Capítulo LXXIb: Curiosidad. Nessie POV.

0:06 1 Comments A+ a-

Bueno... 9:29 hora local... así que ya veis que he invertido cinco horitas para terminar el capi y colgarlo... OS ADELANTO: no os va a gustar. Me vais a odiar...
Pero... ¡es mi final alternativo y hago con él lo que quiero! jajajajajajaja
Muchas gracias por la larga espera, este capi ha sido como un parto... ha costado y ha dolido sacarlo realmente... jajajaja más que nada por el esfuerzo de tiempo que me ha costado y que ha habido muchos días en los que no tenía ganas de escribir... pero buuuuueeeeeeno, aquí está.
Espero que la demora os haya merecido la pena... y que la espera para el siguiente (Seth POV, a pesar de que no estaba planeado y no lo tenía muy claro...) se os haga (y sea) más corta...
He decidido poner este capi como un Nessie POV para hacerle un pequeño tributo... y porque sinceramente, me hubiera resultado muchísimo más complicado de lo que ha sido intentar hacerlo con la perspectiva de Dar o de Seth. Así que en homenaje a los Cullen... aquí va.
Niñas... alcanzamos las 820 páginas... telita (a este paso sólo con el comentario mío voy a añadir otra página más XD) Os dejo con estas trece... Disfrutadlo!

Silvy ^^


Inspiré hondo. Su aroma estaba en el aire, muy sutil, débil. Volví a inspirar, una oleada leve con su olor me invadió. Sonreí débilmente, se acercaba. Volví a inspirar, apenas le quedaban cien metros para llegar a mí, puede que más… no venía a gran velocidad. Venía despacio y su aroma se mezclaba con el de la tierra húmeda y la hierba cortada… se arrastraba. Sonreí más.
Salté y caí en una rama alta, me encaramé al árbol y esperé. Pude verle acercarse a
gazapado, sabía que esperaba atacarme por la espalda, pero yo no iba a darle esa oportunidad. No iba a ganarme, no iba a dejar que me sorprendiera de nuevo.
Me quedé completamente quieta, esperando que llegara a mi altura sin detectar mi olor. Lamí mis afilados dientes con cuidado, preparándolos para morder su yugular hasta probar su sangre. Quería saciar mi sed, lo necesitaba.
Salté sobre su lomo y mordí, su sangre cálida llenó mi boca mientras él gruñó en un intento de zafarse de mí, tomé dos tragos de su sangre y me aparté riendo, pude ver cómo aquel lobo rojo rodaba los ojos, sonreí con cara inocente.
-Sólo me defiendo… -Reí y empecé a correr-. ¡Te espero en casa!

Inspiré hondo recreándome en su aroma antes de alejarme demasiado, relamí mis dientes saboreando los restos de sangre que quedaban en mi boca. No le vi venir hasta que sus dientes estuvieron a punto de rasgarme la piel, pero una mandíbula mucho más grande, los dientes de Seth, separaron su cabeza de los hombros en el mismo instante en el que Jake aparecía entrando en fase y hacía añicos lo que quedaba de su cuerpo.

Me costó varias décimas de segundo reaccionar, saqué el mechero y prendí fuego a su cabeza, pequeños trozos del resto de su cuerpo iban cayendo conforme el fuego se avivaba. El denso aroma aturdió mi nariz, oí sus pasos y me giré para ver su mirada perdida.
-Deberías agudizar tus sentidos para tus enemigos… -Rodó los ojos y negó-. Ha estado a punto de matarte… -Su angustia me llegó, su miedo-. Y tú tienes grandes sentidos.
-Y ella está lejos, Seth… -Sonreí y acaricié su rostro-. No pasará nada, Alice tiene un ojo en ella… me lo prometió.
-Precisamente porque está lejos me preocupa… -Jake se acercó y Seth se tensó-. Tengo ronda…
-Gracias… -Jake se acercó y Seth se alejó-. No os he oído…
-Lo sé… -Seth se encogió de hombros-. Disfruta de tus horas libres…
-Gracias Seth… -Ni me miró, se limitó a sacudir su brazo y a entrar en fase, Jake le miró con una ligera mueca-. ¿Seguís enfadados?
-Quería haber ido con ella…
-¿Y no le has dejado? –Le miré pasmada-. No puedo creerlo, Jake…
-Ella no le hubiera dejado… -Se encogió de hombros-. Sólo está cabreado porque sabe que le dije que no fuera porque no tuviera que oírlo de labios de ella… en el fondo no está enfadado, sólo quiere creer que lo está…
-Vaya… -Asentí-. ¿Vamos a casa?
-Ve delante… -Señaló la hoguera-. Me quedo vigilando…

Asentí y me alejé pensando en el pobre Seth… pero había algo que me perturbaba mucho más. Pensamientos que mi padre había captado un par de días atrás en la mente de Darlene, pensamientos furtivos que incluso yo pude captar. Vera se cruzó en mi camino y sonreí, seguramente fuera a relevar a Jake, no tardaría en llegar a casa.

Corrí con todas mis ganas y salté para alcanzar la barandilla de mi balcón, entré a mi cuarto y rebusqué en mi armario buscando un conjunto que tía Rose me había regalado. Lo encontré cuando escuché unos ligeros pasos en la madera del pasillo, apresurados. El aroma a flores la acompañaba, sonreí antes de mirar, cuando la vi, mi sonrisa se borró.
-¿Qué está pasando?
-Tenemos que irnos… -Jake apareció mirándola con una ceja alzada, preocupado-. Van a atacar en Seattle, nos buscan a nosotros.
-¿Vosotros? –Jake pareció sorprendido-. Creía que esto era contra los licántropos…
-No es por eso… -Alice negó y me miró, entrecerré mis ojos por el esfuerzo y pude ver en su mente el ataque a Jairo, el vampiro que siguió a Darlene… se suponía que Jake no tenía que saber nada…-. Tenemos que irnos.
-Deja que me cambie…
-¿Te vas? –Jake me miró asombrado, Alice rodó los ojos y frunció sus labios-. ¿Vas a irte sin decirme de que va esto?
-Te espero en el coche, Nessie…
-¿No vas a decir nada más? ¿Sólo que te vas?
-Jake… -Suspiré y le acaricié-. ¿Te sirve si te digo que es algo que no puedes saber? –Alzó una ceja… evidentemente no-. No puedes saberlo, si lo sabes tú lo sabrán todos…
-Si me estuvieras hablando de algún tipo de fiesta, lo entendería… pero por la cara de Alice es algo mucho más serio. Podré manejarlo…
-No se trata de cómo puedas manejarlo tú… las cosas ya están bastante complicadas, no las compliquemos más… confía en mí, ¿vale?
-Sólo… -Suspiró-. Si necesitáis refuerzos, házmelo saber, ¿quieres?
-Está bien… -Sonreí y le besé pausadamente-. Siento tener que irme justo ahora…
-Ya… -Suspiró de nuevo y me abrazó-. Ten cuidado… iré a hacer la ronda con Seth y Vera, creo que van a necesitarme hoy… -Hice una mueca y asentí, él entrecerró los ojos… de alguna manera sabía que se trataba de él, podía verlo claramente… Sonreí y le besé-. Llámame y mantenme al tanto…
-Cuidaros… -Sonreí de nuevo, no iba a confirmarle nada… Seth ya iba a tener mucho que asimilar si sospechaba que era por él… pero si se lo confirmaba sería peor-. Te llamaré cuando sepa algo.

Cogí un jersey y unos vaqueros, poniéndomelos mientras bajaba por las escaleras. El 911 esperaba con el motor encendido, Alice salió disparada incluso antes de que yo cerrase la puerta del coche. Era realmente urgente, aunque sabía que no me diría nada hasta que llegásemos a la nueva mansión Cullen, cerca de Fairholm.
Bajé del coche con urgencia, la puerta se abrió y el frío abrazo de mis padres me sirvió de advertencia, estaban planeando un ataque. Pude ver el mapa de Seattle, Alice se acercó y señaló otro punto de la ciudad con un rotulador de color rojo. Había 4 marcas en rojo, tres en verde y tres en azul…
-Tres vampiros distintos –Miré a mi padre, contestó antes de que preguntara-. Las marcas azules indican las visiones que Alice ha tenido sobre Jean Paul… que es la pareja de Coralie, la cual atacará en las localizaciones marcadas con verde…
-¡No! –Miramos a Alice asustados, Jasper le tendió los tres rotuladores y ella volvió a coger el rojo, situó una marca en una dirección que todos conocíamos, un escalofrío recorrió mi columna-. Irá allí, irá a buscarla.
-Son demasiadas ubicaciones para cubrirlas todas… -Jasper negó pesadamente-. La masacre va a ser inevitable, tenemos que intentar averiguar por dónde entrarán en Seattle y frenarlos a la llegada…
-Aún no han decidido cómo llegaran… No salen de ese maldito almacén -Alice negó pesadamente mirando a Jasper-. Deben de saberlo, quizá cuando acudieron a Marco él se lo advirtió…
-No creo que Marco pudiera obrar así… -Mi abuelo negó-. Nos mostró gratitud en la última batalla, no nos traicionaría ahora… Quizá sea simple coincidencia…
-No lo creo… -Mi padre negó, hizo una mueca-. De igual forma, tenemos que elegir qué lugares cubriremos... y esperar a que Alice sepa algo más…
-Iremos por parejas, eso nos dará ventaja ya que ellos irán solos según las visiones de Alice… -Miró el mapa y suspiró-. Sin saber el orden va a ser difícil… ¿No puedes darnos algo más, Alice?
-Lo intento… pero…
-Está bien… -Suspiró y volvió al mapa-. Es lógico pensar que empezarán por la zona periférica, seguramente los primeros objetivos sean estos tres… Emmett y Esme estaréis en este, Carlisle y Rose en este… -Señaló el mapa-. Alice y yo iremos al último punto periférico… -Nos miró-. Vosotros tres cubriréis la casa de Cyntia, sólo por si acaso. Si la ira le ciega, posiblemente sea el primer punto de Katiuska… esperemos que no sea así.
-Katiuska era la pareja de Jairo… -Mi padre hizo una mueca-. Por eso ya no le interesa la manada, sólo quiere mi cabeza…
-Y la mía, hermano… y la mía –Jasper suspiró-. Deberíamos salir ya… quizá Alice vea algo más si nos vamos a la casa de Monroe… -Sentí como el consuelo me embargaba-. No es culpa tuya, pero verá mejor lejos de ti…
-Lo sé… ¿Cuándo atacarán?
-A partir de media noche…
-¿Vamos a dejar el resto de localizaciones sin vigilancia? –Esme parecía angustiada-. Son casas familiares… no podemos hacer eso. Carlisle…
-Tampoco podemos proteger a todos y cada uno de los humanos… -Jasper se encogió de hombros-. Si vamos de manera individual podemos perder a alguno de los nuestros… siendo objetivos, prefiero perder a cuatro humanos por equivocarme en la localización a perder a uno de los nuestros por ampliar la vigilancia.
-Deberían ser los perros quienes estuvieran allí…
-Tía Rose… -Suspiré-. ¿Y si hablo con Jake? –Miré a mi padre-. Sin decirle nada concreto… sólo que necesito vigilancia en esos puntos…
-Inténtalo… -Mi abu
ela me miró de un modo que no necesité más palabras-. Por favor…
-Volveré en media hora… -Alice sonrió y me lanzó las llaves de su 911-. Gracias…
-Nessie… -Bajó su mirada-. Deberías decirle a Seth que llame a Dar… está barajando una opción que no me gusta, es demasiado arriesgada. Quiere hacer una escapada a Volterra, está decidiéndolo ahora… -Miró al infinito-. La veo en una estación, dentro de poco, escogiendo ir con sus amigos a la Costa Azul o a Volterra…
-Sé sutil… -Mi padre hizo una mueca-. No necesitamos que además él esté con la mente en otra parte… pero tampoco creo que sea una gran idea que ella vaya allí.
-Hablaré con ambos… -Asintió y miré las llaves suspirando-. Voy a ver si nos prestan personal…

Mis tíos parecieron sonreír, ellos siempre estaban emocionados con todo lo que tuviera que ver con batallas y enfrentamientos… pero la mirada de mi abuela y la de mis padres me angustiaba, mis tías y mi abuelo parecían simplemente resignados a luchar… No veían otra opción.

Paré el 911 cuando el aire acercó sus aromas a mi nariz. Lo aparqué bajo los árboles y al salir vi una rama rayando la parte del techo… Alice iba a matarme, seguro que ya lo había visto. No había solución posible ahora… había otra prioridad, así que seguí el rastro de mi lobo preferido.
Pude oír sus pisadas a diez metros tras de mí, me dejé llevar por un momento cerrando los ojos y sonriendo mientras notaba que se acercaba intentando ser sigiloso.
-No vas a conseguir asustarme –Dije cuando le noté a centímetros de mí. Me giré y parecía ligeramente molesto, así que le besé dulcemente-. Necesito una reunión con el jefe Jacob.
-Suena a serio… -Me devolvió el beso y me miró preocupado-. ¿Qué necesitas?
-Es un poco complicado…
-No haré preguntas, sólo pídemelo.
-No creo que tus palabras les gusten mucho a los ancestros… -Se encogió de hombros y volvió a mirarme fijamente-. ¿Te importaría prestarme algo de personal? –Me miró realmente preocupado-. Necesito que Sam, Paul, Jared, Leah, Quil y Embry vengan con nosotros.
-Eso no es algo de personal… -Se quedó algo parado-. Si salen de aquí seremos mucho más susceptibles a los ataques, sólo Seth, Collin, Brady y yo sabemos cómo se las gastan… sería arriesgar demasiado, el resto son muy jóvenes e inexpertos.
-Lo sé… -Le miré fijamente-. Sólo sería esta noche, Seth y Vera podrían quedarse fuera de fase y estar alerta con los nuevos…
-¿Reducir más las defensas? No puedo quedarme solo con Collin y Brady para cubrir toda la noche… uno de nosotros tiene que estar constantemente con los nuevos… -Me miró fijamente-. ¿Por qué me pides que mande precisamente a ellos contigo? –Me mordí los labios-. ¿Vampiros?
-No puedo decirte nada, Jake. Es sólo para una vigilancia…
-¿Visiones de Alice? –Asentí-. ¿Van a atacar?
-Posiblemente en Seattle –Suspiré-. No me preguntes nada más, sólo dime si puedes hacerlo.
-Dejaré a Sam aquí, él nos enseñó a todos y será más útil aquí, Leah querrá quedarse cerca de Ephraim… Seth y yo iremos por ellos, tenemos experiencia.
-¡No! –Entrecerró sus ojos-. No puedes abandonarlos ahora… y Seth es el más rápido si hay una emergencia, es mejor hacerlo así…
-Nessie… -Suspiró-. ¿Qué está pasando exactamente? Necesito saberlo, sé que quieres protegerme de algo, pero ahora te lo pide el Jefe Jacob, no tu marido.
-Van a atacar en Seattle, puntos aleatorios… uno de ellos es la casa de Cyntia… -Tembló y yo suspiré-. Seth no debe enterarse, si lo hace… se pondrá como un loco, ahora no puedes entrar en fase, si se entera de lo que estamos haciendo a sus espaldas se volverá loco.
-Tampoco puedo engañarle… -Me miró fijamente-. ¿Qué más hay?
-Jake… -Alzó una ceja-. Uno de los vampiros siguió a Darlene, Alice lo vio e intervinieron, pero ahora su pareja viene con otra pareja más…
-¿Buscan venganza?
-Eso parece… es lo que pensamos. Nos quieren a nosotros… por habernos deshecho de Jairo. Katiuska se había marchado a buscar refuerzos, Coralie y Jean Paul –Volvió a temblar y medio gruñó-. Seth no puede saberlo, no os dijimos nada porque no queríamos sacaros de vuestro territorio, ellos buscaban alejaros de aquí, que la protegierais y debilitarais la vigilancia en la reserva.
-Deberíais habérmelo dicho. ¿Cómo voy a ocultarle algo así a Seth?
-Sabes que es lo mejor ahora mismo…
-Me da igual, iré con vosotros. Dejaré a Leah y a Sam, el resto de los que has mencionado vendrán conmigo.
-Están en la mansión, he dicho que volvería en media hora… -Hizo una mueca y suspiró, tomó mi mano y empezó a caminar en silencio, pronto escuché unas patas chocando contra el suelo, unas muy rápidas. Sabía quien era, Jake se quedó quieto y esperó mirando al suelo, Seth sacudió su cabeza hacia mi dirección-. Ey…
-Seth, transmíteles esto. Os quiero a todos en alerta. Sam y Leah se ocuparan de la ronda nocturna de hoy, tú quedas relevado… -Lo pensó-. Ephraim y Kyle les acompañarán en la ronda, te quiero con Vera y Sean, cada uno os encargaréis de Cora, Josh y Yeray. El resto que acudan a la mansión Cullen de inmediato… -Aulló profundamente, tanto que me estremecí-. ¿Alguien ha recibido ya el mensaje? –Seth bramó-. Bien, sal de fase… -Gruñó y Jake le miró fríamente-. Tenemos que hablar, Seth… -Se alejó y volvió resoplando y temblando-. ¿Quién ha recibido el mensaje?
-Leah, estaba con Sam y Ephraim…
-Bien… -Se escucharon varios aullidos-. Veo que está siendo efectivo… -Miró a Seth-. Te quiero fuera de fase, controla que todo vaya bien en las rondas, si Ephraim se cansa haz que Vera le cubra con Josh, Kyle se encargará en todo momento de él, Sean no debe separarse de Yeray, ni tú de Cora.
-¿Estaremos de niñeras?
-Seth… -Jake cogió aire y suspiró-. No tengo tiempo de estupideces, simplemente acata mis órdenes. Si no quieres hacerlo puedo pedírselo a Leah… pero eso no va a cambiar tu situación. Te quedarás fuera de juego con Cora, la diferencia radica en quien dará las órdenes en caso de ataque…
-Pero Cora… apenas sabe rastrear, esa niña es… ¡¡una niña!!
-Por eso debes cuidar de ella… lo hiciste bien con Vera. Volveremos mañana al amanecer. No será para tanto… tenemos que irnos.
-Seth… -Me mordí el labio-. Deberías aprovechar que te han retirado la guardia para llamar a Darlene, seguro que te echa de menos… -Me miró ceñudo y sonreí-. Alice me ha dicho que está ansiando tu llamada, nada más.

Asintió satisfecho y me guiñó un ojo alejándose, apenas reparó en Jake. Me sentí mal, cuando se enterase de todo esto seguramente fuera a él a quien culpara, tiré de su mano mientras volvíamos al 911.
-Oye… si te culpa a ti… explícale que ha sido cosa nuestra, que somos una especie en la que no se puede confiar…
-Yo se lo acabo de ocultar, es culpa mía. Pero el lo entenderá, estoy seguro. Sabe como yo y como tú que no podría controlar una situación así, es tan impetuoso que saldría él solo a por los tres y acabaría muerto. Es mejor así.
-¿Realmente crees que lo entenderá?
-No… -Me miró apenado-. Yo no lo haría… ¿Y tú? –Fruncí mis labios y suspiró-. Pero yo soy ahora el que toma las decisiones, si no le gusta mi primera respuesta, esa será la segunda.

Suspiramos a la vez y montamos en el coche, cuando estábamos llegando pudimos ver a Quil pasarnos junto a Embry, nos escoltaban. Jake sonrió ampliamente y eso me animó en cierto modo, aunque no me gustaba nada tenerlos que exponer más todavía.
Al llegar, Esme sacaba un par de jarras heladas de limonada, los chicos se la bebieron casi de trago, por lo que Rose rodó los ojos. Le rogué en su mente que fuera amable, sabía que estaba preocupada por lo que pudiera pasar, pero ellos no eran los culpables. Se limitó a hacer una mueca rara, más de molestia que de confirmación.

Cuando llegaron los demás Jasper les explicó la situación. Mis padres harían guardia en casa de Cyntia, yo me iría con Jake a cubrir una de las localizaciones centrales, como el resto de los chicos en parejas cubrirían las restantes. Entendieron la razón de ocultárselo a Seth, aunque tampoco estaban muy agradados con la idea de engañar a un hermano.

Partimos hacia Seattle apenas diez minutos después, Jake y yo comenzamos a pasear con todos nuestros sentidos alerta por la zona, no había rastro de vampiro alguno, pero aún quedaba más de media hora para la media noche. Entramos en una cafetería que había en la misma calle, pedimos dos cafés para llevar y dimos otra vuelta a la manzana.
-Va a ser una noche larga… -Jake me tendió el café besándome en la frente-. Tendríamos que habernos quedado con el coche de tu padre, necesitarás descansar…
-Estoy bien… -Sonreí y le abracé, bebí un poco de mi café cuando vi un coche negro aparcando en la calle. El señor mayor que bajó de él me sonaba muchísimo… le había visto en alguna parte-. Mírale… ¿Le conocemos?
-No, que yo sepa… -Su móvil sonó y soltó nuestro abrazo para contestar-. ¿Novedades? –Frunció el ceño a los dos segundos-. ¿Estás seguro? –Frunció sus labios más y asintió-. Puede ser, informaré a los demás por si acaso… aunque dudo que sea coincidencia… -Colgó y me miró-. Embry y Quil estaban vigilando su zona… se han cruzado con Davinia.
-¿Davinia? –Lo pensé, el señor mayor me sonaba… Davinia… intenté visualizar a aquel señor, lo había visto antes… pero ¿dónde?-. ¡Es el Dr. Wilton!
-¿Qué?
-El señor… -Señalé el coche y le miré, sacó su móvil de inmediato-. No creo que sea coincidencia… son tres localizaciones relacionadas…
-¿Jared? Buscad a alguien conocido en la zona, algún conocido de Darlene… -Escuchó atento por un segundo-. Debéis estar alerta, informarme si hay cambios… -Colgó y me miró-. Nada de momento… pero deberíamos avisar a Alice…
-Sí… -Saqué mi teléfono de inmediato y Alice ya me estaba llamando-. ¿Alice?
-¿Dónde trabajaba el padre de Darlene?
-En unas oficinas de seguros… Alice, creo que no son localizaciones al azar, Davinia vive en uno de los enclaves, en el nuestro el profesor de Darlene… -Escuché un estruendo y a mi tío Jasper llamarla, estaba teniendo una visión-. ¿Alice?
-A su casa, rápido. Katiuska ha cambiado de rumbo, va directa a casa de Darlene. Saben que estamos aquí, van los tres allí…
-Ya vamos.

Cogí la mano de Jake y le arrastré mostrándole la conversación, empezamos a correr mientras él llamaba a los chicos, me sorprendieron sus palabras.
-Repartiros las ubicaciones, avisar a Seth. Vamos a casa de Darlene, pero no podemos dejar las otras ubicaciones. Que vengan lo antes posible… ¡Ya!

Apresuramos el paso, mi madre y mi padre nos alcanzaron y corrimos a la par, pude ver en la mente de mi padre los claros pensamientos de Carlisle, estaban cerca y el olor a vampiro era claro. Me esforcé al máximo y Jake gruñó, se desvió a la izquierda, él había notado su esencia.
Frené al ver que seguía corriendo a la izquierda, mis padres lo pensaron y le siguieron, yo con ellos. El olor parecía más presente cada vez, era intenso… hacía poco que había estado por allí. Jake entró en fase de un salto y salimos a un claro… un almacén abandonado e iluminado por dos farolas.
-Es el almacén de las visiones de Alice –Miré a mi padre-. No volverán por aquí, hay que volver. Carlisle está llegando ya. Vamos…

Empezamos a correr de nuevo hacia casa de Darlene, Jake se desvió a la derecha esta vez, otro rastro. Mi padre me instó a que siguiéramos corriendo, Jasper y Emmett nos seguían de cerca y habían captado el mismo olor, iban a cubrirle.
Un pensamiento fugaz de mi abuelo en la mente de mi padre me perturbó. Corrí más, estaba fuera de la casa, parado junto a mi tía Rose que miraba la casa con ojos oscurecidos. Mi madre frenó en seco y se quedó atrás, entendí la razón cuando percibí el olor. Ese olor inconfundible. El olor a sangre. Frené mi marcha y comencé a andar por pura inercia hacia mi abuelo, me miraba con frustración, mi padre me cogió de los brazos antes de que tocara el suelo.
-Hemos tardado demasiado… -Mi ojos se anegaron de lágrimas, mi padre me abrazó fuerte-. ¿Qué vamos a hacer ahora? –Miré a mi padre-. ¿Van a convertirse? –Miró al suelo y después a mí… el olor era demasiado sutil, pero mi abuelo podía percibirlo-. ¿Están…?
-Debemos avisar a Seth.
-No… -Negué y miré a mi abuelo-. No…
-Hay que darse prisa… -Mi abuelo me miró apenado-. Lo siento, pero… tenemos que encargarnos de esto. No tardarán en darse cuenta de su ausencia… -Se acercó a mí arrastrando a Rose-. Tenemos que alejarnos un poco, hay que ser prudentes. Cuando lo descubran no tardarán en saber que no ha sido una muerte natural… no podemos arriesgarnos.
-¡Nessie! –Jake me levantó y me miró, miró a su alrededor y volvió a posar sus ojos en los míos. Le mostré lo que pasaba y se quedó paralizado. Mi padre palmeó en su hombro, Jake negó-. Seth va a odiarme, es mi culpa…
-Es nuestra en todo caso… -Contesté-. Teníamos que haber previsto esto, teníamos que habernos dado cuenta de las relaciones de las ubicaciones… es culpa mía, si no te hubiera involucrado Alice podría haberlo visto… Darlene va a odiarme.
-No es hora de culparse unos a otros… -Rose parecía irritada-. Hay que deshacerse de los cadáveres, no podemos exponernos tanto.
-Ocúpate tú de eso, Barbie… yo iré a dar caza a tres asesinos –Jake me miró-. No descansaré hasta hacerlos cenizas.

Besó mi frente y salió disparado, mi abuelo decidió colarse por la parte trasera de la casa para comprobar la situación, lo que vi por mi padre no me gustó nada. Habían atacado a Grace en la cocina, a Nick en las escaleras… ambos se habían arrastrado para estar juntos, sus manos estaban unidas y rotas, como si alguien les hubiera pisado cuando se tomaban la mano. Aún mantenían los ojos abiertos, se miraban ambos a los ojos.

Mi padre cerró los ojos al oír mi gruñido y empezó a alejarme de allí. Cuando estuve a su alcance, mi madre me abrazó y besó mi pelo, arrastrándome junto a mi padre. No entendía hacia dónde íbamos hasta que llegué a la antigua casa Cullen.
La espera fue larga y tediosa, mi abuelo llegó con mi abuela, mi padre se fue con el resto de mi familia y con la manada a dar caza a esos tres asesinos. Podía notar la angustia de mi madre y de mis abuelos, mi abuelo no paraba de pensar en una solución al problema que habían provocado, quemarlos parecía ser la única solución.
-¡Basta! –Grité y él se quedó paralizado-. Tenemos que esperar, no podemos hacer eso. Debería ser Darlene la que decida… -El móvil de mi madre sonó-. No podemos hacerle eso, es lo único que… sólo va a quedarle eso, elegir qué hacer con ellos. No le quites eso.
-Lo siento… yo sólo…
-Lo sé… -Asentí-. Pero deja de pensarlo, me tortura.
-Seth viene de camino… -Mi madre nos miró-. Va a la casa, no se cree lo que Jake dice, quiere verlo por él mismo.
-Deberíamos ir allí… -Mi abuela se angustió y miró a mi abuelo-. Aunque les hayas tapado… va a necesitar algún apoyo…

Mi abuelo asintió y nos movimos con agilidad, pude olerle antes de llegar. Estaba parado en la acera, mirando la casa con la mirada perdida, como si no se atreviera a entrar. No movió ni un solo músculo a pesar de que yo sabía que nos había detectado, que su nariz había captado nuestro aroma y su mente había procesado nuestras posiciones exactas.
Me acerqué temerosa, no podía captar ningún sentimiento de odio como esperaba, sólo desolación y confusión, ni siquiera rabia. Dos enormes lágrimas rodaron por sus mejillas, posé mi mano en su hombro y él no se movió. Pasados un par de minutos me miró.
-¿Qué voy a decirle ahora? –Tragué en seco y dos furtivas lágrimas se escaparon de mis ojos-. ¿Cómo voy a explicarle que he sido tan ciego que no he visto que ella había corrido peligro? ¿Qué no he visto que su familia estaba en peligro? –Acaricié con angustia su mejilla y él se desmoronó-.
¿Cómo pueden haberme elegido para proteger a la tribu si no he sido capaz de proteger a mi propia familia? ¿Cómo se lo explico?
-No lo sé, Seth… -Le abracé-. No lo sé… lo siento.
-Tienes que avisarla, Seth –Mi abuelo intervino-. Tenemos que quemar la casa, es la única manera de que sea una muerte creíble.
-No podemos hacerlo… ella no querría –Negó-. Tengo que… -Se alejó-. Tengo que hablar con ella… no sé que… -Negó marcando-. Tiene que volver, no puedo decírselo por teléfono…
-Debe saberlo ya, Seth –Mi abuelo le aferró por el brazo-. No tardarán en descubrir los cuerpos, tenemos que hacerlo antes de que amanezca –Se quedó paralizado y cerró los ojos al escuchar la voz de Darlene-. Seth…
-¿Darlene? –Dijo llorando-. Tienes… tienes que volver. Ha pasado algo… -Sólo una pregunta resonó en la cabeza de Seth, la pregunta de Darlene era clara… ¿Quién? Seth se llevo las manos a la cabeza y se mordió los labios, miró la casa y la misma pregunta volvió a resonar con urgencia. Suspiró y susurró con voz rota-. No sé como ha pasado… -Ella volvió a preguntar-. Lo siento tanto… -La angustia se palpó en el aire-. Debería haber estado aquí…
-¿Dónde Seth? –Preguntó ella llorando-. ¿Dónde estás ahora?
-Yo…
-Seth, dime dónde estás… dime que no es lo que estoy pensando.
-Lo siento mucho, en serio… lo siento tanto…

Seis llantos resonaron en mi cabeza, sólo tres fueron captados por mis oídos. Seth cayó de rodillas al suelo y yo le seguí para abrazarle, no paraba de repetir que lo sentía, no obtuvo otra respuesta que no fueran llantos. De todos los dones posibles, tenía claro cual escogería en esta situación. En ese momento querría haber poseído un don que pudiera llevarnos a ambos a través de la línea hasta ella, poder abrazarla y consolarla.

No sé cuanto tiempo estuvimos los tres colgados del teléfono, no sé cuanto tiempo lloramos juntos. El llanto de Seth se tornó en gruñidos cuando escuchamos agudos aullidos. Seth dejó caer el teléfono y empezó a temblar. Me aparté tan rápido como pude y el estalló en un lobo rabioso, cabreado. Salió corriendo y busqué a mi alrededor, busqué curiosos en las ventanas, di gracias a que fuera de madrugada. Miré a mi madre, después a mis abuelos. Salí corriendo siguiendo el rastro de Seth. Minutos después, el denso humo aturdía mi nariz, aquel almacén abandonado ahora se quemaba con ellos dentro.

Miré a Seth, tenía algo en su mano y lo miró, parecían colmillos. Miré a mi padre y me mostró que se los habían arrancado, a Jasper le pareció una buena venganza antes de quemarlos. Desvié la mirada ligeramente, Jake estaba a su lado, mirándome. Fue en ese preciso momento cuando tras él pude ver a Alice perder el enfoque, su mirada perdida y la manera en la que aferró a Jasper… estaba teniendo una visión. Mi padre reaccionó tan sorprendido y asustado como yo. Darlene había decidido.
¿Debíamos decírselo a Seth? Si se lo decíamos vendría, no podríamos ver nada con él cerca. Miré a Alice, la cual miró a mi padre, quedaban ocho horas. Tenía que llamarla y ganar tiempo para llegar, tenía que convencerla. Mi padre captó los pensamientos de todos los presentes, Jake y Seth me miraron fijamente.
-Tenemos que ir a Volterra –Pensé rápido-. Hay que darles aviso de lo que ha pasado, explicarles que ha sido porque iban a crear muchas sospechas… si otros van antes y dan otra versión nos darán caza, pensarán que queremos su trono y estaremos perdidos –Hablé antes que Seth-. Ella volverá con nosotros.
-Iré de todos modos… -Cerró su mano y me miró fijamente-. Debo ir.
-No puedes… -Alice atajó rápido-. Me dejarás ciega y no podremos encontrarla, sus amigos van a moverse y ella también.
-Seth… -Me miró, pero no podía mentirle de nuevo. No podía pedirle que confiara… sólo podía hacer una cosa-. Ella está pensando en hacer una tontería, quiere ir a Volterra. Quiere pedirle un favor a Fernando, pero no tiene en cuenta el peligro que corre.
-¿Y quieres que me quede aquí? ¿Estás loca?
-Van a necesitarte aquí…
-Y si nos presentamos en Volterra con un metamorfo… no les hará ninguna gracia, Seth… -Mi padre suspiró-. Sé lo que piensas, lo que sientes. Pero lo único que puedes hacer es esperar a que volvamos… no compliquemos más la situación.
-Me da igual si se desata una guerra… quiero ir, estar con ella.
-¿Estando ella en medio? ¿Crees que no la usarían de rehén si te presentas allí? Marco sabe lo que ella significa para ti, como Félix. No les temblaría la mano si creen que supones una amenaza. ¿Vas a ponerla en peligro?
-Pero… -Su mandíbula se tensó y sus ojos brillaron, miró a Jake y después a mi padre-. Mandarla de vuelta lo antes po
sible.
-Volveré con ella nada más llegar, lo prometo… -Seth me miró suplicante-. Te lo juro, la arrastraré conmigo si es necesario… -Su mirada estaba llena de dolor, de impotencia y rabia-. Haces lo correcto, Seth… mi padre tiene razón.
-No importa… -Negó-. No siento que sea así. Siento que algo va a salir mal, lo sentí antes de que se fuera…
-Todo irá bien… -Mi padre se acercó y tocó su hombro, miró a mi abuelo-. Carlisle, te necesitaremos. Marco sigue confiando en ti… Alice, necesitaremos tu don y también el de Jasper… -Ambos asintieron-. Bella y Esme nos acompañarán también… -Me miró-. Los híbridos sienten una especial simpatía por vosotras… -Asentí-. ¿Cuándo podremos salir, Alice?
-En cuatro horas, un avión a Roma –Sacó su móvil-. Haré la reserva.
-Tenemos que encargarnos de… -Mi abuelo suspiró-. Tenemos que tomar una decisión, Seth. Creo que tú deberías elegir.
-No podemos quemar su casa… -Negó-. Hay demasiados recuerdos allí.
-Es un buen plan, Jasper… -Mi padre le miró-. Quizá ese sea mejor, Carlisle… tenemos mucho que hacer en ese caso, sólo quedan tres horas para que amanezca…

Pude ver el plan en sus mentes, iban a colarse en la morgue del hospital, escoger cuerpos no identificados que se parecieran a los de Nick y Grace, colocarlos en su coche y fingir un accidente de tráfico. El fuego haría lo demás. Emmett y Jasper se encargarían de eso mientras mi padre y mi abuelo llevaban los cuerpos a la reserva para darles sepultura. Todos empezaron a moverse, aunque yo permanecía parada.

Mi madre y mi abuela me llevaron hasta casa, esperamos allí a que el resto de mi familia volviera, Jake se quedó con nosotras y nos acompañó al aeropuerto mientras Leah se encargaba de organizar las rondas.
Me despedí de Jake con amargura, me hubiera gustado que él y Seth pudieran acompañarnos, pero mi padre tenía razón, lo tomarían como una provocación…

El vuelo fue realmente largo, al menos me lo pareció. Alice estaba completamente concentrada en sus visiones, cuando vio lo que Darlene les iba a pedir me sentí realmente frustrada, no íbamos a llegar. Todo se volvió mucho más angustioso cuando se mezcló con los híbridos, un punto ciego para Alice. Sólo podía pedir que no aceptaran, no sabía cómo podría acabar aquello… había funcionado con algunos, pero quizá no con ella… era arriesgado. No aceptarían.

Al llegar a Roma la angustia fue creciendo en mí, Jasper intentaba controlarme, pero era prácticamente imposible… el viaje hasta Volterra fue tedioso, mi corazón iba más acelerado de lo normal. Cuando vislumbré las murallas de aquella ciudad mi corazón se encogió, el olor a vampiro se extendía por la brisa que corría y llenaba mis pulmones, mi preocupación aumentaba a cada segundo.
Nada había cambiado allí desde nuestro último viaje, un día soleado… no nos ayudaba en nada, aunque Alice había sido rápida escogiendo los coches más adecuados. Aparcamos justo en la puerta, una pareja charlaban sentados en la fuente.
-Ve delante, dejaremos los coches en el callejón y entraremos por allí… -Mi padre me miró-. La guardia ya nos ha visto. Marco está subiendo a la recepción… -Mi padre gruñó-. Lo han hecho.
-¿Qué? –Mi corazón se encogió-. No puede ser…
-No está aquí, Marco sabía que no tardaríamos a llegar y ordenó que se la llevaran, sabe bien que mientras esté con híbridos no la localizaremos… ¡Nessie!

Bajé del coche llena de furia, Félix y Alec me cogieron en el momento que traspasé la puerta y Marco torció su cabeza pesadamente.
-Los híbridos sois demasiado impetuosos… -Sonrió débilmente-. Me agrada notar la presencia de Jasper, parece ser que tú le necesitas mucho más que nosotros…
-¿Dónde está ella?
-No tengo idea –Negó-. Sólo les dije que no quería que permaneciera aquí, no quiero un enfrentamiento con tu familia… -Suspiró-. Si eres tan amable de calmarte, tu padre sabe bien que no te haré daño, ninguno lo haremos. Creo que deberíamos ir a hablar a un sitio más tranquilo.
-Vamos con ella… -Mi padre y Jasper entraron como un tornado, los coches arrancaron-. El resto entraran por el callejón… -Me miró-. Deberíais soltarla, no quiero enfadarme…
-Por supuesto… -Hizo un gesto y me soltaron-. Ya he dicho que no quiero enfrentamientos. Acompañadnos… vuestra familia será recibida y llevada a la sala… -Le seguimos y llegamos a aquella espeluznante sala, odiaba el olor de aquel lugar, mi familia esperaba allí rodeados por guardias-. Carlisle, hermano… me alegra verte –Palmeó en su hombro y se sentó en su lugar-. Siento este percance… Ha sido cosa de los híbridos, no consultaron conmigo.
-¿Y te deshaces del problema?
-Carlisle… -Marco gruñó levemente y echó a la guardia, Félix se sentó a su lado mientras todos abandonaban la sala-. Tu hijo no entiende mi posición, espero que tú lo entiendas mejor. Cuando Fernando me avisó ya era tarde… sólo quería que entendierais que no es algo en lo que yo haya colaborado, debéis buscarlos a ellos.
-Sabes bien que son puntos ciegos para Alice… ¿Cómo localizarlos?
-No quise saber dónde iban… -Miró a Félix, sentado a su lado-. ¿Alguna idea?
-Marta mencionó algo sobre ti antes de irse… -Me miró y sonrió-. Entre híbridos os entendéis más, ¿no?
-Berta… -Dije junto a mi padre, Félix alzó la ceja-. ¿Dónde está ahora?
-No tengo idea alguna… -Miré a mi padre, decía la verdad-. Pero no creo que entre vosotros tengáis problema para localizarlos… -Sonrió mostrándome un cuarzo blanco, brillaba-. No tardará a llamaros, Marta quería avisarte en el momento… me lo dijo antes de partir.
-Entonces… ¿Tengo que esperar a que me llamen?
-Eso parece… -Marco se acomodó-. Sentimos no servir de más ayuda… -Me miró y suspiró-. Nos hemos jugado mucho, si cualquier vampiro se entera de lo que ha pasado, de que una humana ha estado aquí y ha recibido tal ayuda… será nuestro fin. Comprende mis razones para alejarla de aquí. No podía mantenerla a salvo con la guardia cerca, la alejé y la protegí por la amistad que nos une. Espero que apreciéis el gesto como sé que Carlisle lo hará.
-Lo haremos Marco… -Mi abuelo asintió serio-. Cuando ella esté a salvo con nosotros.

Asintieron y abandonamos la sala, mi abuela y mi madre me escoltaron, Alice hablaba con Jasper delante y mi padre con mi abuelo a mis espaldas. Salimos por el callejón y montamos en los coches, tenía que explicarle a Seth… ¿pero cómo?
Mi móvil sonó en ese preciso momento, Erica llamaba. Descolgué al instante y se disculpó con urgencia.
-Espero que…
-Sólo decirme dónde estáis. ¿Ella está con vosotros?
-La tenemos en el castillo de Berta, hemos venidos todos, Fernando quería solucionar el problema, pero no nos atrevemos a hacer nada… he preferido avisarte.
-Vamos de camino. No dejes que nadie se acerque a ella, por favor.

Colgué y Félix apareció, nos ofreció sus coches y dijo que él se encargaría de devolver los nuestros. Iríamos mucho más rápido con los de él, eso estaba claro. Tardamos seis horas en total, anochecía cuando llegamos, lo que ayudaba en cierta manera. Saldríamos antes de que amaneciera si era posible, ahora sólo podía pensar en ver a mi amiga y sacarla de aquella locura.

Nos recibieron con caras largas, Isabel parecía haber llorado y se acercó a mí con la cabeza baja, cuando me miró… no supe cómo reaccionar.

-Lo siento. Pensé que podría controlarlo, pero no ha sido tan fácil como otras veces. Realmente debí haber probado en humanos antes de hacerlo, pero acudió a mí tan desesperada que no pude negarme… -Me miró de nuevo-. Lo lamento.
-Yo podría arreglarlo… -Fernando me miró-. Quizá así…
-O quizá la mates… -Mi padre gruñó-. ¿Cómo no lo pensasteis antes?
-No importa… -Intervine-. Sólo queremos verla…
-Seguidme… -Berta se levantó y suspiró-. Estaba nerviosa y asustada, he pensado en que un sueño quizá fuera reparador… y arreglaría algo.

La seguimos hasta una habitación, el estilo barroco estaba patente en pasillos y en el cuarto. Un bulto bajo las sábanas se movió, miré a mi padre tan sorprendido como yo.
-¿No la bloqueas? –Negué-. Es imposible… -Vimos repetidas una y otra vez la misma secuencia, cómo la habían traído hasta aquí-. Hablaré con Carlisle…
-Está aterrada…

Me acerqué a ella y destapé la sábana. Mi corazón se encogió, era su olor, eran sus ojos… el miedo y la confusión me abofetearon.
-Tranquila… -Acaricié su cara, era como si alguien hubiera borrado todo cuanto había en su cabeza-. ¿No me recuerdas? –Negó, me entendía… pero era como si estuviera viendo la mente de Wendy… era como si fuera un bebé, no tenía apenas recuerdos, sólo el dolor y cómo había despertado. El cuerpo de aquella chica que aparentaba los quince, tembló-. No voy a hacerte daño… -Mi padre y mi abuelo aparecieron, se sorprendieron como yo-. Está aterrada…
-Dejémosla descansar… -Mi abuelo la miró y suspiró abrazándome-. Pensaremos en algo, lo arreglaré… no te preocupes…

Nos alejamos y mi padre y mi abuelo se fueron a otra habitación, quise estar presente. Pensaban porqué había sucedido. Me parecía una estupidez, pero mi padre me dijo que quizá si sabían cómo había pasado, descubrirían cómo arreglarlo. Mi padre hizo un par de preguntas a Fernando e Isabel, conversó con mi abuelo y llegaron a la conclusión de que había sido por el propio proceso, había desecho conexiones neuronales al azar, básicamente la habían “reseteado”. Eso no sonaba nada bien, pero había algo más que me angustiaba… ¿Cómo decírselo a Seth? Tenía que llamarle.

Marta me tendió una cámara de video, al parecer nos había dejado un mensaje… me senté en una sala a solas y encendí la grabación… su cara estaba roja, sus ojos hinchados…
-Yo… -Se limpió una lágrima-. Sé que no vas a estar de acuerdo con lo que voy a hacer… -Miró a cámara-. Te quiero, Seth. Eres lo mejor que ha podido suceder… no sólo a mí, en la vida de cualquiera. Sé que tú has estado dispuesto a darme todo, has renunciado a tantas cosas por estar a mi lado… y quiero compensarte. Sé que te sentirás culpable, siempre lo haces… -Sonrió levemente y negó-. Pero es mi decisión. Lo llevo pensando unos días, quería hacerlo por ti. Quería poder brindarte la oportunidad de hacer lo que más te gusta además de estar a mi lado, quiero que sigas con tus hermanos. Sé que es lo que te llena, lo que te apasiona y no te importa hacer… es la segunda parte más importante de tu vida. Tú me diste mi espacio, ese espacio que tú no quieres tener… así que la única manera es esta. Poder aprovechar cada momento a tu lado, poder alargar la única parte de mi vida que permanece intacta y me hace feliz. Era algo que ya había pensado, lo iba a posponer pero ahora ya no importa… -Negó-. Nada me importa ya excepto tú… y sé que no voy a volver a tener una oportunidad así, no voy a volver a estar tan cerca de ellos y tan lejos de ti. No me importa lo que pueda pasarme, aunque no llegara a verte de nuevo. Quiero que sepas que tú… tú has cambiado mi vida, Clearwater… -Sonrió limpiando sus lágrimas-. Y sólo quiero intentar compensarlo porque… -Su voz se rompió y volvió a limpiar sus lágrimas-. Te quiero. No lo olvides nunca… eres lo único que me queda. Y no veo otra razón mejor para hacerlo… Quizá con esto se descubra que todas pueden hacerlo… ¿Te imaginas? –Sonrió débilmente-. Podríamos ser algo así como Nessie, pero sin genes de vampiro… -Negó y secó sus lágrimas de nuevo, se acercó a la cámara y miró de nuevo sonriendo-. Te amo, te quiero… te adoro, Clearwater… no lo olvides.

Limpié mis propias lágrimas mientras mi madre y mi abuela me miraban apenadas desde la puerta, sonrieron con pocas ganas y mi abuela me tendió un pañuelo sentándose a mi lado y abrazándome débilmente.
-Quizá… -Suspiró y me miró-. Quizá un ser más poderoso ha hecho esto. Sería injusto hacer pasar a una persona tan buena por una pérdida así. Después de todo lo que ha pasado, es como una oportunidad para ella de empezar de cero, de olvidar su pasado y todo el dolor… -Asentí débilmente-. Ahora Seth cuidará de ella a cada instante, va a ser feliz y no recordará todo lo que ha tenido que pasar, todo lo que ha sufrido… simplemente será feliz.
-¿De verdad lo crees así?
-Es lo que he estado pidiendo las últimas horas.

Asentí y me sentí capaz de poder explicarle algo mejor la situación a Seth. Busqué el móvil de Darlene entre sus cosas, marqué el número de Seth y respiré hondo para ordenar mis ideas y poder explicarme.
-¿Darlene?
-Seth… -Suspiré-. Soy Nessie, Dar no puede hablar ahora mismo…
-¿Está bien?
-Sí… asustada.
-Déjame hablar con ella…
-Realmente no es buena idea, Seth…
-Nessie… Déjame hablar con ella, no quiero gritarle o… sólo quiero saber que está bien y que sepa que la estoy esperando…
-Seth… -Suspiré de nuevo-. Ha pasado algo. Ella está bien… al menos físicamente. Cambiada. Es… no sé cómo explicártelo, Seth. Pero hemos llegado tarde.
-Ness… -Escuché un gruñido-. Dime qué ha pasado, dime que no han hecho lo que estoy pensando, te juro que…
-Seth, ella vino para pedirle a Isabel que la ayudara con su don…
-¿Su don?
-Quería ser más joven. Quería hacerlo para que pudierais estar todos en fase y acabar con vuestra misión. Tenía dudas, pero parece que lo único que la retenía en cierto modo era cómo explicárselo a sus padres… cuando la llamaste tomó la decisión…
-¿Qué?
-Seth, eres lo único que le quedaba, lo que más ama…
-Déjame hablar con ella…
-No creo que pueda… -Suspiré-. Algo ha ido mal… y no ha salido como esperaban, Isabel pensó que sería como con nosotros, pero… ha cambiado por completo, su cuerpo y su mente.
-¿Qué quieres decir?
-Seth, no recuerda nada. Su mente está prácticamente en blanco.
-Me da igual, quiero hablar con ella… iré de inmediato.
-No es buena idea Seth. Vamos a intentar arreglarlo… sólo se asustaría más, no sabría con quien está hablando y… sería angustioso para ambos.
-Nessie… no hagáis nada. Yo seré su memoria, me da igual todo. Sólo quiero que la traigas de vuelta… sólo eso –Mi padre me miró y asentí-. Tráela conmigo.
-Está bien… -Suspiré-. Intentaré mostrarle lo ocurrido.
-No… quiero ser yo quien se lo cuente. Sólo quiero que volváis. Sólo quiero abrazarla.
-Está bien, Seth… tomaremos el primer vuelo de regreso.

Subí a la habitación y ella dor
mía, me senté en la cama y abrió los ojos. Estaba aterrada, así que tomé su mano y le mostré lo más agradable que pudiera recordar… Strawberry Bay. Pareció sentirse mejor, así que seguí mostrándole lugares hermosos, Jenner, Venecia, Nueva York… Me miraba y parecía querer comunicarse, pero no sabía como. Iba a ser difícil.
Mi padre y mi abuelo entraron en la habitación, Berta y los híbridos se colaron y empezaron a decir palabras al azar. Mi abuela se sentó a mi lado y me pidió que le mostrara lo que era un avión y como se escribía. Ella lo pronunció y Darlene lo intentó imitar… estábamos enseñándole a hablar con la ventaja de que yo podía meterme en su cabeza y ayudar. Uno a uno, fueron diciendo palabras al azar.

Estuvimos toda la noche con ella, conseguimos que aprendiera palabras básicas, a formar frases. Cuando amaneció parecía cansada, Alice nos indicó que había otro vuelo que salía desde Friedrichshafen a Londres por la tarde y un vuelo que salía por la noche de Londres a Seattle… llegaríamos de noche allí, un par de horas antes del amanecer. Asentí y mi padre me indicó que iba a llamar a Seth y se iba a hacer cargo de explicarle más detalladamente la situación. Sentí que me quitaba un gran peso de encima, me acomodé al lado de mi amiga, parecía más tranquila a mi lado.
-Nessie… -Me miró angustiada-. ¿Por qué no te recuerdo?
-Pues… -Suspiré y lo pensé detenidamente-. Hiciste algo muy valiente… pero salió mal –Me miró confusa-. Fue un accidente, fue sin mala intención… pero todo se arreglará.
-Tus padres… -Me miró-. Son buenos –Sonreí-. ¿Dónde están los míos?
-Están… -Suspiré y la miré-. Lejos.
-¿En casa?
-Algo así… -La abracé y suspiré-. Deberías descansar. Mañana tendremos que hacer un largo viaje… te esperan.
-¿Los lobos?
-Entre otros… -Sonreí-. Pero es un secreto… nadie sabe que son lobos, todos creen que son humanos… -Me miró confusa-. Lo siento, es demasiada información… -Suspiré y la abracé-. Deberías dormir, en serio…
-¿Puedes volver a decirme quien es cada uno? No me gustaría no saber sus nombres… -Asentí y empecé por él, ella sonrió-. Me gusta…
-Lo sé… tú a él también… -Mi abuela entró y la arropó, un gracias resonó en su cabeza-. Te da las gracias, abuela…
-De nada… -Mi abuela besó su frente y ella tembló levemente-. Lo siento, estoy fría… -Sonrió-. Descansad las dos… mañana será un día duro…
-Gracias… -Repetí-. ¿Tienes frío?
-¿Ella no me ha escuchado?
-No… -Sonreí-. Sólo yo puedo oír lo que piensas… y mi padre. Somos especiales… no somos como tú o como ellos… -Le mostré a Claire, Emily, Kim…-. Es otro secreto que no puedes compartir con nadie, sólo con nosotros…
-¿Por qué?
-Porque la gente tendría miedo, nos intentaría hacer daño… -Pareció confusa de nuevo-. No te preocupes, por esta noche es suficiente… Duerme.
-¿Sabes toda mi vida?
-Gran parte… -Sonreí-. ¿Quieres saber algo en concreto?
-¿Cómo nos conocimos? Me gustaría saber cómo os conocí a cada uno…
-Lo intentaré…

No quise mostrarle muchas cosas, sólo momentos concretos que no pudiera relacionar con su vida pasada, con sus padres o con nuestros amigos humanos. Sólo la manada, sólo vampiros… sólo vestigios de su vida en Forks. No tardó en dormirse y me agradó ver que en sus sueños estábamos todos, intentaba de alguna manera asimilar toda la información, quién era pareja de quién, quienes eran familia, mi abuelo, Sue, Seth… Seth. Pensaba constantemente en él de manera inconsciente.

Alice nos despertó, toda la casa olía a chocolate. Cuando bajamos a desayunar mis iguales nos esperaban para empezar. Cuando nos despedimos, Isabel y Fernando intentaron disculparse por enésima vez, nos pidieron que llamásemos si necesitábamos cualquier ayuda, incluso contra los vampiros que acechaban la manada.

Darlene no soltó mi mano en ningún momento, cuando íbamos en el coche y veía algo que le gustaba tiraba de mi mano inocentemente preguntándose qué nombre tendría. La ayudé mostrándole todo lo que ansiaba saber. Una vez en el aeropuerto se fijó en mi padre y en mi madre, se besaron levemente y ella se sorprendió. Una pareja se besó más apasionadamente y le expliqué como pude qué significaba eso del amor, de las parejas… también lo que suponía la amistad. Eran conceptos realmente complicados, pero parecía esforzarse por comprender.

Una vez en el avión ella miraba por la ventanilla y se preguntaba constantemente si sus padres eran tan amorosos como los jóvenes o tan sutiles como los míos. No supe qué decirle en ese momento, así que sólo sonreí… intenté reprimir las ganas de llorar y de contarle que jamás iba a verlos en esa situación. Jamás volvería a verlos. Me angustié por el sólo hecho de imaginarme en la situación de mi amiga, la cual miraba todo con gran inocencia y curiosida
d… no podía soportarlo y mi padre me cambió el sitio para darme un descanso que agradecí.
Cuando llegamos a Londres ella parecía angustiada por toda la gente que se movía a su alrededor, curiosa y nerviosa. Se quedó parada mirando un mapa, un punto que acarició con confusión. Notting Hill. Hyde Park. Holland Park. Pareció recibir pequeños flashes de cada uno de esos lugares y me miró confusa, mi padre se acercó con una sonrisa.
-Estuviste una buena temporada viviendo aquí… no te alteres por eso. Quizá vayas recordando las cosas poco a poco… -Me asusté y mi padre me miró con cautela-. Quizá cuando estés en casa recuerdes más cosas… debemos irnos ya.
-¿Viví aquí? –Asentí-. ¿Cuánto tiempo?
-Un par de años… casi tres –Me miró confusa de nuevo-. Te lo explicaremos todo en casa, ahora tenemos que irnos… -Me miró con algo de desconfianza y sonreí-. Seth insistió mucho en contarte todo él, si te lo cuento quizá se moleste… y no me gustaría.
-Seth… -Me miró preocupada-. ¿Hay cosas de él que deba acordarme para que no se enfade?
-Pues… -Sonreí-. Sólo que eres muy importante para él y él para ti… y que si no nos vamos ya el avión se irá sin nosotras y se enfadará conmigo…

Sonrió ampliamente y tomó mi mano para seguirme. Estando en el avión podía ver las miles de dudas en su mente. ¿Quién era realmente Seth? Se fijó en unos niños jugando, la niña pequeña se golpeó fuerte contra el reposabrazos y lloró desconsolada hasta que su hermano pateó el reposabrazos y acarició la cabecita de la niña. Pareció no entenderlo y se lo expliqué, la niña lloraba más por el susto y su hermano llamó su atención para que se olvidara, se preocupaba mucho por ella. Era un buen hermano.
-¿Es un lobo?
-No… -Reí-. Es un niño… -Le expliqué mediante mi don que sólo eran hermanos de manada, los únicos hermanos de sangre eran Seth y Leah-. ¿Lo entiendes?
-¿Tengo hermanos? –Me quedé algo paralizada y negué, ella hizo una mueca-. ¿Tú tampoco?
-No… -Sonreí-. Pero te tenía a ti, que eras como mi hermana… -Me miró confusa-. No somos familia, pero cuando quieres mucho a alguien y le conoces bien… una forma de hablar es decir que es como tu hermano o hermana. Suele decirse de los buenos amigos.
-¿Soy mala amiga por haber olvidado todo?
-No… -La abracé-. Eres estupenda.
-Tengo miedo… -La miré cautelosa-. No quiero que se enfaden conmigo, por lo que me dices eran personas importantes.
-No van a enfadarse… -La abracé más fuerte-. A las personas importantes se les perdona casi todo… sobre todo a las muy importantes.
-¿Hay unas más importantes que otras? –Asentí-. ¿Quiénes son los más importantes para ti?
-Pues… -Suspiré-. Jake… mis padres. Mi familia y amigos…
-¿En ese orden? –Asentí y ella frunció los labios para mirarme angustiada-. ¿Hay alguien que sea más importante que otro?
-¿Tú que sientes?
-Que tú eres muy importante… -Sonreí y la imagen de Seth se coló en su cabeza, yo asentí-. ¿Él es más importante que tú? –Asentí-. ¿Qué tengo que hacer cuando le vea? ¿Qué debo decir?
-Pues… -Recordé las palabras que Emmett me dijo una vez-. Lo sabrás cuando los veas. Sabrás qué decir a cada uno.
-¿Y si hago algo no apropiado?
-Todo irá bien… -La abracé-. Descansa, queda mucho para que lleguemos y necesitas reponer fuerzas, no quiero que se enfaden porque estés cansada al llegar.

Asintió y se quedó dormida en mi hombro. Seguía angustiada por cómo iban a reaccionar todos, por si cometía alguna especie de error de protocolo. Acaricié su cabeza y le mostré cómo debería saludar a las chicas, cómo a los chicos… pero no me atreví a mostrarle cómo debía saludar a Seth. No a él.
La observé dormir, parecía una verdadera adolescente, me recordaba en cierta manera a la niña que había conocido, pero completamente distinta. La zarandeé levemente mientras el avión descendía, aún le quedaba un rato para ver a Seth.

En el momento que encendí el móvil tenía varias llamadas, cuatro de Jake y diez de Seth. Llamé a Jake, seguro que estaban juntos.
-¿Dónde estáis?
-Acabamos de llegar… El avión se ha retrasado.
-¿Un día entero? –Jake resopló-. Vamos a buscaros, Seth ya ha salido para allí, no he podido retenerlo… deberíais haber avisado.
-No dejes que venga… -Darlene me miró y mi padre se acercó para distraerla-. Está angustiada, debería darle tiempo a prepararse…
-Intentaré hacerle volver… pero va a ser casi imposible… -Un aullido agudo se escuchó de fondo-. Nessie… no os mováis de allí.
-¿Atacan?
-Eso creo… te llamo en cuanto sepa algo…

Mi padre me miró y asintió. Me acerqué con ellos y empecé a intentar explicarle a qué sabían todas esas cosas que ella miraba con curiosidad. Alice parecía buscar sin poder llegar a ver nada, sólo nos veía en un bosque desaparecer. Eso angustió a mi padre.

Decidimos desayunar allí, ya estaba amaneciendo y Darlene necesitaba recuperar fuerzas. Parecía saborear todo despacio, intentando asimilarlo todo, color, textura, sabor, olor… sonreí sin poder evitarlo, parecía ajena a toda la locura que se había creado en las últimas semanas.

Empecé a angustiarme por no recibir llamadas, mi padre lo notó y decidió junto a Jasper que deberíamos ir por si necesitaban ayuda. Percibimos dos aromas inigualables, me giré y salí corriendo a los enormes brazos de mi tío Emmett y a la cálida sonrisa de Rose.
Alice, mi madre, Darlene y yo fuimos en el coche de Rose. Papá, Jasper y los abuelos con Emmett. Intenté mantener el contacto con mi padre, él era más efectivo a la hora de notar pensamientos ajenos que yo, así que si estaba cerca lo sabríamos.

Quil estaba esperando en la mansión Cullen, tardó más a percibirnos pero en cuanto lo notó sus pensamientos fueron engullidos por los de Seth y su angustia por verla. Bajamos del coche cuando mi padre y yo vimos a la vez cómo atacaban a Seth por la espalda, Quil salió disparado como el resto de mi familia, no lo entendieron hasta que se lo mostré pero todos siguieron en el acto a mi padre.
Darlene me miró asustada y yo no supe manejar la situación, sólo me senté en las escaleras sujetando mi cabeza y esperando mantener contacto con mi padre.
-Han atacado a Seth.
-¿Quién?
-El último vampiro que amenaza a la manada. Están luchando. Seth le araña y lo manda lejos, no puede levantarse…
-¿Qué? –Parecía angustiada e incluso a punto de llorar, se preguntaba porqué sentía eso-.
-Te importa… es preocupación… -Salté-. ¡Sí!
-¿Qué?
-Mi padre… ¡le ha pillado en pleno salto…! -Reí-. Mi abuelo está llegando, Seth está intentando levantarse… Jake ha llegado y le ha hecho salir de fase para que mi abuelo le ayude… –Me levanté-. Vamos… debemos ir. ¡Corre!

Empecé a andar y ella me miró con miedo, le tendí mi mano sonriendo y ella la cogió con pocas ganas andando de modo que tenía que tirar de ella para que avanzara. Su corazón se aceleraba y tenía miedo de verlos, no quería verlos, quería salir corriendo.
Un lobo gris apareció a sus espaldas, gruñó y pensó que quién era esa extraña. Cuando Darlene se giró dio un pequeño salto y se asustó.
-No te asustes, Darlene… -Quil bramó sorprendido-. Es Quil, ¿recuerdas?
-Muy grande… más de lo que me dijiste… -Se estremeció-. Gris… -Sonrió y lo acarició-. Tú eres el novio de Claire… -Vera llegó sorprendida, ella sonrió-. Lobo blanco… Vera –Se acercó y la abrazó-. Sois suaves… más de lo que dijiste, Nessie.
-Debo irme… Jake me
espera. Ellos cuidarán de ti hasta que venga de nuevo… quiero comprobar que Seth está bien…
-¿Le está haciendo daño? –Hice una mueca y asentí débilmente. Ella imitó mi mueca-. ¿Debería patear algo o acariciarlo?
-Pues… -Reí asintiendo-. Deberías acariciarle a él cuando le veas.
-¿Darlene? –Leah se la quedó mirando con los ojos muy abiertos-. No podía creerlo… -Miró a Vera y después a mí-. ¿Qué te han hecho?
-Hola… -Dudó-. Leah.
-¡Ay madre! –Reí y me encaminé escuchando la conversación y el tono socarrón de Sean-. ¿Te han maqueado?
-No seas bruto, Sean… -Sam suspiraba-. Bienvenida a casa, Darlene.

1 comentarios:

Write comentarios
14 de febrero de 2011, 10:44 delete

estas de broma??? a mi personalmente me ha encantado!!!!!asiq yo x lo menos no te odiare! jajajaja,
spero que este final alternativo tenga unos cuantos muxos cap.!!!xDD

Reply
avatar