. Los que tienen novio van con otra pareja, el caso es juntar a mucha gente… Claire me ha hablado de esa fiesta y había pensado en llevar conmigo a Quil… -Rió-. Ella llevará a Jake…
-Y si… -Lo pensé-. ¿Y si yo llevo a Seth? Sino el pobre, igual se queda solo… ¿o irá con Vera?
-No, Vera no creo que vaya… -Se encogió de hombros-. Creo que esa noche ha quedado con Leah… -Sonrió-. Es buena idea, así Seth no se queda solo, creo que le vendrá bien salir un poco… -Suspiró y pareció preocupada, me miró con una mueca-. Lo estoy… le he visto un poco triste hoy, cuando he llegado al taller estaba furioso y discutiendo con un proveedor, no es propio de él…
-Es… -Dudé-. ¿Es culpa mía?
-No… -Dijo rápidamente-. Son… no sé, cosas que se le están pasando por la cabeza, a veces simplemente te levantas de mal humor…
-Quizá estaba cansado, ha tenido ronda…
-Seguro… -Sonrió y olisqueó-. Ahora vengo… -Salió disparada y abrió la puerta, me asomé a la ventana y chocó con Jake, se abrazaron y se besaron de un modo que sentí que realmente sobraba, esperé a que entraran y me levanté-. No tienes que irte ya…
-Sí, tengo que estudiar… -Sonreí a Jake-. ¿Qué tal el viaje?
-Bien… aunque creo que se me ha hecho muy corto… -Se encogió de hombros-. Es lo malo de las vacaciones, que se acaban…
-Sí… -Reí-. Bueno, me alegro de que lo pasarais bien…
-Espera, te llevo…
-No… -Negué-. Aún hace sol, me apetece dar un paseo hasta casa…
-Le prometí a Seth…

-No te preocupes, seguro que está durmiendo y no se entera… -Reí un poco-. Hablamos mañana, ¿vale? –Asintió y la abracé como despedida, me abracé también a Jake-. Hasta mañana…

Paseé hasta el taller, Quil estaba cerrando y le saludé, se ofreció a acompañarme pero le dije que no era necesario, me apetecía estar un rato a solas… Seguí caminando hasta que unos ladridos llamaron mi atención, reí y acaricié a la perrita, me senté y ella se marchó, trayendo su pelota. La lancé muy lejos y reí entrando y viendo a Seth tirado en el sofá y roncando… miré por la ventana y aún no se había puesto el sol. Maila entró alterada con la pelota, así que decidí salir con ella a disfrutar del sol que quedaba y me senté mientras ella iba y venía a por la pelota.
Por alguna extraña razón sonreí al recordar cómo Nessie y Jake se habían saludado, parecían realmente ansiosos por verse, como en las películas románticas de Claire. Si tenía alguna duda de lo que era el amor, cuando les veía se disipaba… Sonreí a la nada y suspiré.
-Vas a congelarte… -Murmuró medio dormido, se estiró y Maila fue a por él-. Qué rara estás hoy… -Lanzó la pelota realmente lejos-. ¡Venga, corre! –La perra salió disparada y él rió poniéndose delante de mí aún estirándose-. ¡Qué pensativa te veo! –Reímos un poco y se sentó frente a mí-. ¿Todo bien? –Asentí-. ¿Seguro?
-Sí… -Dije con una calma extraña-. Creo… no sé… -Reí-. Estaba… -Reí negando algo avergonzada-. Pensaba en Jake y Nessie… -Me encogí un poco cuando rió-. Parecen realmente felices…
-Es lo que tiene el amor… -Bufó cuando Maila se acercó-. ¿Qué te pasa, pesadilla? –La besó y ella empujó la pelota-. ¿Hiperactiva, eh? –Reí un poco y él la lanzó, Maila salió disparada-. ¿Qué tal han ido las clases hoy?
-Bien… hemos estado hablando de la fiesta de mañana, en la playa –Asintió-. ¿Vas a ir?
-No… -Rió y me miró encogiéndose de hombros-. Es para estudiantes… y se supone que deben invitarte para que vayas… -Alcé una ceja-. ¿Me estabas invitando?
-Eso creo… -Él rió asintiendo-. ¿Vendrás?
-Si me lo pides así… -Reímos y asintió-. Me pondré guapo…
-Ya… -Reí con ganas, como si él necesitara esforzarse mucho… Suspiré y miré cómo arrancaba el césped, parecía distraído-. Seth… -Me miró y no me atreví a preguntar qué le pasaba, decidí cambiar mi pregunta a otra que rondaba mi cabeza-. ¿Crees que todo el mundo tiene algo como lo de Jake y Nessie? –Me miró sorprendido-. Algo… no sé. Un amor… de película, ya sabes.
-Pues… no creo que todos. Algunos afortunados… -Se encogió de hombros-. Pero no creo que sea la norma, es difícil encontrar a alguien… tan afín, como ellos lo son.
-¿Crees que realmente hay… -Suspiré- algo así como almas gemelas? –Me miró sorprendido de nuevo-. Es lo que parece que siempre dicen, que hay alguien perfecto y que será como lo que veo en algunos, en Jake y Nessie, Quil y Claire…
-No sé si lo que dicen es eso, pero sí, yo creo que hay una persona indicada… sólo una. Puede que no la encuentres en toda tu vida… o puede que sí. O puede que la tengas y no la hayas sabido ver y sigas buscando… -Asentí algo perdida-. Normalmente es complicado darse cuenta de esas cosas… mucha gente no sabe lo que tiene hasta que lo pierde.
-Hablas… -Suspiré e hice una mueca-. ¿Tú te has enamorado así alguna vez? –Asintió-. ¿Y… qué pasó?
-Que la cagué… -Hice una mueca-. Hice muchas cosas mal, de hecho empiezo a creer que no me merezco que… no sé. No creo que merezca sentir eso de nuevo, creo que he hecho tantas cosas mal que…
-Yo no lo creo así. Si realmente… -Me encogí-. No sé, nunca he estado enamorada… que yo recuerde, claro… -Sonrió levemente y yo con él-. Pero, no sé. Creo que si encajas con alguien realmente, si tienes algo tan fuerte… no importa todo lo malo que hagas.
-Claro que importa… siempre que haces algo mal, alguien sufre. Y si haces sufrir a alguien, no mereces que ese alguien te de otra oportunidad…
-Pues me parece una estupidez… -Alzó las cejas-. Yo os he hecho sufrir…
-No voluntariamente…
-Dudo que tú hicieras algo para dañar a alguien voluntariamente… -Me encogí de hombros y él frunció sus labios-. Si realmente no hay intención de hacer daño, no eres malo por mucho que otra persona sufra… ¿no?
-Supongo…
-¿Le hiciste daño queriendo? –Se quedó algo parado y negó-. Entonces, sería tonta si deja pasar algo así, si realmente era algo tan especial… estaría loca de remate –Sonrió un poco y asintió-. ¿Estás triste por eso? –Entrecerró sus ojos-. Nessie me ha dicho que hoy tenías un mal día… -Hice una mueca de cautela-. ¿Era por eso?
-En parte… pero… no sé… -Maila volvió y lamió su cara, él lanzó la pelota de nuevo y sonrió-. Está empezando a hacer frío, ¿quieres entrar?
-No… aún no tengo mucho frío, estoy bien…
-Está bien… -Se acercó y se puso a mi lado, agradecí el calor-. Entretendremos a la hiperactiva de Maila… -Rió-. Está como el día… más rara…
-Sí… -Reí-. Yo también… -Rió un poco y me apoyé en su hombro-. Creo que todos estamos igual, raros como el día… -Suspiré-. Por cierto, no te he dado las gracias…
-¿Por qué?
-Por traer a Nessie… -Le abracé levemente y él me correspondió-. Gracias, lo necesitaba…
-Lo sé… pero no tienes que darlas.

Pasamos el rato allí, simplemente jugando con Maila y viendo como cada vez la luz del día disminuía y el frío aumentaba. Cuando no lo soporté, nos metimos en casa. Cenamos y me puse a hacer las tareas de clase, mi teléfono sonó en repetidas ocasiones, me mandé mensajes con mis compañeros para quedar al día siguiente. Una vez terminadas mis tareas decidí irme a dormir, me desplomé en la cama y me introduje en un profundo sueño lleno de angustia.
-Maila… -Mascullé notando su lengua por mi nuca-. Anda, estate quieta un ratito… -La empujé levemente y volví a acomodarme en la cama, ella ladró-. Vale… ya me levanto…

Me levanté con los ojos hinchados, me escocían por la luz… las once de la mañana y seguía cansada, demasiados sueños raros. Llamaron a la puerta, Maila ladró de nuevo. Bajé en modo zombie hasta la puerta, al abrirla Vera y Claire hicieron una mueca.
-¿Estabas durmiendo?
-Algo así… -Suspiré y las hice pasar, me tiré en el sofá y ellas rieron-. No he descansado muy bien hoy… -Me miraron raro y negué-. ¿Qué tal ha ido la semana?
-Bien… -Claire sonrió-. Irás esta noche a la fiesta, ¿verdad? –Asentí y ella sonrió-. Seguro que lo pasamos genial… ¿A quien vas a llevar?
-A Seth… -Me encogí de hombros-. ¿Tú irás con Quil?
-Oficialmente con Jake… -Rió-. Pero sí, con Quil… -Miré a Vera que sonrió ampliamente y compartieron una mirada cómplice, entrecerré mis ojos-. Esperamos… -Rieron y Claire negó-. Esperamos que esta noche sea especial…
-Es una fiesta… -Me encogí de hombros-. Es especial, ¿no?
-Sí… -Claire me miró-. Esperamos que surja el amor… -Vera le dio una patada-. ¡Au!
-No… -Se mordió el labio y negó riendo-. No le hagas caso, está en celo o algo por el estilo… -Claire fue a replicar, pero Vera no le dejó-. ¿Qué tal tus nuevos compañeros?
-Bien… son simpáticos… aunque no tanto como vosotros…

Reímos y estuvimos hablando hasta que Seth llegó de trabajar, masculló algo sobre que quería huir de las reuniones de chicas y cogió algo de comer para ir de nuevo al taller. Me sentí algo mal al recordar mi sueño, me angustiaba pensar que aquello hubiera podido suceder. Comí con ellas y Nessie vino poco después, la abracé fuerte y no pude dejar de pensar en los sueños de aquella noche, Claire y Vera parecieron darse cuenta, me sentí mal cuando decidieron marcharse y dejarnos solas.
-Oye, no tenéis que hacerlo, en serio…
-No te preocupes, está bien… -Vera sonrió-. Tengo que ir a recoger a los gemelos…
-Pero… -Suspiré-. Es sólo que tengo sueños muy extraños… -Claire me miró apenada y Nessie con cierta curiosidad-. Esta noche he soñado con unos columpios –Me miraron raro-. Estaba columpiándome, bueno, mi antiguo yo se columpiaba. Aparecía Maila y después Seth… -Hice una mueca-. Discutíamos, era raro porque él parecía tranquilo… pero de repente estallaba en lobo y me gruñía… como si me odiara.
-¿Sobre qué discutíais?
-Era raro… Estaba enfadado porque no le había llamado después de haber salido de fiesta, me dijo que estaba preocupado porque no me había visto en toda la noche… cuando le dije que no era mi padre y que no tenía que darle explicaciones, se enfadó… no entiendo nada.
-Eso no pasó… -Nessie sonrió-. No te angusties, nunca haría eso.
-Pero… no sé. Esta vez no me he despertado, ni él tampoco me ha despertado. El sueño se ha entrelazado con otro, me secuestraban y era una locura, acabábamos en una playa con vosotros y con gente que no sé si realmente conocí o no…
-Eso pasó, fue antes de que te fueras a Londres…
-Luego de ese tuve otro, estaba en un parque corriendo, aparecías tú con Jake y Seth, después los chicos del secuestro… después íbamos a casa con Ashley, Maca, Ainhoa y Gabriela, hacíamos las maletas y nos íbamos a un castillo… el del sueño de la otra vez.
-Eso no pasó…
-¡Dios! –Rompí a llorar y me apoyé en la mesa-. Es horrible, no sé qué sueño es cierto y cual no, no sé quienes son esos chicos que aparecen…
-Oye… -Nessie acarició mi cabeza y suspiró-. Te hablaré de ellos, lo prometo. Pero no hoy… -La miré y sonrió levemente-. No es el momento…
-No entiendo porqué me ocultáis tantas cosas… -Ella hizo una mueca-. ¿Hice algo tan malo que no merezco saber la verdad? Sólo quiero entender todo, saber de donde vengo… conocer mis raíces, saber porqué tengo esos sueños extraños… saber quienes son esas personas que aparecen en mis sueños, no pido tanto, sólo quiero encajar las piezas…
-Tienes que esperar…
-¿Esperar a qué? –Se miraron y se quedaron sin palabras, suspiré y me levanté-. Voy a intentar dormir de nuevo, podéis quedaros todo el tiempo que queráis…

Escuché la puerta y empecé a llorar, sentía rabia e impotencia. Me habían tratado bien, no podía quejarme respecto al cariño que me habían dado, pero era realmente frustrante preguntar y no obtener respuestas, que siempre me ocultaran cosas, que no pudieran ser completamente sinceros. Era angustioso y me hacía sentir realmente impotente, no sabía cómo averiguar más cosas sin ellos, eran mi único lazo a mi anterior vida… y no me ayudaban en todo lo que yo quería. No sabía que hacer…
Me lavé la cara con agua fría después de un buen rato llorando, me miré la cara e intenté quitar lo rojo de mis ojos con agua cada vez más fría, cuando levanté la cabeza él me miraba con los labios fruncidos, tomé la toalla para secarme la cara y suspiró.
-Siento no haberme dado cuenta de que estabas teniendo… esos sueños.
-No es culpa tuya… -Dejé la toalla y le miré-. No puedes vigilar mis sueños constantemente… -Me encogí de hombros-. Eso no es culpa tuya…
-Eso… -Hizo una mueca-. Pero sí lo demás… ¿no?
-En parte… -Su cara me hizo sentir culpable-. No quería decir eso… -Me encogí un poco-. Pero es cierto. No sois sinceros conmigo y no entiendo el motivo.
-Crees… -Suspiró y puso sus dedos en el puente de la nariz, su mano temblaba y me aparté apoyándome en el lavabo, suspiró y habló entre dientes-. Si hubiera una manera en la cual pudieras ver todo, pudieras saber todo sin que nada te afectara… -Me miró, parecía enfadado-. Estamos manejando la situación como podemos, no sabemos qué pasaría si supieras absolutamente todo, lo más probable es que el exceso de información te volviera completamente loca.
-No lo sabéis.
-No voy a correr ese riesgo –Su mirada me dio miedo-. Asúmelo, no siempre puedes tener todo lo que quieres, confórmate con lo que podemos ofrecerte, debes ser más paciente. Sé que no es fácil, pero, ¿qué crees? ¿Crees que es divertido para nosotros?
-Quizá sí… quizá es más fácil para vosotros que no sepa la verdad… -Me miró incrédulo y yo mordí mi mejilla-. No tengo ni idea de nada de lo que pasó, quizá todo lo que me contáis no tiene nada que ver con lo que ha pasado de verdad…
-¿Crees que te estamos mintiendo? –Me miró pasmado, asentí-. Esto es… -Negó y cerró los ojos convulsionando-. Piensa lo que quieras… -Me miró y volvió a temblar, su tono de voz cambió-. Incluso piensa si quieres que nos resulta divertido, es lo último que me falta escuchar…

Se marchó y le dio un puñetazo a la pared, me asusté al escuchar el estruendo y el portazo que dio al salir, me aovillé ligeramente… me sentía realmente sola en ese momento. Jamás me había sentido tan sola, tan perdida. Siempre había confiado en ellos… pero ahora no sabía que pensar o qué creer…
Maila se acercó sigilosa y se sentó a mi lado, la acaricié y empezó a lamer mi cara, como si quisiera limpiar mis lágrimas. Reí sin querer, ella ladró y salió disparada, escuché sus patas bajar apresuradamente las escaleras. Me levanté y lavé mi cara, cuando salí al pasillo Jake estaba sentado en las escaleras, me asusté al verlo tan serio.
-Sé que esto es duro para ti… -Su mirada me traspasó-. Pero tampoco es agradable para nosotros, te lo aseguro. Veo a Seth estar todo el día preocupado, no deja de pensar en tus sueños… en cómo explicarte cada cosa que le preguntas. No puedes ver lo mucho que Nessie sufre, como ha llorado más de una noche recordando y pensando qué podía contarte y que no…
-Sólo quiero saber la verdad.
-¿Crees que te estamos mintiendo? –Negó y me miró de nuevo de esa forma, algo en mí me hizo sentir remordimientos-. Siendo sensatos… ¿Crees que nos hubiéramos tomado tantas molestias si no nos importaras? Nos hubiera bastado con dejarte allí con los que te hicieron esto… y aunque por ello me gane un mordisco enorme, hubiera sido mucho más fácil… pero no hubiera sido lo correcto. No nos guiamos por lo que es más sencillo, las decisiones que tomamos… las que yo tomo.
-Quizá estés equivocado…
-Es posible… pero porque tú pienses que esté equivocado no tienes que culpar a Seth o a Nessie… si quieres buscar un culpable, lo tienes delante –La ira recorrió mi cuerpo, él bajó la mirada por un instante y volvió a mirarme-. Lo fácil hubiera sido contarte todo, pero las consecuencias pueden ser realmente catastróficas. No es una decisión tomada a la ligera, hemos discutido mucho sobre el tema, te lo aseguro… pero no creas que será fácil cuando lo sepas.
-Tú tomas decisiones… pero es mi vida. No la tuya.
-Ojala fuera sólo mi vida… o la tuya –Le miré y él negó-. No te haces una idea de dónde estamos metidos… sí, es divertido tener amigos que se convierten en lobo… -Sonrió de manera extraña-. Pero las implicaciones, las obligaciones que tenemos… nos atan de por vida.
-Seth me dijo algo parecido… pero no entiendo qué tengo que ver yo con la tribu… no entiendo que tengo que ver con vampiros.
-Quizá no lo entiendas ahora… -Se levantó y suspiró-. Mira, dame unos meses. Danos tregua, demuéstrame que realmente estás capacitada para manejar la información.
-¿Qué? ¿Hablas en serio?
-Sí… -Me miró duramente, la ira volvió a engullirme, pero él no cambió un ápice su rostro-. No puedo confiar en que sepas manejar todo lo que ello conlleva, que puedas mantener una distancia prudencial con tu pasado…
-¿Tengo que guardar las distancias? ¿Qué soy? ¿Un testigo protegido?
-Ojala fuera eso. Si solo fuera tu vida la que corriese peligro por contactar con tu pasado, yo mismo la protegería, toda la manada lo haríamos. Pero si tú tomas contacto con tu pasado, si no eres capaz de mantenerte alejada y provocas la mínima sospecha… será la razón por la que todos los vampiros terminen de decidirse… será tu final, la aniquilación completa de la manada, de la tribu… y de todos los que hubieran tenido contacto alguno con tu vida en un pasado –No supe qué decir, miles de dudas más se agolparon en mi cabeza, él suspiró y se acercó levemente-. No es algo que pueda asumir… ¿serías capaz de ponerles a todos en riesgo?
-No… -Bajé la mirada, cuando volví a mirarle parecía compasivo-. ¿Tan mala fui?
-No es nada de eso… -Negó y se acercó para abrazarme-. Todo lo contrario, en muchas ocasiones antepusiste el bien de los demás al tuyo propio… -Me miró y limpió una lágrima-. Sólo quiero saber que vas a volver a ser capaz de hacer lo correcto dada la situación…
-Lo haré…
-Quiero creerte, pero no es suficiente. Aún eres demasiado… -Hizo una mueca-. Estás demasiado sensible, tus emociones no son muy estables. Si te dijera… no sé. Que en un pasado tenías un gran amigo… ¿serías capaz de estar a su lado y no dirigirle la palabra? –Lo pensé y él alzó una ceja-. Es tan duro que ni yo podría.
-Creo que es más duro no saber que tuve un gran amigo…
-Déjame que lo piense… pero por favor, no culpes a Nessie… mucho menos a Seth… -Asentí y le abracé, entonces me fijé en la pared del pasillo, una hondonada y cascotes en el suelo, le miré y él suspiró-. Disculpa cómo se ha puesto… han sido demasiadas emociones para controlarlas…
-Creo… que debo disculparme.
-No… -Negó y sonrió-. No está enfadado contigo, es a mí a quien quiere patear… al menos él sabe quien es el culpable de todo… -Rió desganado-. Te quiere mucho, eres como una he
rmana para él y no le gusta verte sufrir… piensa que es culpa suya, mía… o de un ser superior. No sabe ya a quien culpar… está realmente frustrado, porque ve tu frustración… y eso le frustra más… -Hizo una mueca divertida-. Vaya trabalenguas… -Asentí riendo levemente-. Te prometo reconsiderar mi decisión, pero a cambio te pido que no les culpes de nuevo… Nessie está casi tan mal como Seth… y no es bueno para nadie, tú sufres, nosotros sufrimos… así que deja de torturarte. No hiciste nada malo, ni nosotros tampoco, las cosas pasaron como pasaron, pero siempre estuvimos unidos y siempre nos apoyamos los unos a los otros… y siempre va a ser así, eso no hay manera de cambiarlo.
-Prometo… que te patearé cada vez que me sienta mal.
-Me parece bien, puedes golpearme todo lo que quieras… -Sonrió-. Te compraré unos guantes de boxeo para que no te hagas daño…

Reímos y me abrazó de nuevo, se alejó cuando estuve algo mejor. Pude ver al lobo arena sentado en la parte trasera, me acerqué a la cristalera y me fijé en la mirada lastimera que tenía. Me giré a Jake y le pedí que trajera a Nessie, él asintió y se marchó. Suspiré mirando al lobo, Jake hizo un gesto con el brazo que no entendí, el lobo se levantó y volvió a sentarse en el sitio gruñendo… Jake parecía divertirse.
Bajé las escaleras y salí, me acerqué al lobo que ni se movió. Miré al suelo avergonzada, me daba miedo acercarme… no sabía qué decir.
-Yo… -Suspiré-. No sé qué decir, no sé como disculparme… pero es que estaba realmente cabreada. Jake me ha explicado que no tienes la culpa… me ha dicho que sólo sigues su orden, que él tomó la decisión de no decirme nada y que la va a reconsiderar… -Le miré y seguía sentado, hice una mueca-. He sido una estúpida, lo sé… pero es que… -Suspiré de nuevo y gemí-. Quiero saber todo, quiero saber porqué significáis tanto para mí, todas las cosas que vivimos… porqué os quiero tanto. Sé que habéis hecho muchas cosas desde que me pasó esto, pero no es motivo para que os quisiera desde el primer momento que os vi, es lo que me mata. Sentir que tengo que agradeceros mucho más de lo que… -Suspiré y mordí mi labio-. ¿Me perdonas? –Le miré y bramó sin moverse-. ¿Eso es un sí? –Bramó de nuevo-. A partir de ahora vas a tener que aprender a comunicarte… ¡sal de fase, estúpido!
-No puede… -Me giré, Jake sonreía-. No puede moverse del sitio hasta que le de la contraorden… debe aprender a controlarse mejor, es algo así como un castigo…
-No es culpa suya… -Suspiré y me acerqué para abrazarlo, hundí mi cara en el hombro del lobo que bramó y gruñó a la vez-. No entiendo que quieres decir…
-Tendrá que explicártelo más tarde… -Sonreí al ver a Nessie acercarse con una sonrisa-. Quiere devolverte el abrazo, pero no puede moverse por la orden de Jake…
-Oye… -Me sonrojé cuando ella me mostró que ya sabía lo que quería decirle y que todo estaba bien-. ¿Me das tú el abrazo que Seth no me da?
-Claro…

Se volatilizó a mi lado, Seth bramó de nuevo y le abracé a él también, pero permaneció allí sentado mientras yo me cambiaba para ir a la fiesta de la playa. Me puse una camiseta estampada y unos vaqueros, Nessie dijo que nos teníamos que adelantar, pude ver a un lobo rojizo enorme salir de detrás de la casa aullando, sonreí levemente imaginando que le estaba dando una charla a Seth… pobre Seth.
Pude sentir que nos acercábamos cuando el olor a sal me invadió, sonreí junto a Nessie y dejamos el coche en el aparcamiento, a
lguien me llamó.
-¡Mary Ann! –Sonreí y saludé a Hanna-. ¿Preparada para la fiesta?
-Sí… -Suspiré levemente-. ¿Han llegado ya Bryan y Susan?
-No… -Rodó los ojos-. Susan va a retrasarse… y Bryan debería estar aquí hace media hora… -Bufó-. He intentado entrar a la fiesta, pero tienes que ir con tu acompañante o no pasas…
-¿En serio?
-Sí… así que nada… estaba pensando en irme a casa y dejar plantado a Bryan, pero Susan me ha pedido que espere… y me da miedo que Dylan la deje sola en la fiesta…
-Bueno, estaremos nosotras si eso pasa… -Sonreímos y Nessie se acercó con Claire y Quil, no les había visto llegar, miré con la disculpa a Claire y ella sonrió, intenté sonar normal-. ¿Qué tal, chicos?
-Bien… -Claire sonrió tomando del brazo a Quil-. ¿Mejor? –Asentí y ella me abrazó-. ¿Dónde están nuestros acompañantes?
-No creo que tarden en llegar… -Nessie sonrió-. Estaban algo rezagados hablando de los trabajos extra… -Intercambió una mirada con Quil-. Ya sabes…
-Ya… eso suena a que tendré que hacer horas extra… ¿no? –Nessie rió-. Perfecto, me encantan las reuniones y los cambios de última hora…
-Lo siento… -Hice una mueca y miré a Hanna-. No os he presentado… ella es Hanna, ellos son Quil y Claire…
-¡Hanna! –Susan gritó bajando del coche de Dylan, saludó efusivamente con la mano y corrió hacia nosotras-. ¡Tengo que contaros algo! ¿Entramos ya?
-Tengo que esperar a Bryan…
-Bueno, yo tengo que entrar ya… ¿nos vemos dentro y os cuento, vale?
-Vale…

Sonreímos y la vimos marchar, se cogió del brazo de Dylan y parecía emocionada, Hanna suspiró conmigo al ver la escena. Poco después aparecieron Jake y Seth, reían y se empujaban… Nessie suspiró pesadamente y la miré, me mostró que habían estado peleando… me sentí responsable de aquello. Cuando se acercaron les presenté a Hanna, Jake pronto estuvo al lado de Nessie bromeando con Quil y Claire, Seth se apoyó en el coche bromeando… pude ver tres franjas rosáceas que empezaban a la altura de su oreja y descendían por el cuello tapando el posible final por la camisa. Tragué en seco y me giré para ver a Hanna bufar en dirección opuesta, me alegré en cierta manera de que no se hubiera fijado en esa marca… Bryan bajó de un coche y ella bufó molesta, parecía realmente enfadada cuando se acercaba a él… reí ligeramente al ver a Bryan suplicar y disculparse.
-Estaba pensando en hacer yo lo mismo… -Me giré y Seth hizo una mueca-. Siento haber perdido los estribos…
-No, yo tenía que disculparme, no tú… -Acaricié su cuello y él sonrió negando-. Siento que te hayas peleado con él por mi culpa… ¿te duele?
-No es nada… -Sonrió de nuevo quitando mi mano con delicadeza y dejándola con naturalidad sobre su brazo-. Hablaremos en casa… ahora tenemos una fiesta que disfrutar…
-Claro…

Nos acercamos a Bryan y Hanna y bajamos a la playa. Había vallas de madera cerrando un amplio espacio de la playa, había un par de hogueras y en el centro un chiringuito de madera… alguna sombrilla, hamacas y un par de redes donde jugaban a voleibol.
-¡Chicos! –Susan se acercó corriendo, Seth siguió andando tras al resto mientras me miraba con una sonrisa e indicaba dónde iban a estar-. ¡Vamos! Tengo que contaros…
-Creo que aquí sobro… -Bryan bufó-. Voy a por bebidas, ¿queréis algo? –Negamos y él masculló-. Tendré que conocer a las jóvenes lugareñas…
-¡Sentémonos! –Nos cogió de la mano y nos arrastró hacia unas hamacas, Hanna no puso muy buena cara ante su emoción-. ¡Me ha besado! –Sonreí levemente y Hanna lo intentó-. Ha sido genial, hemos salido de casa y ha tomado un desvío, me ha llevado a un mirador un par de kilómetros al norte y… ¡me ha besado!
-Susan… -Hanna suspiró-. No quiero ser pesimista… pero ten cuidado.
-¡Vaya manera de arruinarme el momento, Hanna…!
-Lo siento, pero es que realmente no quiero que sufras… y va a ser una relación complicada, si no sale bien vas a tener que verle todos los días, vives en su casa… sólo, no te embales como pasó en el campamento…
-Vale, vale… -Rodó los ojos-. Pero al menos… decid que os alegráis por mí…
-Claro que sí… -Sonreí-. Me alegra que estés tan emocionada…
-Yo… -Hanna suspiró-. Me alegro, pero me alegraré más cuando vea que la cosa funciona de verdad… -Miró hacia Bryan, que le traía un refresco-. He dicho que no quería nada.
-Vamos, no seas así… -Mostró su labio inferior-. Es el refresco de la paz, ¿vale? –Ella lo cogió no muy conforme-. Buena chica…
-No tientes a la suerte, chaval…

Reímos ligeramente y estuvimos hablando del beso, después nos entretuvimos viendo un improvisado partido de voleibol… hasta que les vi a todos apoyados en la barra del chiringuito. Reían y no paraban de enredar, me dio cierta envidia. No es que no lo estuviera pasando bien con mis amigos, pero con ellos sabía que lo pasaría aún mejor… aunque no podía levantarme y acercarme, sería descortés y podría verse la gran confianza que tenía con ellos. Susan suspiró y la miré curiosa.
-Son muy afortunadas… -La miré y señaló a Nessie y Claire con la mirada-. No he podido evitar fijarme, esos chicos son enormes…
-Sí… -Reí-. A ellas casi no puedo ni verlas… -Reímos un poco y una imagen de una mueca de Nessie se coló en mi cabeza-. En comparación… -Aclaré-. Creo que cualquiera pareceríamos enanas a su lado… yo siempre me siento pequeña…
-Pero tienen algo extraño, ¿no crees? –La miré con cierta cautela-. Fíjate bien, todos en la barra están apelotonados… pero a ellos apenas les rozan. Parecen… -Lo pensó y sonrió-. Como si fueran los macarras del instituto, sólo que no van al instituto…
-Creo que deliras… -Reí-. Son mayores, por eso desentonan un poco… -Me encogí de hombros-. Fíjate en Claire, ella va a hablar con los demás…
-Sí… -Sonrió y vimos cómo a una chica de tercero la empujaban y se caía a los pies de Seth, la recogió con cuidado con ayuda de Quil y la chica se sonrojó mucho, reímos-. Pobre chica…
-A mi no me importaría hacer un ridículo tan espantoso porque me cogieran así… -Reí negando y ella susurró-. Mira, que intenta ligar con tu... –Dudó-. Tu lo que sea… -Reí-. Diría padre de acogida, pero no le pega nada… ¿Hermano de acogida?
-Seth… simplemente.
-Seth… tu Seth de acogida… -Rió y señaló a la chica-. Parece que pasa de ella… me moriría de vergüenza en su lugar, ¿te imaginas que le hubiera dicho que sí?
-Sería raro… -Hice una mueca-. No me imagino a Seth con… -Hice una mueca y ella me miró alzando una ceja-. No sé, por lo que he visto en su casa… -Carraspeé levemente-. No creo que esté buscando nada de eso. Creo que es muy… independiente.
-¿Independiente? –Rió y les miró, me miró de nuevo y soltó una risa juguetona-. Lo has pensado, ¿eh? –La miré raro y Hanna suspiró rodando los ojos como Bryan, ella me empujó un poco mientras Hanna me tendía su vaso-. Vamos, no me niegues que no te has imaginado cómo sería estar con él… -Me atraganté y los tres se rieron-. Eso es un claro sí…
-¿Pero qué…? –Negué-. Sería… raro. Muy raro…
-¿No te gustaría que te pasara como a mí? ¡Imagínate! Yo con Dylan, mi hermano de acogida… tú con Seth… ¿tu Seth de acogida? –Rió-. Sería de telenovela…
-Hombre… -Hanna rió-. No es una mala fantasía… -Lo pensó mientras le devolvía el vaso y frunció sus labios-. Ella, una adolescente de Alaska, pálida e introvertida… y él, un indígena atractivo y misterioso… ambos viviendo en la misma casa, una historia tipo Lolita…
-Dejad de hacer películas, queréis… -Reí con Bryan-. Creo que tanta película romántica os ha estropeado las neuronas…
-Amén, amigo… -Reí y chocamos las manos-. Menos mal que les traes la cordura…
-Menos mal…

Miró el partido y se llevó las m
anos a la cabeza, al parecer estaba interesante. Empezamos a hablar del partido, todos parecían expectantes, incluso Seth… evité sonreír ante un fugaz pensamiento. Realmente… estar tanto con Claire y con mis nuevas amigas había conmocionado mi cabeza… pero ahora incluso le veía… sexy. Me aparté el pelo de la cara y miré el partido, el sol cada vez bajaba más y no pude evitar pensar en la última vez que vi una puesta de sol en la playa… mis ojos se desviaron solos de nuevo hacia él. Reía forcejeando con Nessie y Claire a la vez mientras Jake y Quil parecían observar con diversión…
Sonreí sin poder evitarlo, un parte de mí quería levantarse y saltar sobre su espalda para ayudar a mis amigas… otra quería estar lejos de esa playa, en el sofá tumbados viendo una película como casi todos los sábados… o sintiendo el aire en la cara yendo a lomos del Seth lobuno… quizá viendo la puesta de sol, pero solos y sin nadie que nos molestase, como el otro día.
Nessie me miró riendo y Claire y Seth se volvieron, intenté sonreír sin sonrojarme… pero no lo conseguí y desvié ligeramente mi mirada hacia el partido. Hanna se acercó a mí susurrando.
-¿Qué? ¿Pensando en nuestra locura? –Pude ver las caras de los cinco contorsionándose en la lejanía, imité su gesto mirando a Hanna-. No tienes porqué avergonzarte…
-Es normal, tú eres una adolescente hormonada y él un chico realmente sexy, atractivo… -Suspiró-. ¿Quieres cambiármelo por Dylan?
-Pues sí que estás enamorada de tu hermanito que quieres cambiarlo el mismo día en el que te besa… ¿tan malo ha sido el beso?
-Idiota… sólo digo que está realmente bueno, Dylan también… pero, no hay comparación de uno a otro, tiene algo realmente llamativo…
-Cállate, que se acerca… -Murmuró Hanna-. Yo creo que la de naranja sobra, ¿verdad Mary Ann? Siempre que le da, desvía la pelota demasiado…
-¿Cómo va la tarde? –Seth me tendió una botella de agua, odié la sonrisa extremadamente amable que me ofreció, seguro que lo había oído o Nessie se había encargado de hacerles saber… Rió levemente y se encogió de hombros al notar mi mirada-. Perdona, no quería molestaros, pero tampoco quiero que te deshidrates… hay demasiados chicos guapos y eso da calor y deshidrata a cualquiera… -Le miré peor, él señaló al resto riendo-. Si necesitas más agua estamos allí… y también hay sombra, para que no te quemes con ese blanco lechoso tuyo…
-No hace tanto sol…
-¿Segura? –Acarició mi mejilla y rió-. Creí haberte visto colorada desde allí… -Se encogió de hombros-. Será el calor…
-Sí… -Mascullé-. O el bochorno que me estás haciendo pasar…
-Bueno, para cualquier cosa que necesites, estaremos allí… -Asentí-. Pasarlo bien…
-Seguro…

Las risas no tardaron mucho en aparecer mientras él se alejaba, se giró riendo y yo noté mi cara arder, bebí agua para intentar disimular. Cuando el bochorno pasó y todas las miradas se posaban de nuevo en el partido, no pude evitar cruzar una mirada con él… ¿Qué era esa mirada? ¿Satisfacción? Me sentí algo confusa y él hizo amago de brindar en la distancia bebiendo, negué sonriendo y miré de nuevo al partido… no podía pensar así. No después de lo que había pasado a primera hora de la tarde, ¿cómo había podido pasar de desconfiar por completo de ellos a sentirme tan unida ahora?
¿Cómo había pasado de haberme sentido completamente sola y perdida a verme rodeada de amigos? ¿Cómo podía haberme hecho sentir tan importante con un simple gesto tan tonto como traerme una botella de agua? ¿Cómo podía estar tan tranquilo y atento comigo después de lo que le había hecho pasar…? Incomprensible…